Capítulo 96

2K 311 22
                                    

—naim—
Caminaba por el pasillo hacia la cocina con intención de desayunar algo tenía mucha hambre ya que últimamente no estaba comiendo bien, mire hacia atrás al escuchar la voz de Arturo llamarme
—tenemos un tema pendiente—
Me dio una palmada en el hombro y caminamos a la par
—si lo sé—
—¿por qué estás tan desanimado?—
—basta Arturo haces muchas preguntas—
—solo te he hecho una pregunta lobo malhumorado creo que no está demás que quiera saber sobre mi hermana—
—tengo hambre iré a comer algo luego te veo y luego...—
—chicos, los estaba buscando—
—padre buenos días—
Arturo se tensó al ver a deimon aunque después suavizó sus rasgos
—¿pasa algo Arturo?—
Ambos nos miramos fijamente pero Arturo sonrió
—¿que? jajaja no padre solo que laila tiene malestares y justo mandaré a una chica del servicio a que le lleve un caldo cuando despierte—
—iré a verla ¿naim puedo hablar contigo más tarde?-
Asentí y seguí mi camino junto a Arturo sin hablar una palabra más.
—¿en serio te pusiste nervioso delante de deimon?—
—no lo sé mi papá tiene un don para hacerte sentir culpable aunque no lo seas o el no sepa nada—
Llegamos hasta la cocina cambiando el tema por temas banales ya que no queríamos que nos escucharan
—buenos días—
—bueno dias alfa y beta—
Las chicas del servicio pelaban víveres y picaban vegetales mientras batían huevos, el olor a tocino llegó a la fosas nasales
—huele bien aquí— dije tomando asiento en uno de los taburetes de la encimera
—¿me podrían preparar caldo para laila y llevarlo cuando despierte?
—con gusto alfa, lo mejor para nuestra futura luna—
Abril veía entrando y nos sonrió al vernos, abrazando a Arturo por la espalda
—mi cachorro que grande te has vuelto ya no puedo desarreglar tu cabellera—
—madre hoy estás muy hermosa—
Le dio varios besos en la frente y bajo su cabeza para que ella lo rascara
—Justo ahí madre—
Ambos rieron y aunque me gustaba la escena mi cabeza estaba perdida entre recuerdos de la noche anterior
—¿naim estás bien?—
Abril me acarició los hombros y pasó la mano por mi cabello y mi cabeza se recostó en su brazo
—gracias madre estoy bien—
Ambos reímos y Arturo negó con la cabeza pero una voz gruesa y llena de celos hablo con un gruñido y sacando de mi un escalofrío que recorrió toda mi espina dorsal
—amor—
Abril fue hasta deimon con calma y le dio una cachetada
—te has vuelto loco?—
—¿pero por que me pegas?—
—como te atreves a sentir celos del mate de tu hija? Naim es como nuestro hijo mayor—
Deimon bajo la cabeza algo avergonzado y espetó
—sabes que los lobos somos celosos sin importa qué-
Ambos se desafiaron con la mirada pero deimon sólo le hizo un puchero a Abril y la abrazó, Arturo me miró y yo a el, ambos queríamos reír pero la mirada oscura de deimon me heló la piel
—emm iré a correr al bosque pasen buen día—
—espérame iré contigo—
Deimon tomó a Abril de las manos y espetó mostrando un poco los colmillos afilados
—¿tan rápido se marchan? ¿Por qué no nos esperaron para tomar el desayuno todos juntos?—
Ambos tragamos grueso y Abril nos ayudo a escapar
—déjalos deimon, no ves que se están llevando bien ademas aún no he desayunado hazlo conmigo y tú Arturo no descuides a laila en su embarazo—
—no lo hago mamá, está totalmente rendida ya se a que hora despertará así que llegaré antes de que despierte—
Ambos salimos con rapidez de la cocina Arturo se despidió de Abril dándole un beso intente despedirme de Abril pero deimon gruño así que mejor salí de ahí.

