Mi princesa

Capitulo 31 Un día más

Eran casi las 3 am cuando recibí un mensaje de Beck.

"Hola cariño, espero estés descansando muy bien, solo quería avisarte que el vuelo se reprogramo para las 8 de la mañana, así que espero puedas estar más tranquila, te envío mucho besos corazón, dulces sueños, te quiero."

Al recibir su mensaje, mi corazón se llenó de muchos sentimientos, entre ellos, una mezcla de tristeza y felicidad.

Sabía que todos mi planes se habían venido abajo, pero seguía ilusionada por saber que pronto vería a Beck.

"Hola princesa, estaba esperando tu mensaje, muchas gracias por avisarme, espero puedas descansar muy bien, y todo este perfecto para tu vuelo de mañana, te quiero mucho, te envío muchos besos corazón."

Tenía la esperanza de que mi mensaje recibiera alguna respuesta, pero me equivoqué.

Quizás ya está descansando...

Quise tranquilizarme con aquel pensamiento, pero igual mi corazón seguía esperando una respuesta.

A las 6am, logró vencerme el cansancio. 6:15 recibo un mensaje de Beck.

-hola cariño, buenos días, espero hayas descansado muy bien, solo quería avisarte que ya nos confirmaron la salida del vuelo como te dije ayer. Ya muy pronto estaremos juntas de nuevo. Te quiero, besos.

-hola cielo, esa es una excelente noticia, espero tengas un muy buen viaje, te quiero muchísimo, besos.

Al enviar el mensaje, mi mente y mis ojos no resistieron más y sin esperar respuesta, me quedé profundamente dormida.

6:30 Sonó la última alarma de la mañana para ir a la escuela, aún sin darme cuenta, casi como en automático, la apague y volví a quedarme dormida.

De pronto, desperté asustada recordando que tenía que levantarme para ir a clases, ví la hora, 11:30am.

-¡Maldición! -exclame, tome una ducha rápida, tome mis cosas y salí corriendo al colegio.

Vuelvo a ver mi teléfono, y noto 10 mensajes y 16 llamadas perdidas.

Los mensajes, en su mayoría eran de Beck.
Y las llamadas eran de Liz.

Les eche un vistazo rápido pero no pude detenerme a contestar, la buena noticia era qué, el hotel estaba muy cerca del colegio así que no tardaría mucho en llegar, en cuanto pudiera respondería los mensajes y me disculparía con Liz por no contestar el celular.

Llegué casi a las 12:30pm, bastante tarde pero justo a tiempo para la última clase, aunque era casi imposible que algún alumno pudiese entrar al colegio a esa hora, la prefecta me conocía bien, y por buena misericordia me dejó entrar.

Al llegar, recibí una buena reprimenda de Liz.

-¡Jordan! ¿Dónde estabas? Estuve llámandote toda la mañana. ¿Por qué no me contestabas? Creí que te había pasado algo.

-si me pasó algo -dije haciendo muecas.

-¿De verdad? Lo siento mucho ¿Que te sucedió? -la voz de Liz sonaba bastante preocupada.

-me quedé... Dormida -dije tratando de evitar reírme.

- ¡Ay boba! Me asustaste. No hagas eso, en verdad me preocupe.

-lo sé, lo siento Liz. Y pues si la verdad me quedé súper dormida, anoche no dormí casi nada y pues me venció el sueño, no habría venido de no ser que tenemos que terminar lo de mañana para la obra de teatro.

-si ya me imagino como han de estar de presionados con eso, que bueno que yo no estoy en el club de teatro jaja.

-si ya se, tu te salvas pero yo no, así que ¿Qué dices? ¿Te quedas a ayudarnos? -la veo con ojitos de súplica y accede.

-De acuerdo. Pero solo un ratito.

-aww mil gracias Liz,- dije abrazándola.

Ella solo se sonrió y después de eso tomamos la última clase. Cuando terminó, fuimos directo al auditorio donde teníamos todo lo que usaríamos el día siguiente, escenografía y vestuario.

Nos repartimos la tarea, y después de un rato, Liz se acercó a mi casi susurrando.

-Oye Jordán, ¿Ha pasado algo con Syria últimamente?

-¿Por qué lo dices?

- solo dime, ¿Si o no?

-Algo así...

-¿Que paso?

-Primero dime ¿Por qué me lo preguntas?

-¿no notaste que Syria no deja de verte?

Inmediatamente un absurdo impulso me hace voltear hacia donde está Syria trabajando en lo suyo, para mí sorpresa, la encuentro viéndome, ella se da cuenta de que la he pillado, e inmediatamente se voltea de nuevo hacia sus tareas.

-Creo que es tu imaginación Liz.

-aja si, mi imaginación.-dice riéndose.

-solo ha de ser que casualmente volteo...

-¿Cómo 20 veces? Anda dime, ¿Que ha sucedido?

-¿De verdad volteo 20 veces?

-algo así, pero ya cuéntame qué pasó.

-ayer la invité a comer, ya sabes cómo amigas...

-¿Y?

-hablamos de muchas cosas, en un momento parecía que íbamos a besarnos, no sé, fue muy extraño e intenso... Además...

-¿Que?

- me dijo que me amaba...

-¿Qué? Pero si tiene novia... ¿Que rayos le pasa? Y además -dijo alzando la voz como asegurándose de que Syria la escuchara,- ¿Cómo se atreve a decirte eso después de todo lo que te hizo?

-Liz, tranquila, por favor. -le dije eso mientras le hice señas para que bajara un poco la voz, a diferencia de ella, yo no quería que Syria se diera cuenta de que estaba hablando con Liz sobre ella, aunque por un momento pareció más que obvio.

-Jordan, es que no es justo que ahora que tú estás bien, que ya la olvidaste y que tienes tantos planes a futuro, ella ahora diga que te ama.

-lo sé, pero ve, ella después de eso hizo de cuenta que no lo dijo, y sabes que seguimos siendo amigas, así que no quiero arruinar las cosas.

- ¡hey!, tu no arruinas nada, más bien ella debería de pensar un poquito las cosas y darse cuenta de que ya perdió su oportunidad contigo y que ya esas declaraciones no tienen lugar.

-Lo sé, pero igual, no le daré demasiada importancia ¿Si?

-Haces bien Jordan, creeme no vale la pena.

Después de decir eso, Liz miró de una forma amenazadora a Syria, cosa que yo desconocía de ella, pues siempre era muy linda y dulce, pero en parte entendí que aquello significaba que sentía el cariño y la responsabilidad de cuidarme de Syria, aunque yo sabía que eso no era necesario.

Terminamos de hacer lo que nos hacía falta, acompañe a Liz a tomar su transporte, y volví al hotel.

No me había apresurado demasiado en contestar los mensajes de Beck por qué sabía que tendría el celular apagado durante su vuelo, pero en cuanto llegue a mi habitación, lo hice.

Los mensajes que ella me había enviado temprano decían que ya estaba lista para salir en el avión directo a nuestro país y ciudad. Se notaba feliz y emocionada, sus mensajes me hacían muy muy feliz, pero sobretodo el último...

"Un día, sólo un día más, y volveremos a estar juntas."