51. Corriendo.

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3 horas pasaron desde que Cale Henituse abrió los ojos.

Bueno, tres horas que la mayoría pensaba sólo eran 2 ya que paso una hora entera a solas con Choi Han.

Ahora Cale estaba sentado tranquilamente en su cama, con un nuevo pijama limpio luego de darse un baño caliente, el cuerpo fresco y cálido, comiendo con alegría el filete que Beacrox e Ian le habían preparado, las galletas que Raon le daba, el jugo que Hong le ofrecía y las frutas que On ponía en su plato.

Ah, que maravillosa vida.

Por supuesto, todo sería aún más bello si no tuviera tantas miradas viciosas clavadas en su persona.

El filete apenas y pasaba por su garganta al igual que sentía su espalda empaparse en sudor frío.

Había tardado más de 40 minutos convenciendo a su padre el conde Deruth, a su madre la condesa Violan y a sus hermanos de que estaba perfectamente bien.

Logró inventar una excusa apenas creíble para ellos, ahora el problema era que debía decirle a los demás.

Un Chef, una maga, un lobo, un santo, un aprendiz de mayordomo, un caballero, un maestro de la espada, dos gatitos y un pequeño y lindo dragon lo observaban con malicia, sin mencionar el rostro estoico del príncipe heredero que se mostraba en la pantalla del comunicador por video.

La única persona que no estaba observando cada uno de sus movimientos era el otro maestro de la espada, pero Choi Han se encontraba profundamente dormido a su lado por lo cual tampoco era un gran consuelo.

Había caído dormido poco después de avisar a los demás sobre el despertar de Cale, tal y como dijo no haría preguntas hasta que el propio Cale decidiera contarle algo y las últimas semanas no había dormido prácticamente nada aún cuando permanecía acostado en la cama, no durmio porque le preocupaba que Cale despertará cuando el no estuviera lo suficientemente atento.

Cale le dio una pequeña mirada de disgusto, estúpido punk se había dormido sin comer nada antes, viéndolo bien parecía mucho más delgado que hace dos semanas.

- Cale-nim.

- Mm. - se estremeció apartando la mirada y chocando con los ojos de Ian.

- Cale-nim... ¿Estas bien?

-.... Estoy bien.

-...

Un silencio incómodo se instaló en la habitación y Cale no sabía cómo salir de esta.

- Bueno, si el joven maestro Cale dice estar bien, entonces nosotros deberíamos creerle ¿no es así?

-... Su alteza.

- ¿Me equivoco? De todos modos, aún si se encuentra bien, todavía tenemos que investigar esta situación y descubrir que fue lo que causó que nuestro joven maestro cayera inconsciente tanto tiempo.

-.... No es necesario.

El ambiente se volvió aún más tenso y las miradas más afiladas.

Alberu entrecerro los ojos un momento.

- ¿No lo es? Si no es necesario investigar, entonces supongo que el joven maestro debe saber exactamente lo que le ocurrió y por eso nos pide que no investiguemos más ¿verdad?

-....

Cale soltó un suspiro.

- No. Yo tampoco estoy seguro de lo que ocurrió con certeza.

-....

- Necesito investigar un poco más para descubrirlo, pero sea lo que sea... Siento que debo ser yo quien lo descubra por mi propia cuenta.

¿Será que ahora si podré ser un holgazán?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora