♡ ; 𝒟𝑒 𝓁𝒶 𝒜 𝒶 𝓁𝒶 𝒵 𝓎 𝓋𝒾𝒸𝑒𝓋𝑒𝓇𝓈𝒶 ⇀ ɴᴍɴ

♡ ; 𝒯 de torpe

Un día más transcurría con normalidad, Jeno acompañó a Jaemin a dejar sus papeles a la universidad a la que postuló y en la cual fue aceptado sin problemas.

–¿Sería muy indiscreto de mi parte preguntar, a qué escuela postuló Haechan?– preguntó curioso Mark para romper el silencio incómodo en el que iba. Hacía mal tercio ahí, pero no quería estar solo aburriéndose en el departamento que alquiló con el pelinegro.

Jaemin miró intrigado a Jeno y este encogiéndose de hombros, solo le comento:

–No quiso decírnoslo.

–¿Por qué quieres saberlo?

Mark seguía siendo su enemigo, aun no lo conocía bien como para quitarle ese título. No confiaba en él, ni siquiera para decirle dónde iba a cursar la universidad el pudú.

–P-para saber a donde debo enviar algo que me pidió– respondió nervioso el canadiense.

Bueno, si hacía memoria, Haechan le comento que Mark le gusta, así que, pensándolo brevemente llegó a la conclusión de que quizás si le decía donde, Mark se alejaría de Jeno.

–Universidad de Artes de Busan.

–Gracias.

Nana volteo a ver a Jeno, este le regaló una sonrisa que le hizo sonrojar, quedó tan embobado que no se dio cuenta de que estaba por chocar con la puerta de un casillero.

El impacto fue inevitable y tratando de esconder su vergüenza en movimientos descuidados y nerviosos se le cayeron los papeles que llevaba en las manos.

–Nana ¿Te encuentras bien? ¿Te duele?

Comenzó a tartamudear, sentir la mirada y el tacto de Jeno sobre su persona le volvían cada vez más 𝓉𝑜𝓇𝓅𝑒.

El pelinegro le ayudó a ponerse de pie y para que no pasarán más desgracias le tomó de la mano para guiarlo sin problemas a rectoría.

Mark desde atrás, miro toda la escena y no pudo evitar reír un poco, "Tan idiotas" pensó.

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De vuelta en el departamento de Jeno, los dos se encontraban sentados en el sofá mirando una película. Mark se fue con la excusa de que debía arreglar algo relacionado con el vuelo de regreso a Canadá.

–Dime ¿Qué es lo que pasa por tu mente?– pregunto Jeno, pues se percató de que Jaemin se encontraba perdido en su mundo.

–¿Cuándo regresas a Canadá?

Obtuvo silencio como respuesta.

Un nudo se formó en su garganta, no quería que se fuera otra vez, solo que no tenía idea de como pedirle que se quedara sin sonar patético.

Jeno por su parte miraba insistentemente a su amigo, esperaba que le pidiera que se quedara, si se lo pedía lo haría, es mas, si Jaemin le pidiera que se arrojara de un puente sin pensarlo lo haría, haría cualquier cosa que ese chico torpe a su lado le pidiera.

–Debo irme.

–Jaemin, habla conmigo, sé que tienes más que decir.

Le tomó del brazo impidiendo que se fuera sin decirle algo más, podía verlo, el contrario se moría de ganas por pedirle que se quedara a su lado, lo que no vio venir fue la respuesta tan fría que le dio.

–Espero que tengas un buen viaje.

Y entre tropezones corrió a la salida sin mirar atrás, odio mostrarse torpe en ese momento.

Al estar en la calle no contuvo más su llanto, en su andar choco con alguien, no le dio importancia, siguió su camino hasta llegar a casa.

–Acabo de chocar con Jaemin e iba llorando ¿Qué pasó?

–Saco conclusiones erróneas.

Tenía que resistir, no podía salir corriendo tras de él porque se lo diría todo y lo que menos quería era abrumarlo, confundirlo y por consiguiente provocar que se alejara de él.

–Y tú sigues sin decirle nada, eres de lo peor– le juzgo Mark.

–Mira quien habla.

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