Cap. 32: Verdad

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Una tranquila deidad comenzó a pasear por los pasillos de su zona egipcia y la razón de aquello, era por sus padres.

Ellos, como cada 2 años y medio, vinieron en el día de la Luna Azul, para exigirle que se despose con un omega de su selección, ya que era la última tradición familiar que faltaba festejar como último hijo, cosa que Anubis siempre se negaba, en verdad, él veía aquel festejo realmente innecesario y aquello lo hizo tratar de entender a sus padres, pero estos para no molestarlo tanto sólo le presentaban lindas o lindos omegas, cosa que Anubis cortésmente los rechazaba, además... su corazón no lo permitiría, ya que, desde que finalizó el Ragnarok, este le pertenecía a un omega en específico y no podría desposarse sabiendo que aún tenía sentimientos por aquel omega, es por eso, que prefirió guardarse aquellos sentimientos antes que olvidarlos.

Al final, sólo por esta ocasión, dejó a sus padres esperar en su pabellón, él... no se sentía con ánimos de verlos, así que por eso prefirió recorrer las instalaciones de su zona, mientras veía, cómo todo se encontraba en orden.

—Mnn... tendré que elaborar más de estos jarrones— se dijo así mismo Anubis mientras veía detalladamente el muy hermoso jarrón, que había elaborado días antes con sus propias manos.

Algo que le gustaba mucho a la deidad egipcia, era la elaboración, no importaba que tan pequeño o delicado sea la creación del material, él, siempre buscaba la forma de hacer bien su trabajo.

En eso, mientras Anubis caminaba, siente un aroma muy familiar para él, haciendo que por unos momentos, lo hicieran sentir cálido, al igual que ese día, en dónde lo conoció... a él...

'¡Basta!... Tranquilízate Anubis, olvida eso, no es probable de que él este aquí'

Sin embargo, cualquier duda murió al sentir un pequeño jalón de su ropa.

Detrás de él... se encontraba el omega del cual se enamoró...

—Simó...— dijo atónito Anubis mientras veía cómo aquel pequeño omega lo miraba con los ojos brillosos.

Alfa...— mencionó en un susurro Simó antes de comenzar a jalar del brazo a Anubis, para así bajarlo a su altura.

La deidad sabía lo que quería el omega, sin embargo antes de ceder, despierta de su ensoñación atónito, alejando a Simó, comenzando a agarrar de sus pequeños hombros y enderezando su cuerpo antes de evitar cualquier contacto, viendo está vez con sorpresa al omega.

—¡Simó!, ¡¿Pe-Pero que haces aquí?!— dijo con preocupación el alfa mientras veía por los pasillos con alerta —Tu... ¡no deberías estar aquí!— pero su preocupación se detuvo al oler bien el ambiente —t-tu celo... ¡Simó!... ¡t-tienes que volver!, es peligroso estar... aquí...— sin embargo sus palabras se detuvieron al ver al omega derramar algunas lágrimas —Simó...—

Anubis se mordió los labios conteniendo su instinto al querer dejar salir su aroma para calmarlo, no era correcto, ya que sabía perfectamente, que haría cometer adulterio a su ser amado.

—Espera, ¡perdón!, no... no quería herirte, yo...— pero al apartar las manos del omega para calmarlo, la imagen frente a él, le dio un brinco a su corazón.

—Snif... Tu... ¡¿Tu también me rechazaras?!... ¡Alfa!...— fue así, que con un gemido lastimero, Anubis no se contuvo y abrazó a aquel pequeño omega, que hizo latir su corazón, desde ese día en que este lo utilizó.

—No... yo jamás te abandonaría— era incorrecto aprovecharse de aquella situación y eso lo sabía muy bien Anubis, ya que no dejó al omega apartar su cabeza de su cuello.

—Alfa... tómame, te lo pido... ¡Tómame!— decía Simó mientras sus piernas temblaban por el celo —Tómame~...—

Anubis contuvo un ronroneo al sentir cómo aquel omega blanco lamía la parte desnuda de su cuello, quería que siguiera haciendo aquello, pero sabía perfectamente que el Simó que él conocía, lo odiaría por siempre si cedía mientras él era inconsciente, además de tomarlo, sabiendo de que tenía una familia presente.

Patinando en hielo (Hades x Qin Shi Huang) (Yaoi/BL Snv)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora