- ¿Has visto algo raro hoy? - dijo, serio - Has estado bastante desconectada desde que hemos llegado.
- Pues n-no...
Así que después de todo sí que sospechaba algo. ¿Cómo podía ser tan inteligente? Había intentado estar lo más normal posible, pero él lo notó.
- Esta bien, te creo. - bebió un poco de sake- Vamos al grano. Voy a hablarte sobre todo lo que quiero hacer estos dos años.
- Vale. - me puse cómoda, estaba segura de que iba a ser una charla muy larga.
- Lo principal es que lo recuerdes absolutamente todo. Todo. Según mis calculos, empezarás a recordarlo todo muy rápido, así que en eso no tendremos ningún problema. También quiero que aprendas a luchar mejor, claro esta. Sé que tienes una espada, pero es muy pequeña y no puedes usarla bien del todo. Así que, compraremos una espada buena en la siguiente isla, y empezarás a aprender de verdad.
- Vaya... me parece muy bien.- dije. - Pero... ¿no querías matar al que nos raptó?
- Todavía falta mucho para eso, lo tengo todo planeado, cada detalle, así que tú no deberías preocuparte de eso.
- Me siento mal sabiendo que has estado planeando todo esto durante tantos años.
- No tienes por qué sentirte así.- Se acercó a mí y me acarició el pelo lentamente.
- Quiero recordarlo todo, y ahora mismo.- lo abracé. - Sólo espero que esto sirva.
- ¿El qué? - preguntó, confundido.
- Creo que tu contacto hace que recuerde las cosas más rápido.
- Vaya... - dijo, y me abrazó más fuerte.
No se ni cómo ni por qué pero todo mi cuerpo se iluminó, como si me hubiese convertido en luz, era asombroso.
- ¿Qué está pasando? - grité, para que me escuchase.
Me separé de Law, con miedo a hacerle daño, pero no pasó nada. Mi cuerpo volvió a la normalidad, pero un pequeño frasco de cristal cayó del cielo, y menos mal que lo cogí, por que parecía muy frágil.
- ¿Qué es? - preguntó Law, acercandose a mí.
- No tengo ni idea.
Tenía unas letras grabadas sobre el cristal, pero no los entendía. Eran unos símbolos muy raros, ojalá Robin estuviese en aquella isla en ese mismo instante. Me sentía muy cansada, y me tumbé sobre la hierba, y Law hizo lo mismo.
- ¿Qué crees que es?- le pregunté, y se lo dí.
- Parece que tiene pétalos dentro. - dijo, dándo vueltas al frasco para verlo mejor. - Son pétalos de la flor de la memoria.
- ¿De verdad?
- ¡Mira! - exclamó, y alzó el frasco sobre el cielo. Podía ver las estrellas tras él. - Las letras se pueden ver con la luz de las estrellas.
Era verdad, pude leer lo que ponía claramente. '' Comer para recordar''.
- Entonces, son como pétalos con recuerdos dentro... - dije, pensando en cómo podía ser aquello cierto.
- Es verdad.
Law estaba entusiasmado. Su sonrisa era increíble, y me hacía felíz verlo así. Empezaron a salir lágrimas de mis ojos, pero eran de felicidad. Por fin podía conocer mi pasado. Mi pasado estaba grabado en aquel frasco, y podía usarlo cuando quería.
- Es increíble. - todavía estaba mirando el pequeño frasco, pero me escuchó sollozar - ¿Estás lista para recordarlo todo?
- Sí.- susurré.
Apoyó su frente contra la mía y sonrió otra vez. Yo también lo hice, no lo pude evitar. Era como una enfermedad contagiosa, pero mil veces mejor. Me quitó las lágrimas, tenía la costumbre de hacerlo.
Estuvo abrazada a mí durante mucho rato, diciendo que no llorase, pero yo no podía parar. Las lágrimas salían por sí solas. Nunca antes me había pasado aquello. Empapé su sudadera por completo, y se la tuvo que quitar.
- ¿Puedes dejar de llorar? - dijo. No estaba enfadado en absoluto, sólo que no le gustaba nada verme llorar, y todavía no entendía por qué.
- No puedo. - dije, intentando sonreir, pero no salió bien. - Las lágrimas salen solas.
Se acercó a mí, hasta que nuestros labios quedaron a pocos milímetros de distancia. Mi corazón empezó a palpitar más rápido de lo normal, me estaba poniendo muy nerviosa al tenerlo tan cerca. Aunque me gustaba aquella sensación.
Cerró los ojos, y me besó. Al principio no me lo creí, pero tuve que hacerlo. Fue un beso muy tierno, no recuerdo cuánto tiempo estuvimos besándonos, pero los dos nos quedamos acurrucados sobre la hierba, mirando juntos a las estrellas, intentando encontrar alguna forma juntándolas.
[Siento que el capítulo sea tan corto, pero no me da tiempo para escribir más. Lo siento >.< Comentad si os está gustando la historia, que esto parece un desierto xDD
He cambiado la portada, ¿cúal preferís?
Nos vemos pronto ~ ]
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LOST [One Piece fanfic]
FanfictionJanna conoce a Ace desde que tenía 10 años, pero ahora que tiene 17 no le ha visto en mucho tiempo. Todavía se arrepiente porque no se había despedido de él correctamente, pero no puede ir a por él de un día para otro. Hasta que un día todo cambia...