Patinando en hielo (Hades x Qin Shi Huang) (Yaoi/BL Snv)

Cap. 2: De adulto a niño

Después de que la valquiria Alvitr Hervor entregará a su portador en manos de Hades, ella simplemente se fue del coliseo y comenzó a ir a la tierra de valkirias, donde la esperaban para comenzar con su tratamiento de belleza y anti estrés.

De eso se enteró Hades horas más tarde cuando trató de buscarla, pero ya era inútil, la valkiria ya se había ido y las otras que aún permanecían en el coliseo estaban muy ocupadas con sus portadores como para recibir a otro más.

Hades intentó hablar con Brunhilde sobre el tema, sin embargo ella le recalcó que era su culpa y como un buen hombre dios debía asumir la responsabilidad; el rey algo agotado, volvió a sus aposentos, donde al llegar encontró a su esposa Perséfone jugar con algunos bloques junto al emperador, ellos en verdad parecían que se divertían mucho.

—Oh, ¡cariño!, bienvenido, vamos dime ¿qué te dijeron las valquirias?— preguntó feliz Perséfone mientras le pasaba otro bloque a Qin Shi Huang.

—Creo... que ese humano, estará bajo mi tutela por un tiempo— le respondió Hades mientras suspiraba pesadamente y comenzaba a sentarse en su sillón.

—¿Tu-tela? Señorita Perséfone ¿qué es tu-tela?— dijo curioso el emperador.

—No digas disparates humano, tú sabes muy bien lo qué significa, así que...— pero entonces es interrumpido por su esposa mientras iba hacia él y le tapaba la boca.

—E-Eso quiere decir que te quedarás con nosotros— Hades miró a Perséfone con duda mientras el joven emperador se emocionaba.

—¡Hurra!, me quedaré con la señorita Perséfone y no con la malvada valquiria jaja...— esto hizo reír nerviosamente a Perséfone y ante la afirmación, Hades tenía una visible cara de molestia.

—Perséfone, claramente ese humano está fingiendo, un simple golpe no te hace perder la memoria, además cuando él salió del agua claramente me respondió como normalmente lo hacía antes de quedar inconsciente— Hades está molesto y Perséfone lo sabía perfectamente.

—Cariño, tú sabes que hasta yo sé cuándo una persona está fingiendo, así que déjame decirte que cuando te fuiste a buscar a la valquiria yo misma hice mi propia investigación y al parecer el emperador con el que te enfrentaste, tiene ahora 8 años, sé que esto no te parece real, pero déjame decirte... qué él ¡no recuerda nada de lo que vivió!, sólo sabe que tuvo un padre muy terrible que mató a mucha gente, ¡sólo eso!— ante las palabras decididas de su esposa, Hades comenzó a dudar.

—Pero, qué pasará si se vuelve una molestia para ti, no quiero estresarte con esto— él besó la mano de Perséfone antes de dejarla sentada en su regazo.

—No creo que sea tan malo, mnn... considéralo como si tuviéramos un bebé, un bebé grande y peludo jaja— ante la mención de aquello Hades comenzó a abrazar a su esposa mientras aspiraba el leve perfume que le regaló para calmar su frustración.

Desde que Hades conoció a Perséfone, tenía muy en claro que jamás podría tener descendencia con ella, ya que Perséfone era una beta algo peculiar, ella no era estéril ni siquiera él, pero por mucho que lo intentaron nada surgía en el vientre de su esposa, hasta Zeus le dijo que abandonara esa esperanza, ya que la unión entre ellos posiblemente sólo tendría la probabilidad de un 5% de fertilidad; en ese tiempo, al escuchar aquello por su hermano, le originó una gran molestia y simplemente decidió hacer oídos sordos, Hades no quería creer aquella tan baja cifra pero ahora en la actualidad, aún sabiendo eso, él mantenía la esperanza de que algún día un futuro cachorro vendría a ellos.

Como veía que la sonrisa de su esposa desaparecía lentamente, Hades decidió abrazarla un poco más y levantar sus ánimos con algún recuerdo.

—Pero tú misma dijiste que los bebés son criaturas horribles y malvadas, ¿acaso no te acuerdas lo que ocurrió con Adonis?— dijo tranquilo mientras miraba cómo su esposa cambiaba su actitud a una fastidiada.