36화

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"Fuimos hoy al centro comercial; están solicitando pasante en un periódico local. Sé que no es lo que deseas, pero..."

Ni siquiera termina de leer el mensaje. Jungkook no le ha contestado a sus madres desde su última llamada; incluso si son buenas sus intenciones, la ayuda que ellas le brindan causan más agobio que alivio. Así que, ahí se mantiene; en la semana ha recibido dos correos de negación rotunda y dos más que le piden carta directa de Park Hyungsik para considerar darle entrevista. Él no va a pedirle nada a ese idiota, entonces lo recibe como un rechazo; no tiene trabajo, sus ahorros bajan día a día y sus madres han enviado al menos cinco trípticos sobre "10 sencillos pasos para reiniciar tu vida laboral y económica"; en serio, ¿por qué están tan obsesionadas con los grupos de ayuda? Más que ayudar, deprimen.

      Cierra su laptop de golpe, ver vacío su correo electrónico le recuerda al primer San Valentin después de ser enviado a la lista negra de su colegio; suspira, incluso llega a considerar la oferta de Taehyung. Desea ir con calma, aceptar es admitir que necesita ayuda y... No quiere ser más una carga para sus amigos, mucho menos para el alfa; es un desastre, va a la cocina por una copa de vino. Es la última botella que le queda, en los últimos días ha estado bebiendo como mínimo dos copas al día; por las tardes y a escondidas de Taehyung. Se sienta sobre la alfombra frente al sofá; mira su reflejo en la televisión, debe ducharse pronto para ir con Jimin a escribir los dichosos votos.

       Eso es otra historia, la boda. Cada día estaban más cerca y la emoción de Jimin parece incrementar semana con semana; no hay otro tema que no sea sobre decoración o la complicada lista de invitados. Dentro de unas semanas irían a probar trajes, no está listo para verle hacer una paserela entre flores color pastel y joyeria marital; tan solo pensarlo le da migraña, al mismo tiempo... culpa. ¡Debería estar feliz! Lo está, claro que lo está; solo que es difícil expresarlo como todos los demás.

"Koo, no te alejes de tu familia.
¿Estás teniendo una recaída? ¿Quieres que llamemos a tu guía?"

        Entorna la mirada, ¿no se cansan de enviarle mensajes? Apaga su teléfono para abrir su laptop, otra vez; sin embargo, no es otro artículo lo que inicia escribiendo en su primera página vacía. Por un instante, ahí se oculta; en frases escritas con violencia y cercanas memorias que, él sabe, algún día serán amargos momentos.

«Si veo entre las luces seguramente me cegaré con su brillo; estoy a un paso de distancia pero la bruma consigue hacerme retroceder. El desconcierto antes se presentaba como una sombra de torpeza e indecisión, ahora es miedo que marca el compás de un reloj... Me acecha no saber. Todo el tiempo de pie en la misma escena del crimen, olvidé cómo utilizar mis pies. ¿Cómo podría llegar a ti? Tus luces centellean y queman mis pupilas, no es tu culpa... Brillar; es mi culpa por vivir en oscuridad.»

        —¿Bebiste? —Jimin le analiza apenas ingresa a su hogar, sin embargo, Jungkook actúa bien al fruncir el ceño.

        —Tomé una siesta antes de venir —por ello los ojos suaves y rojizos, Jimin no cree en su palabra.

        —A ver, sopla —como si Jungkook fuese un adolescente que no sabe cómo ocultar detalles como esos; es sencillo que pase la prueba, entra con victoria. —Disculpa por dudar, te he notado... extraño.

        —¿Extraño? —se deja caer en el sofá, Yoongi debe estar en el trabajo. Deben ser veloces para no ser pillados. —¿Por qué?

        —Quizá sea paranoia mía —cierra la puerta y acompaña pronto a su amigo. —Te notas relajado.

        —¿Eso es extraño?

Dark ParadiseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora