Capítulo 21

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Entramos a su casa, Parky nos a bordo de inmediato así que antes de cualquier cosa lo sacamos a dar una pequeña vuelta de unos 10 minutos, hablamos de cosas que veíamos y así, cuando llegamos a la casa, nos lavamos las manos y nos sentamos en el comedor a comer fruta, una vez satisfechas, lavamos los platos y nos fuimos a su habitación.

- ¿Ya pensaste en lo que te dije? – Le pregunte quitándome los zapatos.

- ¿Sobre el premio? – Asentí viendo cómo se sentaba en la cama, me acerque sentándome a horcajadas sobre ella que inmediatamente me tomo por la cintura.

- Prefiero que me sorprendas – Decía acercándose.

- Sera un placer – Sonreí antes de besarla – Pero si pierdes – Mordí su labio inferior – Te tocara castigo.

- Por como lo dices me tientas a perder – Jadeo.

- Solo debo decir que – Mi respiración era más rápida cada que presionaba sus dientes en mi cuello – El premio es mucho mejor... - La mire - ¿No tenías sueño?

- ¿Quieres que me duerma?

- Que ni se te ocurra

La empuje para que se acostara en la cama arrojándome a sus labios.

POV Jen

No tenía una explicación lógica de cómo era posible que Amy me excitara tan rápido, aunque el beso e ningún momento fue lento, me besaba con voracidad, con deseo, en el segundo que tomamos para respirar aproveche para girarla y colocarme sobre ella para volver a besarla, con mi pierna le hacía presión en su entre pierna provocando gemidos de su parte.

Cuando baje a su cuello, besándolo y mordiéndola con un poco más de presión solto un gemido que retumbo en las paredes de la habitación aumentando significativamente la humedad que ya tenía, sin pensarlo y como pude empecé a desvestirla, teniendo que detener los besos por momentos.

Una vez completamente desnudas, me detuve a mirarla un momento, tenía la cara roja de lo excitada que estaba, la levante completamente de la cama y la lleve a la primera pared que encontré apoyándola en ella, le levante una pierna y ella la apoyo sobre la mesa de noche para estar más cómoda, la bese lenta y tortuosamente, con una mano jugaba con uno de sus pechos, con solo tocarlos provocaba sus gemidos, estaba muy sensible, no quería ser muy brusca o no por ahora así que baje la mano hacia mi objetivo principal comprobando lo húmeda que estaba, sonreí rompiendo el beso.

- Si no me coges en este instante te juro que te dejo en abstinencia un mes – Me dijo con la voz ronca, ágilmente introduje un dedo en ella viendo como cerraba los ojos con fuerza - ¡DIOS SI!

Agregue a otro dedo provocando que me tirara del pelo, la mire a la cara mientras la embestía con mis dedos con velocidad me miraba con deseo, podía ver claramente sus facciones como abría ligeramente la boca, cerró los ojos y sus gemidos se volvieron más fuertes, sentía como apretaba alrededor de mis dedos, acelere los movimientos, pocos segundo después la vi llegar a su primer orgasmo en todo su esplendor, escucharla, ver cada una de sus expresiones de placer, no sabía cómo no había tenido un orgasmo también.

- Mas – Gruño, aún tenía los ojos cerrados – Dame más.

Volví a mover los dedos dentro de ella, me pedía más, que fuera más rápido, me tomo por la nuca para llevarme a su cuello, la mordí, trataba de contenerme, pero ella no me lo ponía fácil, me clavaba las uñas en la nuca, sus gemidos retumbaban en mis odios.

- Rápido – Gimió – ¡Mas por favor! – Sentí su cuerpo temblar avisándome que estaba al punto de llegar otra vez - ¡Ya casi! ¡Me ven... Dios! ¡Jen sí! – Grito llegando nuevamente al orgasmo, me clavo las uñas en los hombros bajándolas hasta mis brazos.

Quiero conocerteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora