Epílogo

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- ¿No sois ya muy mayores para ser piratas?

- ¿Y vosotros muy jovencitos? - pregunto, y él ríe a mi lado.

- Mamá, tú ya eras pirata a los diez años. Tengo dieciséis. - dice ella, con su típica pose: los brazos cruzados.

- Sólo sois dos en la banda todavía.

- Pronto encontraremos nuevos nakamas.

- En eso te pareces a Luffy. - añado, y sonrío al acordarme de él.

Kai coge su mochila y la abre. Empieza a buscar algo, y lo saca. Es un cuaderno que reconozco al instante, sólo que la última vez que lo vi no estaba tan viejo.

- Ésto es tuyo. - dice, y lo cojo con cuidado, como si fuese un bebé recién nacido.

- ¿Lo habéis leído?

- Sí, ¿por qué nunca me contaste nada de lo que hay ahí? - pregunta Hanako, con un aire triste.

- Prefería que lo leyeses.

- Yo también lo quiero leer. - dice él, curioso.

- No creo que eso pase.

- ¿Por qué?

Es mi diario. Todos mis sentimientos están escondidos en este pequeño cuaderno, y la verdad es que me da vergüenza que él los lea. Hay tanto amor dentro... es como un tesoro para mí. Que no quiero que él lo lea.

- Mamá. - dice Hanako, mientras bebemos un poco de café. - ¿Crees que somos lo suficientemente fuertes?

- ¿Kai y tú? - ella asiente - Sí lo sois, y haríais una pareja perfecta.

- ¡Mamá! - se pone roja como un tomate, y yo río - Somos amigos.

- Amigos, ya. - doy vueltas al café con la cucharilla - Es muy guapo.

- ¡Mamá! - grita, otra vez.

- Está bien, está bien.

Las dos nos quedamos calladas. No es un silencio incómodo, sino más bien especial. Las olas hacen que el barco se mueva levemente, y algunos pájaros vuelan sobre el cielo azul, donde no hay ni una nube.

- ¿Por qué no seguiste escribiendo? 

- Pasaron demasiadas cosas en los siguientes días como para escribir todos los acontecimientos en ese pequeño cuaderno... - dije, recordándolo.

- Nos has dejado con ganas de más. Es como un libro sin terminar.

- Law se fue con sus antiguos nakamas, yo me quedé con Luffy, derrotamos a muchos enemigos más y...

- ¿Cómo os reencontrasteis? -dejó el café en la mesa-  ¿Papá y tú?

- Eso es una larga historia.

- Tengo tiempo para oírla. - dice, y junta las manos en modo de súplica.

- ¿Estás segura? - ella asiente, se le ve muy interesada.

« Mientras estábamos descansando en una isla que no recuerdo el nombre, en el Nuevo Mundo, vimos el barco de la banda de Shirohige, y nunca antes me había sentido tan nerviosa. Hacía muchísimo tiempo que no veía a Ace. Dudaba que estuviese en el barco, ya que muchas veces iba a misiones por sí solo. Ya sabes, a veces viene bien estar sólo, con uno mismo.

Luffy quería ir a saludar a Shirohige y darle las gracias por cuidar de Ace, estaba muy emocionado por ver a su hermano. Sentía que no estaba preparada para verle. Habían pasado tantas cosas... Una parte de mí estaba ansiosa por verle, pero otra decía que no me acercase. 

LOST [One Piece fanfic]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora