Qin, al llegar a la habitación de su amigo, se puso algo nervioso ya que recordó las palabras de Hades.
En ese momento, el emperador tenía algo de miedo por encontrarse nuevamente con Hades, aún así fue cauteloso, aprovecho un poco de su tiempo libre y pudo llegar justo donde está sin que nadie lo notara.
Sin esperar tocó un par de veces la puerta hasta que esta se abrió, Simó al verlo se sintió confundido ante su presencia, pero no necesito preguntar ya que vio la sonrisa nerviosa que Qin siempre le daba cuando se metía en problemas.
—Supongo que... lo que dirás no es algo bueno, ¿no?— dijo aquello mientras lo dejaba pasar.
—Al parecer me conoces muy bien amigo— con el permiso silencioso de Simó, Qin se adentró a la habitación.
Una vez dentro, su amigo suspiró suavemente antes de hablar.
—Espera en el sofá, traeré algo de café— dijo Simó después de cerrar la puerta.
Qin asintió y se fue al sofá mientras que esperaba a su amigo, el pequeño perro, que una vez lo recibió, ahora se entraba sentando junto a él en el sofá, al parecer también el animal entendía la situación un poco nerviosa del humano, así que tranquilo, se echó cerca a sus rodillas.
...
Después de unos minutos, venía Simó con dos tazas en sus manos, Qin le agradeció por el café y Simó tranquilo lo dejó encima de la pequeña mesa frente a él para que el líquido se enfriara.
—Listo, ahora dime, ¿qué es lo que ocurrió?—
A pesar de sus nervios Qin decidió contarle el mal entendido que pasó hace ya algunas horas, su amigo Simó escuchó todo de forma paciente hasta terminar con su café.
Cuando Simó ya sólo escuchaba las preocupaciones de su amigo, decidió poner su mano encima de todo ese cabello revoltoso, que Qin siempre llevaba consigo desde que lo conoció, y comenzó a despeinarlo un poco, el Qin de antes, se hubiera quejado y apartado pero con el que está frente ahora, de cierta forma cumplía su capricho más oculto.
—Creo que ya terminaste— dijo calmado Simó mientras que Qin asentía.
—Si, pero ahora.... no sé qué haré, no quiero que Hades-xiang me odie— dijo Qin apenado mientras aún recibía las caricias de su amigo.
Ante lo dicho, Simó quería reír un poco, por lo que recordaba, su amigo siempre que se encontraba con Hades trataba de hacerlo enojar, haciéndole jugarretas o hablándole de una forma muy sexual, y no importaba si alguien miraba, Qin siempre hacía suspirar a Hades, pero de una mala manera.
—Veo que lograste hacerlo enfadar— dijo Simó sin pensar.
Qin confundido, alzó su venda y miró a su amigo para entender mejor lo que sucedía.
—¿Cómo?.... Acaso.... ¿Acaso ya antes lo hice?— Simó rió levemente y negó ante su pregunta —Entonces dime Simó que hago para que Hades-xiang no me odie—
Su amigo se veía tierno con aquella mirada preocupada, así que alejó su mano y carraspeó, ocultando su boca con su mano en forma de puño, para sacar esos pensamientos de su cabeza.
—Sencillo, tienes que ir con él y disculparte—
—Hablas de ese joven ¿Po... Poseidón?— Simó lo pensó una vez más y miró a su amigo.
—No..., posiblemente salgas muerto de ahí— esto asustó aún más a Qin.
—¡Vaaaamooos! Dime qué hago primero— Qin estaba tan impaciente que movió ligeramente de los hombros a Simó antes de escucharlo reír un poco.
![](https://img.wattpad.com/cover/304963500-288-k738959.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Patinando en hielo (Hades x Qin Shi Huang) (Yaoi/BL Snv)
Fiksi PenggemarGracias a un golpe ocasionado por el mismo dios del inframundo, Qin Shi Huang o más conocido como el joven Ying Zheng pierde la memoria y ante el enojo de su valquiria obliga a este mismo dios a cuidarlo ya que ni ella misma soporta los destrozos qu...