Habría deseado poder ir a ver al detective pero no fue así, tuvo una llamada de la clínica donde se encontraba la nena, diciéndole que se adelantaba la fecha para la sustracción de las células.
No le dieron más información solo que debía presentarme temprano, estaba nervioso, pensaba que algo malo había sucedido para que le hicieran llegar antes de la fecha estipulada.
Se despidió de su pequeño Yeunjun, el niño quedó con un puchero en sus labios, no quería que su mami -empezo a decirle de es manera- le dejara solito, pero pronto su tristeza se acabo cuando el tío Kim le prometió llevarlo al parque.
Ahora iba rumbo a su destino, sus manos sudaban al igual que su frente, era el nervio tal vez, o quizás el miedo de que algo fuese a suceder.
La misma extraña y rara sensación que tuvo hace más cinco años.
Negando y alejando los malos presentimiento, se parqueo a las afueras del lugar, específicamente en el lugar privado donde solo las personas que son de la alta sociedad tienen permitido estacionar.
Se vio al espejo, y vio las pequeñas manchas oscuras debajo de su ojo, estaba plácidamente dormido cuando la llamada sonó a eso de la media noche, desde ese momento el no pudo dormir tranquilo.
Algo le inquietaba.
Dio de si, su mejor cara y se levanto los puños dándose animos el solo y salió del auto, no sin antes cerciorarse que estuviera bien cerrado.
Suspiro fuerte y bajo, con su mirada siempre en alto, aunque podía sentir sus piernas temblar, debilitarse a cada paso que dada.
- vamos JiMin, no sientas miedo, todo saldrá bien - se dijo así mismo dándose pequeños golpecitos en las mejillas.
- ¿ahora hablas solo? -. Dijeron detrás de su espalda.
Esa voz siempre la va reconocer donde sea la escuche, tan profunda, tan segura y ronca. Se dio la vuelta para saludar....
Sus ojos se abrieron en demasía, "no puede ser" pensó, yoongi estaba completamente cambiada, más flaco, más pálido, ojerudo y sus pequeñas mejillas no estaban gorditas, estás estaban extremadamente pegadas al pómulo.
- Yoonie.
El mayor noto el asombro del menor.
- si, me veo de la mierda, pero feliz.
- ah sí.. y eso ¿porque? - ya sabía cuál era la razón solo quería escucharlo de sus labios.
No era que estuviera de presumido, pero el deseaba escuchar, quería, que por lo menos dijera que le estaba salvando la vida a su pequeña, como hubiese deseado salvar la de la suya.
- mi pequeña princesa, ya tiene un donador su pondrá bien, ya será una niña feliz, sana y muy fuerte, gracias a esa linda persona que apareció en nuestras vidas, estaré tan agradecida con él, le estaría dando la vida a mi nena bella, es como si pequeña volviera a nacer.
JiMin vio el brillo en los ojos de Yoongi, sin duda el ama mucho ala pequeña Gi. Se preguntaba ¿Así habría amado a mi pequeña? Sonrió ante lo dicho por yoongi, podía sentir a sinceridad en sus palabras, y también lo relajado que se encontraba.
Ya no veía esa desesperación, ansiedad. Ahora era tranquilidad y fe. Esa que le ayudará a que su pequeña esté bien. Gracias a la medicina y su Dios.
- eso.. eso es bueno, me alegra que la pequeña esté pronto a estar sana, y que tú ya estés mejor, y más relajado.
No supo en que momento, pero ahora ambos estaban tan cerca que podían sentir su respiración contraria.
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🥀 Yo Soy Tu Mami 🥀. 🥀 Yoonmin 🥀
FanfictionLuego de un supuesto engaño... Park JiMin se va de su país con el corazón roto y sus manos vacías. Al pasar cinco años regresa a la ciudad, siendo un profesional, y uno de los mejores maestros de danza contemporánea. Logrando así uno de sus sueños...