𝐍𝐎𝐓𝐀𝐒... 𝐸𝑑𝑑𝑖𝑒 𝑀𝑢𝑛𝑠𝑜𝑛.💐

56. Antes del juego...

(Antes de empezar, quería decir que estoy volviendo a ver la serie de Stranger Things, para ser más precisa en los diálogos, y en todo lo que va sucediendo en la temporada 4. Entonces discúlpenme si me llegó a tardar en subir un capítulo. Estamos muy cerca del final, espero sigan disfrutando)<33

𝐸𝐷𝐷𝐼𝐸:

Todo está listo para nuestro juego de mañana en la noche, me emociona mucho jugar con los chicos, todos son bastante buenos. Este día Jenn se fue a trabajar, a veces cuando trabaja, solo lo único que quiero es estar con ella, extraño pasar mi tiempo a su lado, es alguien con quien quisiera pasar las 24 horas del día. Se que hoy sale a las 5:00 así que iré por ella.
Cuando salí de la escuela, fui directo a mi casa, para esperar la hierba que necesito, también para no solo venderla a la chica que había mencionado Jenn, si no también para otras personas, a pesar de que ya casi no me dedico a esto, no está mal de vez en cuando tener el dinero extra.

Pronto la persona que me la da, a parte de diferentes drogas más, llegó. Me entrego todo, y se fue. Comencé a preparar una caja con solo la hierba, algunas otras drogas diferentes no se venden en el mismo día, normalmente las vendo por el pedido, que es prácticamente pedir, y las llevo después así que, simplemente lo demás lo guarde en mi habitación.

Pronto iban a dar las 5:00, así que subí a mi camioneta y fui por ella. Al llegar a The Palace, ella estaba saliendo, su rostro se veía cansado.

- ¿Que tal tu día hermosa? -pregunté-
- Mi nariz volvió a sangrar -dijo-
- ¿Estás bien?
- Si, solo ya sabes, cosas que me pasan, estoy bien.

Sonreí.

- ¿Vamos a casa? -dije-

Ella asintió, me acerque a la puerta del copiloto, y abrí la puerta para que ella pudiera subir.

- Señorita... -tome su mano-
- Gracias lindo caballero.

Ambos reímos, subí al otro lado, y comencé a manejar. Al llegar a casa, mire la caja donde tenía la hierba, pensé 2 veces si Jenn quisiera probarla, se ve algo... Cansada.

- Cariño... Mmm me llegó la hierba hoy, y no sé, se que quizá voy a sonar grosero, pero te ves cansada, ¿Alguna vez la has probado?

Levanté una bolsa mostrando la.

- Si la he probado dos veces creo, ¿Crees poder darme?

Asentí y sonreí.

- Podemos fumar juntos.

Ella sonrió, y solo formamos uno. Ella lo hizo y lo encendió de manera rápida, yo quedé impresionado, ¿A caso está mujer podía ser más perfecta?

Comenzamos a fumar, ella al parecer sabe controlarse con la hierba en su organismo, al igual que yo.

- Experta ehh. -dije-

Ella solo reía, comencé a reír junto con ella.

Mi cuarto se llenó de el humo y el aroma, yo estaba acostado en sus piernas, y puse música en el tocadiscos. Ella comenzó a cantar la canción que está Runaway de Bon Jovi.
Después de todo, comenzamos a besarnos. Recuerdo cada detalle.
Yo comencé a besarla profundamente, ella estaba pegada a la pared, así que yo tenía accesibilidad a todo. Comenzó a besarme y quitó mi chamarra de forma rápida, la música seguía sonando. Yo comencé a levantar su blusa en ese momento. Y meti mis manos frías, colocándolas en su cintura. Ella no se movía, solo me besaba, y pasaba sus manos por mi pecho y mi espalda, levantando de manera sutil mi playera que traía en ese momento.
Pronto se acostó en la cama, yo subí encima de ella, la mire un momento, sus ojos no estaba rojos, y ella parecía estar conciente, jamás quiero que piense que me aprovecho.

