Nombres.

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Una semana después.

Con Milo, Lemur y los bebés.

Narra Milo.

Una semana, una semana de que mis pequeñas bendiciones habían llegado a este mundo, siendo sinceros cuando vinieron las contracciones sentí que no lo lograría pero gracias a Athena mis pequeños nacieron con bien además que mí papá aún le dan nervios cargarlos entre sus brazos porque dice que ya su época de cuidar bebés ya pasó, si lo sé es un exagerado de primera. Hace dos días Kardia vino a vernos y me contó de su situación con Dégel realmente me siento mal por eso. ¿Cómo podían existir padres capaces de destruir la felicidad de sus hijos? Aún me costaba entender que una persona así pudo criar a unas personas tan lindas como lo eran Camus y su hermano, hablando de Camus Kardia me dijo que ya no quiso hablar con él. Cosa que a mí me preocupo en sobre manera cuándo él me dijo eso tuve un mal presentimiento. Suspiré un poco y fui sacado de mis pensamientos cuando sentí que una manita tomó mi debo, baje la vista para ver a mí hija quien era la única que estaba conmigo en la cama. Porque los otros tres habían Sido sacados de la habitación por mí papá y mis primos que los tenían como si fueran aviones de guerra enserio que esos tres parecen niños.

Abel: ¡Milo! - dijo mientras venía entrando con mí hijo mayor que sus hermanos por veinte segundos.

Milo: ¿Qué sucede? - le pregunte.

Abel: ¿Ya sabes que nombres les pondrás? - me preguntó haciéndome pensar un poco.

Milo: no aún no se. ¿Alguna idea? - pregunte mientras él sonriendo veía al bebé y decía.

Abel: él por ser más grande y guapo se puede llamar Abel Junior - dijo mientras yo lo veía mal.

Milo: ¿Abel Junior enserio? - pregunté.

Caín: uy no que ridículo nombre - dijo mientras aparecía con el segundo de mis hijos - mejor que se llame Caín la copia - decía el otro.

Milo: - sólo rodó los ojos para después negar -

Caín: ¿Porque pones esa cara?, ¿Que no te gustó? - pregunto el idiota.

Abel: claro que no. Tú nombre está horrible mejor el mío ¿Verdad? - pregunto sonriendo el otro idiota.

Lemur: ya dejen de pelear que sus dos nombres están feos - dijo mí papá apareciendo con el tercero de mis hijos.

Abel: mira quién lo dice - dijo enfadado.

Caín: nombre de animal, ¿Tío?, ¿Porque no vas a buscar mejor a tu verdadera familia al Zoológico? - pregunto a lo que mí papá los fulminó con la mirada a ambos.

Abel/Caín: ¡Milo salvanos! - gritaron al unisonó al sentir que en cualquier momento podrían golpearlos.

Milo: ya dejen de jugar y ayúdenme a escoger les un bonito nombre a todos - les dije mientras me sentaba para después agarrar a mí hija.

Abel: a ver pensemos - dijo mientras veía al bebé - Hm... Veamos de que tienes cara - dijo viendo al bebé - um... ¿Gerardo? - pregunto mientras veía cómo él pequeño hacia un puchero - ya, ya cálmate ya entendí que no te gusto, enserio eres igual de llorón que tú madre - Susurro cosa que si llegué a escuchar.

Milo: ¡¿Que dijiste?!, ¡A ver Abel repitelo! - le grité mientras él se alejaba.

Abel: ya ya perdón - dijo mientras dirigía su vista al bebé después saco su teléfono y comenzó a escribir cuando lo tuvo comenzó a leer hasta que vio algo que le llamó la atención - o escucha este Ikki es un nombre de origen japonés y significa "él único que brilla" en lo personal pienso que le quedaría bien - dijo para después ver al bebé que sólo sonrío un poco - parece que le gusta - afirmó felizmente.

Milo: ¿Ikki?, Hm... Suena lindo ¿Tú qué dices papá? - pregunté a lo que él dijo.

Lemur: si te gusta así, por mí no hay problema - dijo él.

Milo: entonces Ikki será - respondi mientras los otros dos buscaban más nombres.

Caín: escucha este, Isaac es de origen hebreo y significa él hijo de la alegría - dijo mientras ambos gemelos veían al bebé y después me veían a mí.

Caín/Abel: el se llamará Isaac - me dijeron para después ver a mi papá asentir.

Lemur: ¿Él puede llamarse Shun? - pregunto mientras alzaba al bebé que tenía en sus brazos.

Milo: ¿Porque? - pregunté confundido.

Lemur: bueno digamos que tú abuelo quería que uno de sus nietos se llamará así, pero si no quieres por mí no hay problema - me dijo a lo que yo le dije.

Milo: esta bien, se llamará Shun, es un bonito nombre - le dije mientras mi primos veían en su celular.

Abel: bueno también tiene un bonito significado, Shun significa "él de buen carácter" - dijo a lo que Caín respondió.

Caín: mientras no se parezcan al abuelo estarán bien - dijo mientras mi papá los volvía a ver mal, yo por mí parte me comencé a reír hasta que puse la vista el mi hija.

Milo: ¿Y ella? - pregunté mientras la veía.

Lemur: bueno a ella hay que hacerle honor a sus padres con su nombre - dijo el mientras yo lo veía.

Caín: que ella se llame Camila - dijo y jure por un momento ver brillitos en sus ojos mientras lo decía. Al escuchar eso no pude evitar pensar en Camus al cual por miedo le negué la oportunidad de saber que nuestros hijos estaban en camino así que les dije.

Milo: entonces Camila será - les dije para después sostener la manita de mi pequeña que inocentemente reía al escuchar su nombre.

En Francia.

Con Camus.

Aldebarán, Izô y Suikyo veían preocupados a Camus, que desde que su madre lo visito y vio el contenido de un sobre amarillo del cual ellos desconocian su contenido se había notado muy triste, además que ya no hablaba a pesar de sus provocaciones, no quería comer y lo más tenebroso de todo era que ya no decía nada acerca de su "manzana griega" a la que ya estaban acostumbrados de escuchar miles de veces decir que era él amor de su vida.

Suikyo: ¿Camus? - pregunto mientras le movía un poco la cabeza.

Camus: ¿Que quieres? - pregunto sin ganas mientras seguía con la cara enterrada en la almohada.

Suikyo: Odysseus dice que te quiere fuera de la cama - dijo para asustarlo.

Pero el simplemente hacía caso omiso a todo lo que le decía, sólo lo escucho suspirar con tristeza, entonces sus amigos se vieron entre si para después de un par de cosas ocurrirseles algo.

Aldebarán: Camus, muy pronto tendré mí llamada del mes ¿Qué te parece si te la regalo para que puedas comunicarte con tú novio sin ser descubierto? - pregunto mientras lo vio sentarse para después decirle.

Camus: él y yo ya no somos nada - dijo fríamente.

Izô: ¿Qué dices? - pregunto un poco confundido para después ver cómo le señalaba un sobre que tenía sobre la mesita de noche.

Suikyo: no me digas que eso fue a lo único que vino tú madre - le dijo incrédulo mientras lo vio retirarse de la habitación sin decir nada.

Mientras ellos dirigía. Su vista a aquel sobre para después tomarlo entre sus manos, decidieron verlo entre todos y ahí fue donde se dieron cuenta del porque del estado de su amigo.

Aldebarán: ay no... - dijo sorprendido.

Continuará...

Juro que voy a Protegerte (Camus x Milo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora