Una Diosa para un beta (contenido para adultos)

Capítulo 48

Trate de moverme para salir de la bañera pero solo pude escuchar un quejido de parte de Akira y su respiración acelerada
—tengo que moverme y salir de aquí para llevarte a la cama—
—quiero completar el lazo naim por favor ya dimos el primer paso te lo suplico—
Respire profundo y tome su cara en mis manos
—te prometo que lo terminaremos pero necesito llevarte a la cama para que estés más cómoda aquí no es un agradable lugar para completarlo—
Ella besó mis labios desesperada y accedí pero tenía ese sentimiento de culpa esto no debía pasar
—voy a removerme un poco para salir tal vez sientas algo de dolor—
Y en efecto cuando trate de moverme para salir mordió mi hombro por el dolor que le causaban los movimientos salimos de la bañera ella encima de mi aún con mi sexo dentro de ella mientras la sostenía por el trasero, el agua caí toda al piso estábamos empapados así que con cuidado para no resbalar caminé hacia mi habitación pero antes había tomado una toalla y la cubrí.
Al llegar a la cama con cuidado la deposite en esta cayendo sobre ella todo mi peso sin lastimarla, aún unidos
—trataré de sacarlo y esto te dolerá pero por favor sólo aguanta—
Al tratar de sacarlo lentamente sólo hacia que ella gimiera más fuerte y apretara mis brazos mientras ambas respiraciones están agitadas termine por sacarlo todo y seguía igual de duro otra vez empecé a sentir esa necesidad horrible de sacar todo mi semen otra vez . Akira tenía su cara de lado respirando rápido con sus piernas abiertas dejándome verla total y completamente desnuda la mire sin poder evitar decir
—eres Perfecta—
Y cómo no iba a serlo, toda ella con su piel tan blanca y toda su intimidad de color rosa haciendo que se vea aún más hermoso eso ahí abajo, con amor bese su ombligo el olor a sangre llego a mis fosas nasales Akira intento cerrar las piernas pero se las abrí suavemente analizando que todo este bien
—déjame ver, creo que estás desgarrada—
Y efectivamente tenía una herida de la cual emanaba un poco de sangre
—Akira por la diosa no puedo tocarte en ese estado estás herida fuiste demasiado brusca al hacerlo así sin previo juego para que estés lista para ser tomada para esta ocasión—
—no me importa prometiste que completarías el lazo que nos une, por favor no quiero vivir con miedo de que te enamores de otra—
Abrí un poco los ojos no se que le pasaba pero hablaba como si yo fuera a dejarla por alguna mujer
—Akira no voy a dejarte por otra mujer eres mía y yo soy tuyo que te hace pensar algo así—
—sonreíste con la mucama—
Dijo dándome una mirada dura
—amor, solo me reía de la forma tan rara que tienen los de esa manada, sus saludos, sus ropas  pero no quería burlarme directamente de ella así que sonreí pero no sonreí porque  me haya caído bien en el sentido que crees—
—¿entonces no sonreíste porque te parece agradable?—
—en lo absoluto—
Dije mientras movía mi cabeza de un lado a otro
—creo que sentirme menos porque no tengo ningún don es lo que me hace desconfiar tanto—
Volví a colocar mi dorso sobre ella sin hacerle daño
—te dije que no me interesa si tienes un don o no te amo por lo que eres, una mujer maravillosa, amable y con un gran corazón, ya para esos pensamientos negativos eres una diosa preciosa, eres demasiado para mi yo soy quien debería estar nervioso y en el estado que estás tú, pero entiendo que eres mía y eso nadie JAMÁS lo cambiará Akira porque el día que me faltes ya no seré naim—
—nunca te voy a falt...—
No pudo articular más palabras metí mi lengua en su boca mientras me hablaba, ella me miraba con ese amor y deseo juntos que no pude contenerme.
La volví a besar y acaricié todo su cuerpo llenándola de besos por todas partes, sus pechos, sus costillas, su espalda, su cuello, detrás de su oreja, su cabeza, sus piernas, sus dedos, su cara y trate de guardarme la mejor parte y fue cuando volví a bajar a su sexo colocándome ambas piernas en mis hombros, la podía sentir encorvar su espalda mientras gemía fuerte y jalaba mi cabello con fuerza
—¡AHH!—
Gemía pero sin dolor movía mi lengua en círculos masajeando aquel pequeño punto que la hacía experimentar el mejor placer de su vida
—¡naim!—
Volvía a gemir mencionando mi nombre llenándome de más placer debido a que su voz era muy agradable y en este estado de excitacion era mucho más dulce y tierna volví a recordar sus 17 años pero ya era tarde ya no quería parar yo quería más mi parte salvaje la controlé bastante no iba a dañar a Akira ni a causarle más dolor aunque cuando toque anudar dentro de ella será una experiencia dolorosa para ella y muy placentera para mi y ahí nuestro lazo quedará completo como tanto ella quiere y cómo tanto yo esperé.
Akira volvió a explotar en mi boca la había preparado bien esta vez y tomé mi miembro en mis manos mientras ella abría sus piernas exhausta y yo daba pequeños empujones para entrar despacio pero esta sentía dolor profundo y hacia el intento de salirse de mi así que la sostuve por la cintura con mi mano libre cuando la punta había entrado un poco solté mi miembro la mire con los ojos adormilados y mis labios un entre abiertos la besé mientras una de mis manos se posaba en su cintra y la otra en su cuello así que le di una sola estocada entrándolo todo haciendo que grite duro en mi boca y me clave todas las uñas en la espalda mientras empezaba a temblar y soltaba gemidos de dolor, aunque sus uñas estaban en mi espalda no sentía dolor estaba tan embobado con el placer que sentía que ella podía arrancar un pedazo de mi y no lo iba a sentir
—lo siento tenia a que hacerlo así o te iba a doler más, no me odies no quiero ser brusco pero ¡AH!...estas tan apretada que mi pene está sufriendo un poco—
Ella solo gimió en mis labios mientras la besaba y me quedaba intacto dejándola que se acostumbre al dolor y al grosor de mi pene.