Ella seguía besándome, yo coloque una de mis manos en su cuello, ella sostenía mi rostro, y lo acercaba cada vez más a ella, yo me apoyaba en la cama con uno de mis brazos.
Estábamos flotando en nuestra vibra juntos. Ella comenzó a levantar más mi playera, hasta el punto de llegar a mis brazos; la subió más y más. La quite, sus manos viajaban por mi pecho y mi espalda como lo estaba haciendo ya.
Quite por completo su blusa, pasando mis manos por los tirantes de su bra, y viajando por su cintura.

- Quédate conmigo siempre -susurró-
- Eso haré. Te amo.

Bese su cuello, ella solo levanto su mentón, dándome más accesibilidad ante ella. Mis manos no dejaron de viajar por su cintura, bese su abdomen con suavidad, y volví a su rostro. Ella me volteo, haciéndome que yo quedará abajo, ella subió en mi, y beso mi cuello de igual manera, comenzó a entrelazar sus dedos en mi cabello, y me acariciaba. Siempre que está conmigo sus caricias me hacen sentirme muy afortunado. Solo tenerla cerca de mi, me hace sentirme afortunado.

Se detuvo un momento, y me miró a los ojos. Acaricio mi rostro, y yo no dije ni una sola palabra.

- ¿Estás drogado Munson? -pregunto-
- Creo que solo un poco... -dije- ¿Y tú?
- Yo me siento bastante bien...
- En ese caso...

Me levanté quedándome sentado frente a ella, mientras ella seguía arriba en mis piernas. Ella comenzó a reír, y bese su cuello una vez más, sus mando estaban en mi cabello, y rodeando mi cuello. Bese su pecho de manera tierna, mire un pequeño lunar que está ahí, y le di un tierno beso.

- Me gusta demasiado -lo señalé-

Ella solo rió. Comenzó a besarme de manera profunda, haciendo que mi cuello se levantará ante ella. Bajo a mi cuello, y dejo una pequeña marca.

Después de todo, nos quedamos dormidos en la cama, ella estaba acostada en mi pecho. Y una de mis manos estaba en su cabeza. Cuando abrí mis ojos, la mire como estaba bastante cómoda, le di un pequeño beso. Ella no se movía, parece una pequeña bebé, solo durmiendo conmigo. Pronto despertó.

- Hola Munson -dijo-
- Hola Munson -respondí-

Ella se sonrojó.

- ¿Que pasa? -dije riendo-
- Me encanta que me digas así, me siento especial.

Miro el collar que tengo con la plumilla, y comenzó a jugar con el.

- Te gusta, ¿No es así? -dije-
- ¿Sabes que más me gusta?
- ¿Que cosa?
- Tu, Friki.

Comencé a hacerle cosquillas en su pequeño abdomen, y ella comenzó a reír.

- ¿Vas a llamarme así, Friki?
- Si -dijo riendo- porque yo también soy una Friki.

Seguí haciendole cosquillas, y jugando con ella. Ella solo se movía, y giraba mientras reía.
La música que estaba en el tocadiscos, llenaba toda la habitación. Su risa y la música hacían una melodía hermosa en mis oídos.

Ella se abalanzo sobre mi, y ella comenzó a hacerme cosquillas a mi.

- Basta Munson -dijo-
- Basta Leabard.

Ella hizo una cara de ofendida.

- ¿Leabard? -dijo con tristeza-
- Así es tu nombre ¿No?

Ella se levantó y se sentó en la cama con los brazos cruzados y haciendo un puchero.
Me reí, y me senté en la cama junto con ella.

- Vamos cariño, es broma, tu puedes tener mi apellido.

Dije mientras comencé a besar su cuello. Ella no decía nada, solo se hacía a un lado.

- Jenn -dije triste-

Ella hizo una pequeña risita en sus labios. Se abalanzó sobre mi y dijo.

- Estoy jugando cariño.
- Te amo Jennifer Friki Munson.

Ella sonrió, y me besó, se abalanzo sobre mi con fuerza y me tiró en la cama.