Voy a tener que comprarme un despertador nuevo. El mío no hace más que despertarme veinte o más minutos tarde. Otra vez he tenido que vestirme lo más rápido posible pero esta vez, afortunadamente, el ascensor funcionaba. Tengo que correr para llegar a la habitación 209 a tiempo. Tengo flato y las manos me tiemblan, por razones desconocidas, cuando intento meter la llave en la cerradura. Después de uno intentos fallidos consigo abrir la dichosa puerta.
-Bueno días-me saluda James antes de bostezar.
-Gracias por quitarme trabajo, ya llego tarde y si encima tengo que despertar a un oso llamado James, ya legaría tarde todo el día-bromeo.
-De nada. Y por cierto, necesito dormir para estar tan atractivo como siempre-bromea y yo ruedo los ojos.
-Como sea-dejo escapar unas risas.
No puedo evitar morder mi labio interior cuando una pequeña sonrisa brota de sus labios como de costumbre. Sus carnosos labios… ¡Vuelve Emma!
-¿Sabes qué?-pregunto, todavía con una sonrisa dibujada en los labios.
-Me rindo-dice directamente.
-¡Hoy es el día de visitas!-digo con fingido entusiasmo, aunque convincente, mientras doy unas palmaditas.
-¡Estupendo!-copia mi tono de voz y intenta dar unas palmaditas, pero no puede.
Las yemas de sus largos dedos consiguen tocarse, pero las cadenas de las esposas de la cama, no son lo suficiente largas como para siquiera tocar la palma de la otra mano. Se supone que es por seguridad para los enfermeros y los doctores, pero la sonrisa que hasta ahora tenía en mis labios no puede evitar desaparecer.
Él parece darse cuenta de que mi vista está centrada en como las esposas impiden que James realice cualquier gesto. Estoy de acuerdo con que impongan total seguridad para la gente que trabaja aquí, pero las esposas… No son animales, pero los hacen sentir como tal.
-No voy a salir nunca de aquí ¿verdad?-pregunta con claro resentimiento en su voz.
La pregunta me toma por sorpresa. Literalmente la mandíbula casi toca el suelo de la sorpresa. Me gustaría poder decir lo que verdaderamente quiero decir, porque quiero que eso pase. Pero eso sería mentir en la cara. Y, por una vez en mi vida, no deseo mentir. No deseo mentirle a él. A James no.
-Eso…-intento buscar las palabras adecuadas, pero en este momento, todas las palabras del diccionario me parecen erróneas.-…No lo sé James-confieso dejando escapar un suspiro.
El asiente. Normalmente su rostro no muestra expresión alguna, pero hoy…hoy creo ver algo. Puede que simplemente me este poniendo en su lugar y por eso creo ver sentimiento en su expresión. No lo sé.
No sé que estará pasando ahora mismo por su mente, pero lo que sí sé, es que quiero que cambie de expresión ahora mismo. Quiero cambiar de tema, quiero hacer algo, lo que sea.
-Bueno, vamos a ducharnos-digo después de unos momentos de silencio. Me fuerzo a mi misma a sonreír.
Entonces, la pequeña sonrisa vuelve a su rostro. Sus ojos chocan con los míos y una oleada de calor se apodera de mi cuerpo.
-¿Vamos?-dice enarcando una ceja y con una sonrisa traviesa en sus labios.
No puedo evitar reír.
-Voy a darte una ducha-me rectifico.
-¡Joder! Eso es mejor todavía-exclama-. Haz lo que quieras conmigo nena-dice mientras me guiña un ojo.
Muerdo mi labio interior para evitar reírme, aún más. ¿¡Porque me comporto así!? Parezco una adolescente de quince años a la que él chico más guapo de toda la escuela le ha pedido salir.
-Vale…-bromeo-, pero de momento solo voy a darte una ducha. Y porque a mí me da la gana, el agua estará helada.
-Tú lo has dicho: de momento-dice entre risas.
Niego con la cabeza mientras me acerco a su cama y le quito las esposas para ponerle otras. Lo conduzco hasta las duchas. Una vez allí, lo siento en un taburete, que muy sabiamente, está pegado al suelo para evitar que pacientes cometan alguna locura. Quito sus esposas pero aquí, jamás se les ocurrirá permitir que un paciente este libre. Por lo que tengo que esposarlo a unas cadenas que cuelgan de la pared. Niego con la cabeza cuando lo hago. Como animales. Me recuerdo. Los tratan como animales. Con esta postura, parece Jesús Cristo crucificado pero sentado en un taburete.
Me dispongo a quitarle la camiseta blanca, pero caigo en la cuenta que así no podre sacársela. A regañadientes, me obligo a quitar una de las camisas para sacar la tela por ese brazo y lo mismo con el otro. Quito también sus pantalones.
Es en ese momento, cuando la realidad me golpea en la cabeza. James está desnudo, a excepción de sus calzoncillos, delante de mí. Todo su cuerpo es todo musculo y perfectamente definido al detalle. Sus hombros son anchos y sus brazos musculosos, al igual que sus piernas. Tengo que reconocer, que, es la persona más atractiva que mis ojos han visto en mis veinte y cuatro años de vida.
Me obligo a mí misma a bajar de las nubes y reaccionar. No puedo evitar morder mi labio ferozmente para no decir cualquier estupidez que pase por mi cabeza. Cojo la esponja vegetal y echo jabón en ella. Cuando la espuma se forma en ella, empiezo mi trabajo. Paso la esponja por su musculoso pecho y espuma se queda en su cuerpo.
Cuando la parte superior de su cuerpo esta enjabonada, me dispongo a hacer lo mismo con su parte inferior pero…
-Me disculparía por eso-dice la voz grave de James-, pero seguramente es la más grande que has visto en tu vida. No me agradezcas por dar belleza a tus ojos.
Pongo unos ojos como platos, cuando….cuando veo…eso. ¡Dios Emma no es la primera que erección que ves! ¡No seas niña!
-Pues no, no es la más grande que he visto-miento, vaya si miento.
-Seguro…-bromea con voz grave.
-Creído-digo, con evidente vergüenza en mi voz.
Minutos más tarde, ya he enjuagado a James y ya está vestido. No puedo decir que no he pasado un poco de vergüenza cuando…eso. Me sorprende a mí misma. Ni siquiera cuando perdí mi virginidad a los dieciséis, reaccione de esa manera cuando vi el bulto en los calzoncillos de James.
-Listo-anuncio y dicho esto empezamos el camino hasta la sala donde será la hora de visitas.
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Hola hermosuras!!!!! Me parece a mi o aqui hace mucho calor....
Dios! Os imaginais ver a THEO JAMES semi desnudo en vustra cara!! Yo estaria: gracias mundo por darme tal privilegio XD
Recordad: si os gusta la hisotria o el capitulo de hoy, hacemelo saber mediante VOTOS y COMENTARIOS
LUCHEMOS TODOS JUNTOS POR UN MUNDO SIN SPOILERS!!!
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Estoy loco y por eso estoy aquí (Fanfic de Theo James)
FanfictionJamás pensé que eso acabaría sucediendo. Jamás pude si quiera pensar en ello. Acababa de empezar a trabajar en una clínica psiquiátrica, donde dementes y más, están internados en el. Pero, nunca pensé, que alguien como él, como James, pudiera apare...