Íbamos riendo mientras salíamos de la mansión guardias iban con cargamentos y nos hacían reverencia pude ver una silueta conocida hablando con un grupo de obreros nada mas y nada menos que eliot, por un momento iba a protestar pero Arturo se dio cuenta impidiéndome ir hasta allá

—basta naim vayamos a donde íbamos a ir de igual manera ya están aquí y no hay vuelta atrás—

íbamos a marcharnos pero el muy cínico tenía que arruinarme mi mañana con su presencia repugnante ante mis ojos
—hey naim—
Lo vi a lo lejos agitar su mano para que lo pudiese ver
—¡maldicion! ¿Ahora que?—
Vociferó Arturo, mi mandíbula se tensó y me quede inmóvil esperando ver como se acercaba hacia mi sin ningún descaro
—buenos días señor Arturo, beta— Nos hizo reverencia
—ve directo al grano— repliqué furioso
—tan drástico siempre usted señor beta, espero que el señor Arturo no se contagie de esa actitud tan tosca suya—
—tengo personalidad propia eliot, no necesito contagiarme de naim—
—me alegra saberlo, un alfa como usted no necesita de malos hábitos o consejos—
—no, ahora si le rompo el hocico—
Arturo me sostuvo y aunque hacia presión para que me soltara no lo hizo

—ves a eso es lo que me refiero;,naim no retiene su ira la deja fluir sin embargo un alfa mantiene su ira con calma luego busca cómo sacarla de él ya sea casando o corriendo en el bosque pero usted beta solo quiere golpear y nada más, había escuchado que usted fue elegido por ser el lobo más calmado de todo RAKSHA—

—es un buen consejo eliot—

Deimon habló detrás de nosotros, venía con varios lobos más, abrí la boca y mordí mi labio tan fuerte que lo hice sangrar

—¿solo tratabas de provocar a naim porque sabías que mi padre estaba detrás de nosotros?—
Eliot sonrió y movió su cabeza de un lado a otro mientras deimon se posaba delante de nosotros

—he puesto a prueba la capacidad de ambos, le había dicho a eliot que no quería una pelea mas pero necesitaba saber que tan susceptible es naim a la ira ya que ha perdido lo que lo caracterizaba como el más sutil y calmado de mi manada por lo cual le había dado el título de beta, pero ahora, a la mínima cosa naim explota—

—ESTÁS MAL DEIMON, MUY MAL ¿CREES QUE PONIÉNDOME A PRUEBA CON ESE CRETINO VAS A EVITAR LOS PROBLEMAS QUE AMBOS TENEMOS? ¿Estás ciego deimon? No ves que solo quiere utili...—

—¡BASTA DE ESO NAIM, es tiempo que empieces a aceptar a eliot aquí, después de todo quiero que ambos se lleven bien para que den los últimos entrenamientos de mi hijo y nombrarlo alfa ya que Arturo será papá—

Sentí miles de cuchillos atravesarme en lo más profundo de mi ser, mi cuerpo tembló sutilmente y mi lengua endureció trague grueso y tuve que doblar mi cuello hasta escucharlo crujir

—¿estás intentado darle el lugar de Kevin a eliot Deimon? A un DESCONOCIDO QUE LLEGÓ A RAKSHA HACE MENOS DE UN PUTO AÑO? ¿DONDE MIERDA TIENES LA CABEZA?—

mi lobo estaba tan molesto que no pude evitar que mis ojos cambiaran de color y mi boca se abriera sacando de mi mis caninos largos mientras doblaba mi cabeza sintiendo como mi cuerpo se iba transformado y caía al piso
—alfa—
Escuchaba los lobos decir mientras echaban hacia atrás y la mirada junto a la sonrisa negra de deimon me enojaban más, no pasó mucho tiempo cuando termine mi transformación y los lobos estaban en posición de ataca esperando una señal
—déjenmelo a mi—
Di un salto pero deimon me hizo caer al saltar convertido en la bestia derribándome sin pudor haciendo que mi cuerpo choque el suelo escuchando mi espalda crujir por los huesos aplastados, ciertamente no era competencia para una bestia pero si algo me caracterizaba era el no tener miedo a nada ni nadie.

Ambos gruñíamos mientras los demás estaban bastante sorprendidos, muchos miembros de la manada veían aquella pelea entre el beta y el alfa, escuchaba las voces y los susurros con sorpresa, tanto a favor mío como a deimon.
Las patas de deimon me mantenían inmóvil en el suelo y cuando iba a morderme Arturo lo detuvo dándole un empujón y apartándolo de mi con brusquedad, con calma me levante y sacudí mi pelaje rojizo, lamí la sangre que sabía de mi nariz mire como todos me observaban, resoplé y emprendí la huida hacia el bosque pude escuchar como los guardias decían
—¿alfa dejará que escape?—
Pero no tuve tiempo de escuchar a deimon hablar iba a gran velocidad, molesto y muy decepcionado por sus acciones por no tomar en cuenta mi opinión y por si manera tan ciega de ver las cosas.

Una Diosa para un beta (contenido para adultos)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora