Capítulo 2.

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Colby

Ya habiamos planeado como asaltar la casa de los Armstrong. Mientras tanto, fuimos a un restaurante con pelucas para no ser reconocidos, y con el dinero robado compramos comida.

Ibamos de alcantarillado en alcantarillado, haciamos cualquier cosa para pasar el tiempo. Empezamos a hablar de las chicas que nos gustaban en el horfanato.

- A Joe le gusta Tanya! - Jon coreaba molestándolo.

- Y a tí te gusta Colby! - Joe exclama divertido.

- Guacala! - dijimos ambos al mismo tiempo mirándonos con asco el uno al otro.

- Admitir el amor que se sienten es fundam... -

- Vete al diablo! - lo recriminé con repudio.

- Si me voy, nos vamos los tres y lo saben - dijo divertido aunque en el sentido literal hablaba en serio.

- Saben? A mí me gustaba Hayley, la rubia que siempre estaba con esos dos nerds - Jon confesó. Ambos lo miramos con una ceja levantada.- Oigan, entiendo que soy guapo, pero no me acosen! - exclamó divertido para luego partirnos a carcajadas los tres.

- Qué hora es? - Joe habló después de parar de reírse.

Jon mira en su reloj de mano que le robó a un borracho en un bar estando distraído en la barra pidiendo más cervezas.

- Las siete en punto, mi estimado Joe - utilizó el tono de voz de Sherlock Holmes, lo que le salió pésimo.

- Colby, no crees que ya sea hora? - Joe me miró sentado en el piso con un brazo estirado sobre su rodilla flexionada.

- Yo dije a la madrugada - le recuerdo.

- Está bien, pero no llores - Jon dijo sacudiendo la cabeza de forma extraña.

Hayley

Aún seguía oyendo las voces de mis padres pidiendo ayuda y nadie los socorría. Era tormentoso! Yo sólo quería dejar de sentir esto. Quiero morir e ir con ellos para descansar en paz. Por qué sigo viva en este mundo tan podrido?

Estaba profundamente en mis pensamientos sentada en esa esquina por horas que no me dí cuenta de la presencia de Jeremy y de su voz que hablaba conmigo.

- Hayley? Hayley! - parece desesperado.

- Jeremy! - exclamo feliz de verlo preocuparse por mí - Y Taylor? - le pregunto decepcionada de que Taylor no se preocupe por mí.

- Ya sabes. Jugando con su x-box - responde.

Me decepciono tanto que siento que caigo en depresión. Jeremy me levanta y me lleva a la cocina, me sienta en un taburete para ir hacia el microondas.

- Quieres café o algo? - me pregunta tiernamente.

- Café, por favor - le pido con un tono de voz triste.

- No te preocupes por mamá y papá, ellos están felices de saber que estamos bien - trata de animarme pero ese no era el problema.

- Eso no es el problema - le confieso.

- Y entonces?

- Es Taylor, no le importo y ya no me soporta - fui honesta.

- Hayley, Taylor te quiere mucho. Lo que pasa es que a veces la enfermedad mental que tienes no es conpatible con nosotros - parece confesar que está de acuerdo con Taylor en ser molestía.

- A qué te refieres? - le digo molesta.

- Que te queremos de todos modos - me dice y yo no sé que responder a eso.

Recuerdos y la EsquizofreniaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora