♡ ; 𝒰 de único

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Jaemin llegó a la conclusión que el 𝓊𝓃𝒾𝒸𝑜 que podía cambiar su estado de ánimo de manera radical era Jeno, porque así como podía hacerle sonreír hasta que le doliera la cara, así mismo podía lastimarlo sin decir mucho.

Otra vez se encontraba en el aeropuerto, esta vez para despedir a Shotaro. Haechan llegó unos minutos después, al ver cabizbajo a Jaemin le cuestionó si todo iba bien con Jeno a lo que se le respondió que sí. No insistió pues ese momento era solo para despedir a su amigo.

–Nos mantendremos en contacto ¿verdad?

–Claro que sí.

Los tres se abrazaron fuertemente, a pesar de que los últimos días no estuvieron juntos, no disminuía el aprecio y cariño que se tenían, Jaemin al estar muy sensible soltó algunas lágrimas.

–Te vamos a extrañar– comentó mientras secaba sus lágrimas con la manga de su suéter.

–Estando con tu novio no creo que tengas tiempo de extrañarme– bromeo el japonés, le había bastado aquella vez que Hendery partió, para darse cuenta de que entre Jaemin y Jeno había algo más que amistad

–Si te refieres a Jeno, él y yo solo somos mejores amigos.

–Definitivamente estás ciego.

Es que ¿Cómo pretendían tapar el sol con un dedo? Ambos eran demasiado obvios. Como sea, volvieron a abrazarse y a desearse buena suerte pues la universidad no sería nada fácil.

–¡Sayonara!

Lo que resto de sus "vacaciones" evitó a toda costa a todos, incluso se esforzó por ignorar el hecho de que tal vez Jeno ya haya regresado a Canadá. Solo se dedicó a comprar lo que necesitaría, libros, cuadernos, una computadora, mochila, etcétera, etcétera.

El último día que tenía libre, por la noche al bajar a cenar, sus padres le tenían un regalo.

–Tal vez nos tardamos mucho en comprarte uno, pero no queríamos que te la pasaras pegado a el.

Su padre le entregó una caja bien envuelta, con cuidado de no romper demás el papel, desenvolvió su regalo, era un móvil. Sonrió y agradeció a sus padres, sin demora encendió el teléfono llevándose la sorpresa de que el fondo de pantalla era una foto de él y Jeno durmiendo juntos.

–¿Te gusta?– preguntó su madre –Ese día se veían tan adorables durmiendo abrazados.

Con esas simples palabras que no significaban gran cosa para otros a Jaemin le abrieron los ojos, comprendió que no siempre resolvería las cosas callando y alejándose, ya no era un niño y debía enfrentar las cosas con valor.

Si Jeno se fue es porque de alguna forma vio un futuro más prometedor y eso debía alegrarle pues oportunidades como esa no se repetían seguido.

Mañana por la tarde se comunicaría con Haechan para que le proporcionara la dirección o el teléfono de Jeno y poder decirle que lo sentía por actuar estúpidamente.

Le agradeció a sus padres, la cena fue amena, al terminar fueron a dormir ya que el día siguiente sería bastante agitado.

Se levantó media hora antes de lo que debía, tomó un baño, se vistió adecuadamente, bajó a prepararse el desayuno.

Se despidió de su madre, esta le deseo un buen día. Camino a la parada del autobús; el trayecto a la universidad fue relativamente corto.

Al llegar a la entrada de la escuela, noto que muy pocos alumnos entraban pues aún era temprano así que para no parecer un nerd se quedó afuera en una de las bancas de ahí.

Cerró los ojos, disfrutando del viento matutino.

Un par de minutos después se puso alerta al sentir a alguien sentarse a su lado, para no dar una mala impresión abrió los ojos lentamente y giró a ver quién se atrevía a perturbar su momento.

Por poco y se desmaya ahí mismo al ver a Jeno a su lado. Lo recorrió con la mirada notando también que en su muñeca llevaba puesta su pulsera, inevitablemente sonrió.

–No se que te hizo creer que volvería a Canadá– dijo mientras le acomodaba un mechón de cabello –A partir de hoy permaneceré a tu lado hasta que desees lo contrario.

Definitivamente Jeno era el único que de un momento a otro podía hacer que su estado de ánimo cambiará drásticamente.



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♡ ; 𝒟𝑒 𝓁𝒶 𝒜 𝒶 𝓁𝒶 𝒵 𝓎 𝓋𝒾𝒸𝑒𝓋𝑒𝓇𝓈𝒶 ⇀ ɴᴍɴDonde viven las historias. Descúbrelo ahora