Luna Negra [... El Final]

Capítulo 33

La noticia recorrió la manada de una forma alucinante, ni el viento lleva tan rápido los mensajes. De alguna forma extraña todos los miembros fueron llevando la noticia del matrimonio a otras manadas.

Las chicas se me acercaron hace unos minutos preguntando por la fecha de la boda y por los preparativos, y los chicos hicieron las mismas acciones, pero con mi lobito.

- Creo que fue mala idea dar a conocer nuestro compromiso – Dexter susurró a lo bajo.

- Te escuchamos, Alfa pulgoso – Sean lo regañó.

Dexter gruñó en dirección al hermano y Sean respondió sacándole la lengua.

- Al menos te respetó mientras te insultaba – murmuré divertida.

- No hemos pensado en una fecha – mi lobito respondió interrumpiendo a su hermano.

- ¿Cómo no?, ¿hace cuanto le propusiste compromiso? – Sean miró con una mueca a Dexter.

- Antes de ayer – respondió el chico a mi lado.

- ¿Y no pensaste en una fecha? – exclamó el rubio.

- Ni siquiera sabia si me iba a decir que sí – susurró defendiéndose.

- ¿Y los preparativos cuando los comenzaremos a hacer? – Lesli interrumpió la discusión de los hermanos.

- ¿El vestido cuando te lo iras a probar o tomar las medidas? – Zali apoyó a Lesli.

- Tendrás que bañarte más seguido antes del día de la boda – Sean miró a mi lobito.

- ¿Qué estás tratando de decir con eso? – gruñó en reproche – te recuerdo que soy tu Alfa –

- Tiene razón – murmuré sin mirarlo – si te bañas el día de la boda olerás a perro mojado – susurré apretando los labios.

Su mirada se intensificó sobre mí, mantuve mi mirada al frente y los chicos se pusieron rojos apretando los labios.

- En esta casa ya no existe el respeto – bufó en un gruñido.

- Todos respetamos a la Luna – Harry se excusó.

- Debemos ir a la cuidad y comenzar a ver la decoración y todo eso – Zali miró a los chicos.

Comenzaron a hablar entre ellos sin tomarnos en cuenta. Las chicas empujaron a los chicos hasta salir de la mansión dejándonos confundidos.

- ¿Para cuándo ponemos la fecha? – mi lobito interrumpió el silencio.

- Quien propone termina de armar el plan – respondí.

- ¿Mañana a primera hora? – soltó de golpe.

- ¿Estás loco? – lo miré en una mueca.

Hice un silencio bajo su mirada.

- ¿En un mes? – pregunté.

- En un mes – respondió sonriendo – un mes exacto – asentí a sus palabras.

- Quiero algo para la boda – murmuré.

- ¿Qué cosa? –

- Nunca me imaginé casarme de blanco – alcé la mirada – sé que es la regla de un casamiento, pero no quiero casarme de blanco –

- Explícame tu deseo, cachorra – giró su cuerpo a mi dirección.

- Quiero un vestido azul – pensé en mis siguientes palabras – ¿y quizás la decoración que sea de otro color? – lo miré entusiasmada.

- ¿Rojo con negro? – habló después de unos segundos.

- ¿Rojo con negro? – repetí.

- Sí, en honor a tu familia – se encogió de hombros – Sangre Negra. Negro con rojo – explicó.