Juro que voy a Protegerte (Camus x Milo)

Día de la Cita

Un mes después.

Cinco en punto de la tarde

Con Milo.

Un mes, un bendito mes que lo habían tenido encerrado dentro de esas cuatro paredes, respiraba aliviado por lo qué por fin podría salir de la jaula dónde su papá, sus amigos, hermano, cuñado y amor imposible lo habían tenido cautivó, aún no entendía cómo podían ser tan necios para no entender que sólo necesitaba una semana de reposo para descansar, pero bueno las cosas eran así se encontraba bañando pero sentía que se le estaba olvidando algo, algo sumamente importante lo cual no debía olvidar.

Milo: Hm... ¿Acaso tenía que hacer algo hoy? - pregunto en un Susurro mientras apagaba la regadera, hasta que escucho que tocaron la puerta.

Lemur: Milo - llamó mientras permanecía recostado en la puerta del baño.

Milo: ¿Qué pasá? - pregunto.

Lemur: Camus dijo que vendría por ti a las seis de la tarde, así que apresúrate tienes menos de una hora - dijo mientras sonreía con los ojos cerrados para después de escuchar un grito ver al menor salir corriendo del baño con su toalla puesta mientras repetía un no,no,no - no corras, podrías caerte - aconsejo mientras se iba.

Por otro lado.

Con Camus.

Camus por su parte sé encontraba en un gran dilema al no saber que ropa ponerse, mientras que Kardia lo veía con una sonrisa desde él marco de la puerta, le daba gracia ver que su cuñado en ese preciso momento parecía una adolescente indecisa al no saber que ponerse para su primera cita.

Kardia: a ver Romeo, tú Julieta no te a dicho nada aún, no vayas vestido cómo si ya fueras a pedir su mano - decía para molestarlo.

Camus: tú cállate estorbo - le dijo molestó para después cerrar la puerta de su habitación.

Kardia: Vamos Camí... No seas agua fiestas, Milo no te va a rechazar así que no importa como vayas vestido. Eres un Adonis cualquiera caería rendido a tus pies - dijo a lo que Camus abrió un poco la puerta y le dijo.

Camus: deja de molestarme Kardia, estoy nervioso - le dijo con algo de pena.

Kardia: no lo estoy diciendo por molestar, lo digo por qué es verdad, Camus eres un chico muy guapo e interesante además de todo inteligente, cualquiera querría estar contigo - le dijo mientras lo veía.

Camus: pero Milo no es cualquier persona, es alguien muy especial para mí y quiero darle una buena impresión - dijo triste.

Kardia: vamos Camus, ve sin miedo al éxito Milo no debe ser más difícil de conquistar que Dégel, estoy seguro de que pase lo que pase se lo tomará bien - afirmó mientras él otro suspiró y volvió a encerrarse, Kardia sé quedó recostado en la pared por unos quince minutos para después ver a Camus salir con un pantalón blanco tallado y una camisa de color negro y una chaqueta de vestir blanca, su cabello largo estaba perfectamente peinado.

Camus: ¿Qué tal? - pregunto al ver que el otro se había quedado callado.

Kardia: o vaya - Susurro.

Camus: ¿que me veo mal? - pregunto.

Kardia: para nada, realmente te luciste - afirmó.

Camus: gracias - dijo sonriendo.

Dégel: te vez genial hermanito - felicito el.

Camus: gracias - dijo él.

Kardia: bueno ya. Camus apresúrate que se te está haciendo tarde para tú cita y la puntualidad debe ser lo que más debes de tener para impresionar a tú futuro suegro - dijo para después comenzar a empujarlo hacia afuera, mientras que Dégel se aseguraba de que todas las ventanas estuvieran cerradas cuando estuvo seguro salió de la casa y le puso él seguro a la puerta para después caminar y subirse al auto dónde Kardia y Camus le esperaban para irse de ahí con dirección a la casa de Milo.

Con Milo

Él se encontraba terminando de arreglarse, suspiro mientras trataba de calmar sus nervios no quería ilusionarse pero tampoco quería parecer desinteresado, ¿Qué debía hacer?, Tan distraído estaba que no sé había dado cuenta de que Lemur lo observaba desde la puerta, hasta que decidió tocar la puerta y sacando al más pequeño de sus pensamientos.

Lemur: ¿Puedo pasar? - pregunto.

Milo: Claro - dijo mientras sé ponía de pie y veía como el otro entraba.

Lemur: realmente te vez muy hermoso Milo - dijo él sonriendo.

Milo: ¿En serio lo crees?, No te parece exagerado o muy extravagante - pregunto mientras el se veía.

Lemur: No. La verdad pongas lo que te pongas jamás podrás evitar llamar la atención de todos, eres un chico muy guapo y él que diga lo contrario es un envidioso - dijo mientras Milo reía un poco apenado.

Milo: basta. Tú dices eso porque eres mí papá - dijo a lo que Lemur ríendo dijo.

Lemur: tú más que nadie sabe que no miento - dijo mientras se acercaba y tomaba la mano de Milo - escucha Milo necesito que te pongas esto y por favor no vayas a quitartelo - le dijo mientras le amarraba una pulsera roja.

Milo: ¿Y ésto porque? - pregunto confundido.

Lemur: digamos que tú abuelo decía que las cosas rojas siempre traen buena suerte - dijo mientras terminaba de amarrarla.

Milo: él abuelo era una persona muy creyente ¿No? - pregunto mientras veía cómo Lemur bajaba su mano.

Lemur: la verdad es que sí, pero algo que e aprendido es que los ancianitos tienen razón en algunas cosas - afirmó.

Milo: se ve muy bonito, me gusta - dijo viendo su pulsera.

Lemur: si se te ve bien - dijo mientras lo veía - bueno si me permites me iré a esperar a Camus, de paso lo molesto un rato después de eso te hecho un grito - decía mientras se retiraba.

Milo: no lo vayas a asustar de más - pidió.

Lemur: no puedes evitar que lo haga Milo, soy tú padre es mí trabajo - le respondió para después reír.

Milo: en serío es un caso perdido - Susurro para después seguir viendo su pulsera con una sonrisa enternecida ya que significaba que si Camus quería intentar algo con él Lemur no se opondría ya que tenía entendido por boca de sus primos Caín y Abel que esa era la forma que tenía su abuelo para aceptar a las parejas de sus hijos.

Continuará...

Dato curioso: Él motivo de la pulsera roja o brazalete es porque en mi país se tiene la creencia que los trapos rojos o cosas así alejan a los malos espíritus y son de muy buena suerte, así cuentan las abuelitas. No sé si en sus países sea igual criaturitas de la creación. Ahora...

¿Qué pasará en la cita?,

¿Camus tendrá el valor para confesarse?

Descúbrelo en el próximo capítulo.

By: Shun de andromeda 123