Master Mind || ©Reidstarkgi

VIGÉSIMO SEXTA PARTE

«El maltrato puede tener un efecto a largo plazo en la mente de un niño. Pero para el niño que tiene el gen de alto riesgo y el daño en la corteza orbital la combinación es devastadora».

—"Bien, este show aéreo es militar, los padres son soldados en una guerra en un suelo extranjero, ninguna de estas tumbas son signos de remordimiento" —, habla Morgan mientras revisa de nuevo toda la información.

Reid se toma un momento para recordar las palabras del orador de la presentación a la que acudió el fin de semana y algo parece hacer clic en su cabeza mientras Morgan continúa su discurso.

—"Un minuto chicos, miren las tumbas, ¿qué es lo que les recuerdan?" —, pregunta Spencer, dándose vuelta hacia el pizarrón.

—"Tumbas masivas" —, contesta JJ.

—"Exacto, lo que indicaría que el ignoto experimentó neuronas espejo tridimensionales en su prepubertad, que reflejan un evento similar al que están creando" —, Spencer está acostumbrado a las miradas confundidas que Morgan le dedica cada vez que está explicando algo con ese tecnicismo, por lo que no le sorprende que lo haga en esta ocasión. —"Creo que el ignoto nació en un conflicto".

—"Pero ¿dónde nació en el conflicto?" —, pregunta Rossi cuando Reid ha terminado de hablar. —"¿Dónde fue la última vez que vimos tumbas masivas aquí?".

—"Jamás, no en nuestra época" —, dice Reid.

—"Jamás en nuestras fronteras. Nuestro sistema es nacional, no internacional" —, concluye Morgan, regresando la vista a Rossi.

—"García, ¿Y en bases de datos internacionales?" —, Emily se da vuelta hacia la computadora, donde está la videollamada con la analista.

—"INTERPOL es la mayor, si la tienen, están ahí" —, responde ella a los cinco agentes reunidos en torno a la pantalla.

—"Y es muy obvio que ya lo había hecho, la cuestión es dónde y por qué" —, habla Morgan después de escuchar la información.

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—"Carl, jamás creí que fueras tan honesto" —, admite Hotchner, de pie detrás de Eve, con los brazos cruzados.

—"Se requiere a una mujer..." —, habla Arnold, dirigiéndole la vista a Eve, que está aún sentada en la silla, más relajada, mirándolo. —"...para hacer a un hombre honesto". —, alza la vista hacia el agente y la regresa a la chica. —"Además, admítalo, es más linda que usted".

—"Carl, ¿sabes por qué mataste a estas familias?" —, interrumpe Eve antes de que el hombre llegue a la cosificación.

—"Ya te dije por qué" —, contesta él con algo parecido a la resignación.

—"No, me dijiste cómo" —, contesta ella, señalando la carpeta en el escritorio. —"No por qué".

—"Y las razones en este caso son muy diferentes a las que tenías tú" —, secunda Hotchner desde el otro extremo de la habitación, con la mitad del tronco superior ligeramente girado en dirección a Stark.

—"Son muy, muy diferentes" —, completa la agente.

—"Y como tan elocuentemente lo señalaste a la agente Stark, toda tu motivación fue sobre el sexo" —, prosigue Aaron, alternando la palabra de manera coordinada con la chica.

—"Motivación que aprendiste de tu padre" —, con esas palabras, Stark logra que Arnold gire la cabeza abruptamente hacia ella, conteniendo el aliento. Ambos se miran de la misma manera que Hotchner y Arnold cuando recién llegaron. Sin miedo, sin respeto, solo una silenciosa guerra.