2.Las notas.

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Nancy llegó al salón un poco desarreglada, faltaban 5 minutos para la clase y a penas iba llegando, atrás de ella venía el rey Steve Harrington. Antes de que Nancy pudiera llegar a su lugar a lado mío, Steve se adelantó, solo para molestarme.

- Hola pequeña rara.
Intento tocar mi cabeza con su mano, pero me aparte. Y antes de que pudiera irse me abrazo del cuello casi ahorcandome.
- Oh vamos, ¿No vas a saludarme?
- Dejame en paz Harrington.
- Uhhhh alguien está de mal humor.

Quite sus manos de mi cuello y lo aleje, haciendo que se fuera, mientras yo veía a Nancy con una mirada de pocos amigos.

- ¿Que? - preguntó -
- Nada, solo que tú cabello está algo desordenado.
Intenté acomodarlo.
- Gracias, pase un tiempo con Steve.
- Lo se, fuiste al baño con el rey Steve.
Dio una pequeña risa, y se sentó en su lugar.

La clase comenzó, mientras yo miraba hacia mis apuntes, una chica de tras de mi tocó mi hombro y me dió una nota.
La leí y decía:

"𝑇𝑒 𝑣𝑒𝑠 𝑙𝑖𝑛𝑑𝑎 𝑝𝑟𝑒𝑠𝑡𝑎𝑛𝑑𝑜 𝑎𝑡𝑒𝑛𝑐𝑖𝑜́𝑛."

𝐴𝑇𝑇𝐸: 𝐸𝑑𝑑𝑖𝑒.

Mi corazón comenzó a latir fuerte, y solo mire hacia donde el estaba sentado, y le sonreí, el me devolvió la sonrisa, y eso me hizo sonrojar. Mire como se rió por mi sonrisa y como me estaba sonrojando, se veía tan lindo al momento de reír, y me dió ternura ver esa mirada.

Por otra parte, sentía toda la clase una mirada pesada encima de mi, como molesta, la busque por todas partes, hasta que llegue a los ojos de Steve, me veía con unos ojos, malos, no sé cómo describirlos, pero no parecían tener odio, o molestia hacia mi, si no otro tipo de sentimiento, al momento solo pensé en que estaba molesto porque Eddie me vio y nos sonreímos, pero no entendía que le molestaba, a él que le importa.
Me interrumpío una voz de una chica.

- Soy Robin, si seré la mensajera de tus notas con Eddie Munson, que sepas mi nombre - me dijo mientas reía -
Sonreí, y dije
- Solo fue una nota, pero mucho gusto Robin. Soy Jennifer.
Ambas sonreímos y préstamos atención de nuevo.

Las clases de química se me hacían eternas pero me gustaban, pronto sonó la campana para la siguiente clase, y estuvimos ahí sentadas Barb, Nancy y yo, hablando sobre tareas y cosas de nuestras vidas, de repente me daba unas miradas con Eddie, y ambos sonreíamos, era lindo y tierno a la vez, no entendía como alguien tan lindo podía existir, a mis ojos era la persona más linda que había visto.

Comenzó la siguiente clase y acabo pronto para que pudiéramos salir al comedor a desayunar. Nancy, Barb y yo nos dirigimos por nuestra comida, y a las mesas donde nos íbamos a sentar.

- Steve Harrington viene con determinación hacia nosotras, ¿Lo invitaste a desayunar, Nancy?
Antes de que ella pudiera responder mi pregunta, el se sentó en la mesa.
- Hola hermosa - se dirigió a Nancy -
Ella solo sonrió.
- Hola Friki - se dirigió a mi - Hola....
- Barb - dijo Bárbara -
- Steve - conteste sin ánimos a su saludo -
- He notado que te envías cartas con el Friki de Munson; se deben de llevar espectacular, digo son exactamente iguales. RAROS.
Hice una cara de cuestionamiento, entre cerré mis ojos, y lo mire molesta, contestando.
- ¿Por qué te importa Harrington?
- Solo estaba comentando, que deben hacer una buena pareja de raros.
Escuché su sarcasmo.
- Bueno, ¿A ti que te molesta? Es mi problema, no tuyo.

