Capítulo 46.

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Taylor

- Espero que este maldito plan funcione - susurró Jeremy.

- Shh - Karla hace el gesto de llevar el dedo índice a la boca para que se calle - Quiero oír lo que sucede - murmura aún más bajo.

Aida, Jeremy, Karla y yo estábamos escondidos en ese matorral. Vinímos como parte del plan que ideó Colby por alguna emergencia. No quisimos meter a la policía de por medio ya que ellos estropearían el plan.

Colby

- Revísenlos! - ordenó Anibal a tres hombres apuntándonos. Ahora sí estamos en graves problemas.

Un tipo cabello castaño de mi misma altura me revisó a mí. Maldición, encontró todo!!

- Tres pistolas calibre 45, y una granada - afirma ese hombre sacándome todo el armamento.

- Dos pistolas calibre 44 - aclaró ahora el que revisó a Joe.

- Una pistola calibre 45 también escondido bajo su chaleco - especificó el que revisó a Jonathan.

- Yo supe desde un principio que no vendrían desarmados. - confesó Anibal acercándose a mí.

- Es que tú no eres de fiar - desafió Jonathan.

- Como no cumplieron parte del trato, tampoco lo haremos nosotros. Pero como ellas han sido obedientes, haré algo por ellas. - el dirige su vista a ellas dándonos la espalda - Chicas, escuchen! Ustedes deben tomar una dolorosa decisión... Deben elegir a un miembro de The Shield para que vuelvan a trabajar para mí. Volveré a las andadas ya que mi única razón para dejar esto se ha ido. Vamos, las dejo en sus manos! - concluyó mirándonos.

- No! - exclamó Hayley.

- Cada una da un nombre y yo veré si es apto. - dice sonriendo.

- Escuchen chicos! - exclamó Vanessa - Ya sabemos la verdad de todo. Su pasado, todas las cosas horribles que les tocó vivir, en aquel horfanato y con Anibal. Sin ofender! - recalca - Miren, Anibal no los mató porque los quería mucho. Él contó que mató a sus demás hombres y que a ustedes los botó a la calle porque no tenía opción. Es que quiero que entiendan! - terminó de hablar, para luego llorar bajito.

Nadie dijo nada después de eso. Fue un impacto para mí, aunque no entiendo. Si Anibal nos quiso, por qué nos estuvo haciendo la vida imposible desde entonces?

- Si Anibal tanto nos quiso, por qué es tan cruel con nosotros? - pregunté lo que dudaba en mi cabeza.

Anibal nos miró apenado, agobiado, como si fuera a llorar pero se aguantara.

- Es verdad! Siempre he sido así porque la vida que viví nunca me gustó. Lo único que me gustaba era vivir como un padre de familia, así como estába con Clara e Isabel, mi adorada hija. - Anibal terminó de hablar para romper en llanto.

- No se haga. - farfulló Jonathan.

- Por favor, acepten un abrazo de mi parte. - pidió Anibal quien seguía derramando lágrimas.

Miramos a las chicas, asintieron con la cabeza las tres. Los demás hombres estában desconcertados, sin entender la conducta de Anibal.

Nos miramos entre los tres, nos encogimos de hombros, y fuimos a abrazarlo. La sensación era algo extraña. Soltamos el abrazo. Nos miró analizando nuestras expresiones, las cuales no demostraban ninguna emoción, o al menos la mía así era. Él se secaba las pocas lágrimas que se le salieron para hablar.

- Chicas, ya tomaron su decisión? - preguntó él.

- Nosotras pensamos que tú eres quien debe de elegir. Eres tú quien lo quieres contigo para esto. - acató Nelly suavemente.

Recuerdos y la EsquizofreniaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora