Faltaba al menos dos meses para concluir el año escolar, tenía las mejores notas de todos en su aula, era el número uno en todo, se enorgullece el mismo.
Aún faltaba para irse a clase seguía acostado en su pequeña cama personal, las sábanas cubría su cuerpo blanquecino, sentía un poco de frío y casi entraba la temporada de invierno.
Donde caían los pequeños copos de nieve, y era la temporada donde las familias se reunían más debido a las merecidas vacaciones escolares y otras laborales.
Pero eso a él no le entusiasma en lo absoluto, su madre jamás estaba presente y cuando lo estaba solo era para maltratarlo y decirle cosas hirientes, su padre,... De el no sabía nada desde hace mucho y no es que sea algo que le interese saber también..
Si el como padre no le importa suyo hijo, entonces porque le debería de importarle a él.
Sacudió un poco su cabeza para alejar esos pensamientos tristes de su pequeña cabeza, y se dispuso a levantarse.
Ya era momento de irse a bañar, asearse y poder ir a clase.
Se quitó la pijama de gatitos y la dobló poniéndola debajo de suyo almohada, arreglo su cama y se dispuso a entre al baño, tanteando un poco el agua, está siempre salía muy helada, pero que podía hacer el, no eran personas ricas que podían darse una ducha caliente, ya estaba acostumbrado a eso.
Se metió de una vez y el agua mojo todo su cuerpo haciéndole pegar un brinco debido a lo extremadamente helada que estaba, se puso shampoo con olor a coco y se masajeó el cuero cabelludo, para seguir con su cuerpo enjabonando y restregando quitando las impurezas.
Mientras hacía todo, pasaba sus pequeñas manos por su cuerpo recordando todo lo que sucedió hace unas dos semanas atrás con su novio.
Todo fue tan maravilloso, tan único.
Fue tan delicado, en todo los aspectos, palabras llenas de amor fueron dichas en susurros en su oído, esas grandes manos que se paseaban por todo su pequeño cuerpo.
Sonrió ante esos recuerdos hermosos. No se arrepentía de lo que hizo. Porque fue con amor.
Entregó su alma y cuerpo.
Termino de bañarse y salió de la ducha fría con una toalla enrollada en su cintura y otra en su cabello negro secando suave sus hebras oscuras.
Se dirigió a su pequeño clóset donde guardaba su poca ropa gastada, y saco de ahí su uniforme, porque si el utilizaba uniforme escolar, era su último año ya al siguiente no lo utilizaría jamás.
Como se había dicho anteriormente tenía buenas notas y deseaba poder ser recibido con una beca en la universidad también para poder estudiar lo que más amaba.
Danza.
Un sueño que está dispuesto a cumplir, y para luego poder dar clases a los niños pequeños, el ama a los niños.
Hubiese deseado tener un hermanito con quién compartir buenos momentos.
Termino de vestirse y se acomodó la corbata, peino su cabello dejando ala vista su pequeña frente, se hecho bálsamo en los labios dándole un brillo hermoso.
Busco su mochila, y se dispuso a salir de su cuarto, su casa no era grande, está constaba de dos cuartos pequeños con baño incluido, una cocina compartida con la sala, pequeños cuadros de él y su madre, otros eran de paisajes de su país, pequeños adornos en los muebles viejos.
No era nada fuera de lo común, todo era viejo y gastado hasta el color de la casa ya no se podía distinguir. Según era amarillo pollo pero ahora solo a puede ver un color viejo gastado con algunos baches.
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🥀 Yo Soy Tu Mami 🥀. 🥀 Yoonmin 🥀
FanfictionLuego de un supuesto engaño... Park JiMin se va de su país con el corazón roto y sus manos vacías. Al pasar cinco años regresa a la ciudad, siendo un profesional, y uno de los mejores maestros de danza contemporánea. Logrando así uno de sus sueños...