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Estaba particularmente fuera de contexto, pero no de una manera negativa.

Lo ocurrido durante la mañana con Kim Seokjin había sido como una sobrecarga de euforia que entró a mi cuerpo de manera repentina. Era increíble cómo las cosas habían tomado un nuevo rumbo; prácticamente era yo quien había puesto a Seokjin entre la espada y la pared, al punto en el que él ya me consideraba como una gran jugadora en esa interminable competencia para saber quién de los dos podía hacer que el otro perdiera la cordura primero.

Luego de que terminaran las primeras dos clases del día, busqué a Hyori para pasar nuestra hora libre juntas, y la encontré camino a su salón de clases. Nos saludamos con un abrazo, como habitualmente lo hacíamos, para después dirigirnos afuera.

Cerca de un grupo de árboles que hacían sombra con sus copas, mi amiga y yo reposamos sobre los grandes troncos, mientras bebíamos tranquilamente nuestros respectivos jugos de fruta, cuidando que nuestras faldas escolares no mostraran más de lo que debían.

Teníamos una vista completa de las áreas deportivas; podíamos ver claramente a los chicos jugar baloncesto, soccer, e incluso tenis.

Hyori y yo conversamos de nuestras vidas y demás, hasta que una pequeña pelota color verde fosforescente llamó nuestra atención, y detrás de ella, un chico rubio con labios gruesos, casi iguales a los de Seokjin.

¡Maldición! ¿Por qué tenía que acordarme de Kim Seokjin al mirar solo un par de labios similares?

— Ah, Hyori. ¿Qué tal todo? — dijo cuando estuvo lo suficientemente cerca.

— ¡Hola, Jimin! — respondió Hyori.

— ¿Qué opinas sobre la presentación del "Cisne negro"? Hablé con la profesora Hwan, y dijo que era una gran propuesta.

— ¡Genial! Empecemos a practicarla mañana, ¿De acuerdo?

El chico asintió. No estaba prestando tanta atención a aquella conversación ajena, hasta que el rubio me llamó. — Tú debes ser Min Lia, ¿Cierto? He escuchado que recién llegaste a la academia.

¿Así que todos se enteraban de cualquier cosa? Sí, solo eso faltaba.

Le presté atención. — Sí, llegué a inicios de este semestre.

Jimin sonrió, haciendo desaparecer sus ojos al hacerlo. — Soy Park Jimin, un gusto — extendió su mano para saludar, y correspondí.

Pero tan pronto hicimos contacto, una visita inesperada apareció justo a un costado de Jimin, haciendo al chico asustarse un poco y ponerse serio.

— Disculpa, Min... Supongo que no estoy interrumpiendo algo importante — miró a Jimin, restándole importancia —; el profesor del club está buscándote.

Era Kim Seokjin.

Las caras de Jimin y Hyori estaban en shock, como sorprendidos por ver a un universitario en el área, buscando a una estudiante de secundaria para llevarla con uno de los profesores.

Pero yo tenía la ligerísima sospecha de que, en realidad, el profesor no estaba buscándome.

— Iré en un momento — informé.

— Te necesita, de inmediato.

Miré mal a Seokjin, y él solo me dirigió una mirada que decía "Estoy molestándote, me encanta molestarte".

Al ver que dibujó una pequeña sonrisa de complicidad, supe que debía ir con él antes de que hiciera cualquier tontería.

— Ahora vuelvo — dije a Hyori.

RULES BREAKER [KSJ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora