La salvación...

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Todo era risas y bromas pero se vio interrumpido en un instante.. -Vaya vaya, pensé que serian mas considerados en recibir una invitación pero veo que no es así- la sala se inundó de miedo y silencio, ¿Qué diablos hacia aquí? se podía esperar lo peor, me puse delante de ella para protegerla sin inmutarse se sentó en nuestro trono y pidió que le acerquen una copa - Y bien, continúen- nadie quería moverse del lugar pero por miedo hicieron caso, el ambiente estaba tenso -Vegeta creo que lo mejor será retirarme- -No, quédate a mi lado, es muy peligroso- -Se puede saber que estamos festejando?- uno de los sirvientes quien le estaba sirviendo un poco de vino le murmuro algo... -Quiero ver a la pareja por favor-

Me sentí angustiada y con terror, sabia de lo que era capaz pero no iba a demostrarle miedo, me solté de el esperando a que me siguiera y me arrodille delante de el -Buenas noches, espero que la ceremonia sea de su agrado- me levante con calma y sentí su mirada de arriba hacia abajo -Vaya Vegeta veo que por fin aceptaste mi obsequio, debió haberte sido muy satisfactoria esa noche verdad? jajaja - apreté mis puños, que insinuaba? -Mu.. muchas gracias por el obsequio Emperador Freezer, lo aprecio mucho- dijo con algo de temor, podía ver en sus ojos el miedo, no estaba segura que es lo que se le cruzaría por su mente -Asique tu eres la encargada de mejorar la tecnología de estos simios pero no he visto avances en mi tripulación ¿Te quieres burlar de mi?- sabia por donde iba la cosa - Pues para que hacer algo así de estúpido verdad? después de todo sus soldados son mil veces mas fuertes, o me quiere decir que necesitan de mi ayuda? si es así puedo hacer mas para su...-pero me interrumpió de inmediato -Mi ejercito son los mas fuertes del universo, claro que no necesitan tus estúpidas mejoras!- excelente, mordió el anzuelo

Estaba en shock, esta mujer no sabia con quien se estaba metiendo, sude frió, por una vez debería controlar su boca si no quieren que nos maten a todos -pues por eso no los tome en cuenta, mil disculpas si lo he ofendido, no era mi intención- dijo reverenciando con algo de malicia -Esta bien mujer inútil quítate de mi vista, continúen con la fiesta - -No se quien de aquí es mas inútil...- -¿Que haz dicho? - voltee nervioso, pero ella estaba temblando del enojo -Lo que oíste, tienes las orejas tapadas o que? Soy bastante útil por si no te haz dado cuenta, soy mas inteligente que todos aquí, o como es que me fueron a buscar en un planeta lejano solo para sus tecnologías? Mucha fuerza pero tienen poco cerebro, y si quieren llegar mas lejos pues deberían tomar un libro y leerlo para fortalecer sus estúpidas mentes verdad? yo no me veo nada de inútil señor, y será mejor que cuides tu lenguaje usted también, jamás le he faltado el respeto y no soy ninguna de tus sirvientes te quedó claro?-

Toda la sala estaba en completo silencio, me di cuenta del grave error que acabo de cometer pero no pude controlar mi genio al ser pisoteada por un ser tan despreciable, se levanto de su asiento y fue acercándose a mi, cerré los ojos esperando lo peor, pero no iba a permitir que mis nervios me controlaran, mi costado izquierdo comenzó a quemarme, por el dolor me agache pero aun seguía en shock que no pude sentir nada, había sangre, me había herido con su energía ... el enojo se apodero de mi, me levante como pude y le propine una fuerte cachetada que sonó en toda la habitación como un eco interminable -¿Quien te crees que eres para herirme de esta forma gusano afeminado, mas te vale que me mates ahora mismo si no quieres sufrir las consecuencias!- Pero el no me estaba viendo a mi, sino detrás, su expresión cambio a una de temor y de inmediato se arrodillo -Sseñor Bills que hace usted aquí?- -Jajajajaja vaya, que lastima que notaron mi presencia, quería ver como el famoso tirano estaba siendo abofeteado por una simple humana, quien lo diría- Voltee y todas las personas estaban en el suelo arrodillado -Buenas noches señor Bills que se les ofrece?- dijo el Rey arrodillado también, Bills? ese nombre me era familiar, volteo hacia atrás con un poco de dolor y para mi sorpresa eran mis "amigos de la infancia" -Biiiills, wisss tanto tiempo, que alegría verlos por aquí de nuevo! no han cambiado nada, tu sigues igual de flacucho, dime andas comiendo bien verdad?- respirando con algo de dificultad...