Comimos, y seguimos hablando. Me levanté de la mesa y tome mis cosas, colocándome mis audífonos, y dije.

- Luego regreso, las veo en la siguiente clase, adiós chicas. Adiós Harrington.
- Adiós, te vemos luego. - respondió Nancy -

- ¿Por qué se va? - Pregunto Steve -
- Normalmente se va a fuera a fumar, y a leer, a veces necesita estar sola - respondió Nancy -

Me dirigí hacia las bancas que están entre el bosque que rodea la escuela, ahí podía fumar y leer a gusto. Comencé a fumar y leer, también mientras escuchaba mi música, pronto sentí que alguien me observaba, busque a mi al rededor, pero no ví a nadie, así que seguí en lo mío.
Pronto volví a sentir una mirada, pero la ignore, y pronto en frente de mi, note una sombra, como algo que se acercaba, me asusté y levanté la mirada.

Era Eddie Munson, me sorprendió verlo en frente de mi.

- Hola - dijo -
- Oh, dios mío, me asustaste, h-hola.
Puso sus manos encima de la banca para poder sentarse, note que tenía muchos anillos en sus dedos, eso me gustaba, se veían tan bien.
- ¿Sabes quién soy, no? Soy el chico que te envío notas hoy, y que te ha estado observando - rió -
- JAJA, si se quién eres, Eddie Munson. Soy Jennifer.
- Lo se, bonita, si no creeme que no te haría notas.
- Claro, ¿Que haces aqui?
- Bueno, nadie solía venir aquí, hasta que tú comenzaste a venir.
Me cuestione.
- ¿Por eso me conoces? ¿Por qué vengo a unas bancas en medio de la nada?
- Así es - sonrió - nunca nadie viene a este lugar, era mi lugar para despejarme, al igual que tú, vengo a fumar y a distraerme.
- ¿En serio? ¿Y por qué nunca te acercaste a mi?
- Soy algo tímido, por eso hasta ahora lo hice.
Sonreí - que lindo.
- ¿Te parezco lindo?
Me sonroje, y tape mi cara con mis manos, evitando que el me viera, todo el día me ha visto sonrojarme.
- ¿Por qué te tapas la cara? Eres demasiado hermosa sonrojada.
Mire a través de mis dedos. Y dije.
- ¿En serio? Todo el día me has visto sonrojarme ante ti.
- Es lindo ¿sabes?, tus sonrisas y tus miradas. Eres demasiado tierna y hermosa cuando pasa eso, y más si son para mí.
Me rei.
- Eres demasiado lindo Eddie Munson.
Se sonrojó. Y para desviar el tema, tomo mi libro y dijo.
- ¿Que lees? ¿Romance?
- ¿Que? Porque parezco terrorífica, y con cara de pocos amigos ¿No puedo leer romance?
Se rió, mirándome coqueto.
- No dije eso, de hecho este libro es demasiado bueno.
- ¿Lo has leído?
- Varias veces.
Sonreí, y mire la hora en mi reloj.
- Oh vaya, debo irme.
- Pero la clase comienza en 20 minutos.
- Tengo mis tiempos JAJAJA.
- Claro, entiendo, bueno, fue demasiado hermoso hablar contigo, espero volver a hablar contigo pronto.
- Tenlo por hecho, guapo. Te veo en clase, adiós.
- ¡Espera! - me detuvo -
Me voltee hacia el, y mirandolo cómo se acercaba a mi algo tímido, pero a la vez coqueto.
Tomo mi mano, y me dió un beso en mi mejilla.
Me sonroje y puse mi mano en la mejilla dónde recibí el beso.
- Te veo luego Eddie. - Sonreí y me alejé -

Fue nuestra primera interacción, y fue la cosa más hermosa que he sentido en mi vida, no paraba de sonreír y de pensar en cuando volveré a hablar con el, me sentía totalmente halagada, y no podía esperar a verlo de nuevo, fue lo más lindo hablar con el.

𝐍𝐎𝐓𝐀𝐒... 𝐸𝑑𝑑𝑖𝑒 𝑀𝑢𝑛𝑠𝑜𝑛.💐Donde viven las historias. Descúbrelo ahora