¿Te quedas conmigo?

23- Dylan - Una noche mágica que jamás olvidaré

Una noche mágica que jamás olvidaré

Una mañana, una demasiado común y corriente para muchos, pero ¿para mí? Para mí era una demasiado agitada, pero, sobre todo, emocionante.

Hoy, era hoy.

—Dylan, cálmate. Te va a dar un infarto antes dé. —Me dijo Edson, aguantando una risotada.

—Sí, brother. Pareces un estudiante que no hizo nada en todo el año esperando su nota final... —Aaron me da aire con un cojín.

—Dylan es ese estudiante que no hizo nada en todo el año.

—Eso es mentira, el que no hizo nada nunca fuiste tú, Ed —lo corrigió Ari.

—¿Qué importa eso? —rodó sus ojos —. Al menos entendieron el ejemplo.

—Ya dejen de hablar, que ponen más nervioso, a don nervios —rio Phoebe.

—Prácticamente, es la primera fase. —Jacob se sentó a mi lado —. Venga, todo estará bien, vale —me sonrió.

Una vez les dije que todos vinimos de lejos. Y, con eso me refiero a que del team, solo Phoebe es de aquí de Illinois; Jacob es de Barcelona, España; Aaron de Guyarat, India; Edson de Bloomington, Indiana, USA; Ariana de Antigua Guatemala, Guatemala, y yo que soy de Nashville, Tennessee, USA. Somos el equipo de los internacionales.

Y la verdad no sé por qué es que les acabo de dar esta explicación.

A lo mejor y es porque sí estoy nervioso y no hallo qué hacer.

Pero se los digo para que sepan también porqué es que algunos hablan medio raro o diferente, y eso que Aaron no se ha soltado, ya que cuando se enoja o Edson lo molesta mucho siempre le rezonga en su idioma, mismo que parece que te está echando un embrujo y te aterra.

Bueno, sigamos...

Estoy sin poder decir nada, tengo los nervios de punta y ni un té me relajaría.

Seguramente se estarán preguntando: ¿QUÉ ME PASA?

Bueno, le pediré a Claire que sea mi novia.

—¡Oh, por Dios! —reaccioné al fin —. Le pediré a Claire que sea mi novia —me dio otro mini infarto por eso.

Mis amigos se comenzaron a reír de mí; hasta que Phoebe se me acercó y dijo:

—Vas a poder, ok —pasó su brazo por mis hombros y me acercó a ella —. Estoy segura de que te dirá que sí. ¿Y sabes por qué lo creo? Porque ella se ve que está también enamorada de ti.

—¿Y crees que sea para siempre?

—Lo que está destinado a ser, será para siempre —me abrazó.

—Claire y tú sois el claro ejemplo de eso —Jacob se agachó para decirme eso —. Venga, cielito, ánimo.

—Ahora quiero llorar por sus palabras —me tapé la cara. 

Llevaré a Claire a un festival de música electrónica que se hará aquí en la ciudad y se me ocurrió la idea de darle esa sorpresa y luego ir a la playa y pedirle eso estando ahí.

Tengo los nervios de punta.

He orado tanto.

Estoy sin uñas de tanto morderlas por los nervios.

Efectivamente, estoy a punto de cumplir un sueño.

El sueño de pedirle a la chica que me gusta que sea mi novia y adoro esto.