Capitulo 4

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Valentina Cisneros

2 semanas después

Termina el ensayo y estoy más emocionada de que cada vez más se acerca el día de la competencia, ensayo la coreografía sin parar, acá en la academia, en casa, mientras escucho música, mientras me baño y hasta diría que lo hago dormida, eso aumenta más mis nervios y mi ansiedad.

—Muy bien chicas, ahora quiero que todas se suban a la báscula, necesito saber sus pesos exactos porque recuerden que la coreografía que involucra a todos, tanto a chicos como a chicas esta compuesta de vueltas y saltos entre ambos y deben de estar en un peso adecuado recuerden que siempre les he dicho que deben cuidar mucho su alimentación —nos informa el profesor Dalton y nos formamos en una fila pasando una a una para monitorear su peso.

Veo la cara de felicidad de Aline cuando la báscula arroja su peso de 43 kg, wow espero también estar pesando eso y espero la dieta de estas semanas me haya ayudado, Daniela pesa 500 gramos mas que Aline pero igual esta feliz y lo celebra, el profesor las felicita a ambas y ahora es mi turno, pero la felicidad que tenia se esfuma en un segundo cuando escucho decir al profesor que mi peso es de 52 kg, quedo estupefacta a to esto.

—Valentina tu peso no es el adecuado, deberías de estar pesando menos de 45 kg, tienes 7 kg de más y eso es algo que me preocupa ya que eres una de mis mejores alumnas pero me temo que con ese peso no podrás competir en las nacionales —me dice y siento como mi mundo cae a pedazos.

¿Qué quiso decir con eso? ¿Estoy fuera de la competencia?
No, no puede ser, esto tiene que ser una broma.

—No Profesor Dalton, por favor no me deje fuera de la competencia, me he esforzado por estar en el grupo de las mejores, bailar es lo que me hace feliz y me hace mucha ilusión ir a las nacionales como cada año, le juro que he estado haciendo dieta pero no se lo que pasó, pero aun falta un mes y medio para la competencia y le prometo que bajaré esos 7 kg y me esforzaré tanto que bajare mas, lo prometo —le suplico y después de pensarlo asiente.

—Esta bien Valentina, te daré otra oportunidad y solo porque sería una lástima que una de mis bailarinas estrella no participe por estar gorda, así que mucha disciplina con la dieta y también con el ejercicio, espero que en un mes hayas cumplido la promesa —ahora yo soy la que asiente y el profesor continúa con las demás, mis ojos pican y voy corriendo al baño, una vez allí me miro en el gran espejo y dejo mis lágrimas salir, me siento tan mal, tan humillada, pero el profesor tiene razón, si estoy gorda no puedo danzar y lucir esos atuendos que solo son para chicas delgadas.

Aun no comprendo que fue lo que pasó, estoy haciendo dieta, ya no como tanta comida chatarra como antes, aunque debo confesar que en ocasiones hice trampa pero luego lo recompense con ejercicios, ya veo que no fue suficiente, pero ahora haré lo que sea para ser delgada y seguir dentro de la competencia.

Lavo mi rostro para disolver las lágrimas y me seco con una toalla, cuando levanto nuevamente mi mirada veo a través del espejo a Aline y Daniela detrás de mi mirándome con fastidio.

—No llores, esas son solo lágrimas de cocodrilo, yo te lo advertí, te dije que dejaras de comer tantas porquerias, que lo más importante es el físico —me reprocha Aline y me giro a verlas de frente.

—Y ya deja de llorar que con eso no bajaras de peso, lo que tienes que hacer de ahora en adelante es cerrar esa boquita y no comer mas hasta que peses lo mismo que nosotras como le prometiste al profesor —me regaña ahora Daniela y ella también tiene razón, debo dejar de comer si quiero lograr mi objetivo.

—Si ahora si seré muy recia con la dieta, nada de dulces, fritos, ni carbohidratos, solo frutas y verduras —sentencio para convencerme a mi misma de que será así.

—En eso también te equivocas, tampoco debes comer frutas ni verduras, las frutas contienen azúcar lo cual es veneno y las verduras tienen carbohidratos, así que eso también está eliminado —me informa Aline y me deja perpleja.

¿Entonces que es lo que puedo comer?

Ella se acerca aún más a mí esta vez abrazándome por el cuello y me gira de nuevo hacia el espejo haciendo que mire mi reflejo en este.

—Mira como te ves ¿ves esas mejillas regordetas? ¿qué es lo que te dicen? Así es, te dicen que estas gorda y que no eres una princesa, ve esos brazos gruesos, esa grasa bajo tu piel tiene que desaparecer y como somos tus amigas te vamos a ayudar y te diremos cual es la clave para bajar de peso lo más rápido posible ¿estas dispuesta a hacer lo que sea para perder esos nefastos kilos de más? —pregunta y asiento sin pensarlo.

—Si, lo que sea con tal de ser tan delgada como ustedes —respondo y ella sonríe.

—Bien te diré paso a paso todo lo que tienes que hacer, pero eso sí, nadie debe saberlo, no puedes decirle a nadie, ni a tu familia, ni en la universidad ni tampoco a Oliver ¿lo prometes? —vuelvo a asentir sin dudarlo —Entonces escucha bien, la dieta más efectiva de todas es la dieta del agua —menciona y frunzo el ceño, primera vez que escucho esa dieta y cuando voy a hablar ella continúa —Esta dieta consiste en beber solo agua todo el día, en el desayuno, media mañana, almuerzo, merienda y cena, pero eso si, solo debe ser agua, nada de comidas ni otras bebidas —

—¿Quieres decir que debo ayunar todo el día y solo llevaré mi estómago con agua? —

—Así es, veo que estas aprendiendo rápido, debes hacerlo mínimo tres días y ten en cuenta que mientras más días sean muchos más kilos bajaras y cuando tu cuerpo ya no tenga nada de energía puedes comer solo una porción de lechuga ¿entendido? —le digo que si con la cabeza —Tu sigue mis consejos y llegaras lejos —termina por decir e intenta salir pero se detiene —Ah y otra cosa, si por algún motivo fallas con la dieta y comes sólido provocate el vómito lo antes posible, eso también te ayudará, recuerda esto "la que no vomita no es bonita" adiós y suerte —finaliza con esto último y estoy dispuesta a hacer todo lo que me ha dicho.

Todo por lograr la perfección.

Cuando salgo del baño ya Oliver me está esperando y al verme frunce el ceño.

—¿Esta todo bien? ¿son ideas mias o estuviste llorando? ¿qué sucede? —me hace varias preguntas a la vez y asiento.

—Si, solo que ando un poco triste, he subido de peso y el profesor me ha dicho que así no podré competir —le cuento y ahora el frunce los labios.

—No te preocupes bonita, yo te voy a ayudar, conozco medicamentos que son efectivos y te los conseguiré, no puedo permitir que mi novia sea una gorda —comenta y le sonrío ampliamente.

—Eres el mejor —le doy un casto beso en los labios.

Cuando llego a casa después de pedirle permiso a papá y a mamá para ir al cine con Oliver ellos ya están allí, son las 8 de la noche y al verlos los saludo al igual que a mis hermanas, todos están sentados en la mesa cenando lasagna, a lo que mamá me pide que me siente para servirme un poco pero me niego diciéndole que ya he comido con Oliver fuera y ella me cree así que no insiste.

Subo a mi habitación y dejo mis cosas de lado, en realidad no he cenado, ni siquiera comi palomitas de maiz en el cine, Oliver y yo decidimos no hacerlo, ambos estamos a dieta y pienso comenzar la dieta que me ha dicho Aline desde ya...

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¿Alguna vez se han sentido como Valentina? Sienten que estan presionado para bajar de peso lo más rápido posible y un peso específico?

Los leo

Chanti 💕

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