LIBRO #1 de la Bilogia "SECRETOS ASESINOS"
-Eres mi esposa- él me sostuvo de la muñeca mientras caminaba hacia la puerta. -Nosotros debemos seguir juntos, lo prometiste.-
-¿Desde cuando?- me quede inmóvil -¿Desde cuando soy importante para ti? Cu...
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Kate...
Su voz gruesa hizo que mi piel se erizara por unos segundos y me quedara viendo hacia arriba su imponente presencia. Sebastián llevaba una camisa negra arremangada con pantalón y zapatos del mismo color. Se inclinó un poco y extendí mi mano sabiendo lo que quería, la tomó y besó el dorso mientras sonreía de lado.
-Me moje- Tina susurro detrás de mí y solo negué con la cabeza.
-¿Qué haces aquí?- bufé.
-Eso debería decirlo yo- chasqueo la lengua -es mi bar, abogada, ¿Qué te trae a Pandora?-
-Alcohol- mi amiga respondió por mi -alcohol y hombres, muchos-
Él llevo sus ojos a ella y le sonrió, como si le coqueteara -lo primero pueden tenerlo en cantidad- volvió a verme a mi -en cuanto a lo segundo, tendremos un problema abogada-
-Seb ya llegó el inversi..- Chris apareció para salvarme, al verme detuvo lo que iba a decirle y levantó su mano -Hola Kate, te ves hermosa-
-Hola Chris, lo mismo digo- ese tipo siempre me había caído bien.
-Al parecer quieres morirte joven Chris- Egorov puso una mano en el hombro de su amigo -¿de qué color quieres el ataúd?-
-yo...-suspiró - ya llegó el italiano, después hablamos de mi funeral ¿si?-
-Kate- su profunda voz hizo que volviera a verlo -espero que disfrutes y... no hagas algo por lo que luego tenga que ir a prisión- se marchó por fin.
-A eso me refería cuando dije que buscaras algo mejor- Tina soltó una risilla -que hombre.-
-Ni lo sueñes-
-AMORES- las gemelas gritaron a la par mientras caminaban hacia donde estábamos nosotras, al llegar ambas me abrazaron y a la morena igual.
Gemma llevaba un vestido strapless muy ajustado que resaltaba todo su cuerpo y las curvas de infarto que se cargaba. Al contrario, Lenna tenia una camisa y un pantalón elegante que le quedaban hermosos, su cabello negro con las puntas violetas la hacían lucir aun mas impresionante.
Se sentó a mi lado y su gemela al lado de Tina. -¿Cómo estás?- me preguntó mientras tomaba mi mano.
-Bien, estoy.. un poco cansada pero bien.-
-Vamos a emborracharnos hasta que se nos olvide que la adultez es una mierda -Gemma levantó su mano llamando a uno de los meseros, el chico se acerco y saco una libreta -queremos dos pizzas, una con rúcula y la otra napolitana.- hizo una pausa -y de bebida- le mostró la carta -de aquí a aquí- señaló con su dedo -tráenos tragos durante toda la noche-
-Entendido señorita- se marchó.
-Me agrada- ella sonrió -podría...-
-Ni se te ocurra- su gemela la corto -ese niño no pasa los 20 años-