Estaba a punto de desmayarme de tanto miedo en cuestión de minutos, sentía que su corazón estaba a punto de explotar -Hola pequeña humana veo que ya has crecido, y dime en su tierra todavía hay exquisitos platillos verdad?- ella asintió un tanto molesta -QUE FALTA DE CORTESÍA LA DE USTEDES, NO ASISTIERON A MI CUMPLEAÑOS! LES PARECE SER HOMBRES DE PALABRA? EL MALDITO CUPÓN VENCIÓ HACE AÑOS POR QUE DIABLOS NO LLEGAN A TIEMPO?!- el Dios de la destrucción solo se encogió de hombros -Oh señorita, disculpe por eso, hemos tenido varios inconvenientes pero no pudo ser posible viajar hacia su planeta de nuevo

Los Saiyajin seguían sorprendidos, jamás habían visto ese temperamento inapropiado de una mujer hacia el dios de la destrucción -Vaya Vegeta! tu también has crecido, te has convertido en un hombre muy guapo ohoo- no me atrevía a verlos a los ojos -Levántate Vegeta- ordeno Bills, de inmediato me puse de pie -¿te sientes bien?- pregunto la mujer quien se notaba adolorida, vi como se caía al suelo tomándola entre mis brazos rápidamente -Oye Vegeta, asístela de inmediato, no quiero que se muera la terrícola, me es útil en estos momentos- reaccione a tiempo y a toda velocidad me dirigí hacia los tanques de recuperación, sin pudor le quite la ropa y la metí allí dentro, le coloque la mascara de oxigeno y pude ver como el agua se mezclaba con el rojo de su sangre, por un instante temió perderla, era asquerosamente frágil, me preocupe mas de lo que me esperaba -Diablos por que no puedes cerrar la boca en momentos así?- tome mi capa y de nuevo tape el tanque de recuperación, no quería verla en ese estado, la necesitaba viva y con su maldito carácter junto a el, la necesitaba?.. -Vaya me estoy volviendo blando...-

Mientras tanto en la otra sala Freezer estaba siendo regañado por romper las reglas de la vía galáctica -El dios de la destrucción soy yo, y ten mucho cuidado si te piensas expandir hacia los otros universos o me veré obligado a destruirte junto con esta galaxia entendido?- -Ssisi señor Bills- -Ahora retírate, no quiero ver tu asquerosa cara- dicho eso se tuvo que marchar con los dientes apretados, mientras tanto Wiss probaba bocadillos en la mesa cuando el Rey Vegeta se le acerco educadamente - Dime Rey Vegeta a que se debe este honor?-pregunto alegre -Pues mi hijo y la humana se acaban de unir, por eso el motivo de festejo señor- -Unión? hmm vaya, después de todo creo que tienen temperamentos tal para cual- sonrió, el se unió a la charla -De cual temperamento hablan?- pregunto algo molesto -El de Bulma y el tuyo, no han cambiado nada, y dime cual fue el motivo de la unión? amor? quizás algo de romance? ohhh, esto esta delicioso- iba a responder cuando mi padre comento -Ehh si, se han atraído mutuamente y estoy mas que bendecido, pronto mi trono tendrá nuevos descendientes- molesto lo observe, pero Wiss me miraba fijo a los ojos esperando mi versión -Claro que no, fue por orden del mismo Freezer- luego cambio a una expresión triste -A Bulma no le gustaría eso... que pena- lo mire extrañado, como es que sabia tanto de ella?...

La ceremonia continuo en paz, era bastante tarde y todos se marchaban a sus respectivos hogares, -Hijo por que no vas a descansar? yo me ocupo del resto- asentí y me retire de allí, había sido una velada agradable pero se vio interrumpido por el tirano pero de alguna otra forma sentía que la presencia del Dios y su ángel había sido un tanto de ayuda, si es verdad lo que dijo Bills quizás se tome el privilegio de mantener a su mujer con vida ya que lo único que le interesaba era la comida, los rumores eran ciertos, el destruía por capricho si algo no le agradaba, era un sujeto muy peligroso, se preguntaba el porque se había tomado la molestia de venir hasta aquí después de tantos años...

Cosas del destino....Donde viven las historias. Descúbrelo ahora