Una Diosa para un beta (contenido para adultos)

Final 1

Pasaron alrededor de ocho meses, el pequeño vael había cumplido 14 meses de vida y no le hicieron una fiesta de cumpleaños debido a que laila aún estaba triste y vael no había sido conocido por nadie mas que no sean las personas del hogar, de vez en cuando iba al jardín a disfrutar del sol y aunque de vez en cuando laila reía todas las noches lloraba sobre el pecho de Arturo el cual la consolaba en silencio ya no sabía que mas decir para hacerla feliz o quitarle la tristeza.

Faltaban pocos días para la luna roja y naim empezaba a sentir el calor de su celo provocándole demasiado deseo sexual y sueños húmedos con Akira, constantemente despertaba y tenía que tocarse para alivianarse un poco pero no era suficiente.

La manada presentaba una crisis por la falta de animales para cazar, la producción de rogues aumentaba cada día más y algunas manadas a cargo de deimon se empezaron a quejar enviando cartas con quejas y correos, el consejo tenía en la mira a deimon a pesar de que él mostraba que había una invasión de rogues en sus bosques.
Cada día mataban de estos animales sangrientos ya que eran demasiados los que aparecían constantemente causando pérdidas de lobos quienes aparecían muertos, se rumoraba en otras manadas que la gran manda RAKSHA estaba en quiebra cosa que provocaba malestar en deimon y mucha agitación ¿quien no quería su puesto?
La casa de naim había sido terminada pero no quería habitar en ella hasta que no se cumpliera la llegada de Akira, a pesar de los inconvenientes habidos en la manada su relación con deimon no dejó de funcionar y aunque no decía nada al respecto ya que deimon saco por completo de sus vidas a eliot sabía que parte del desastre era por culpa de él.

—naim—
—¿si?—
—necesito que vayas a los campos y verifiques cómo están las producciones, olvídate de los entrenamientos creo que Arturo puede encargarse de los chicos de este año, el será el que tome el puesto de Kevin mientras se cumple su condena y yo pueda descansar—
Naim asintió le parecía bien Arturo era más que suficiente para eso, la puerta fue tocada toc toc
—buenos días—
Arturo venia entrando con prisa y tomando asiento su rostro reflejaba incomodidad y su frente marcaba una arruga deimon viendo aquello se percató y le preguntó
—¿que te pasa?— aquella pregunta llamo la atención de naim
—no es nada—
—Arturo no me mientas ¿podrías decirme que te pasa? Soy tu padre pero también soy tu amigo—
Este bufo algo incómodo pero espetó acariciando su brazo
—siento una molestia en mi brazo—
Tocó el brazo que una vez fue mordido por un rogue mientras iba en busca de laila al bosque, deimon frunció el ceño no era normal que a un lobo le doliera un brazo por una herida pasada y de hace tanto tiempo, naim algo callado pero preocupado pregunto
—¿desde que tiempo te sientes así?—
—hoy he empezado a sentir punzadas leves y calambres en el trato de moverlo pero solo aumentan las punzadas—
—llamaré al doctor—
—papá papá, por favor eso no es necesario tal vez me golpee y no recuerdo, no lo sé o simplemente el peso de laila cada noche cae sobre ese brazo incluso el de Vael—
Aún así la preocupación era muy notoria en su padre los lobos no sentían dolores tan fácilmente y de ser así había alguna causa.

Tiempo después naim fue en busca de Vael tocó la puerta del aposento de linda y ahí estaba laila hablando con ella aunque linda no respondía pero sabíamos que aún vivía
—hey—
—hola naim— respondió volviendo su mirada a su madre
—¿como estás?—
—no te puedo mentir, tengo la mitad de mi vida desecha pero mientras mamá respire como lo está haciendo tendré esperanzas además la otra mitad es de mi hijo y de mi Arturo, ufff Arturo creo que no he sido una buena pareja luego de todo lo que ha estado pasando—
Naim se acercó y le colocó una mano en el hombro
—puedo asegurarte que Arturo nunca dejará de amarte sin importar qué, en tu posición estaría igual entendemos que la estás pasando mal con linda en este estado, Kevin ya-ya no está y ahí está vael creo que él aquí a ayudado a que las mentes de todos se mantengan un poco ocupadas—
—mi pequeño ha sido un poco intenso pero su risa llena de felicidad mi corazón, por cierto falta poco para que regrese Akira—
Naim sonrió su corazón brincaba de alegría faltaba poco para que el amor de su vida vuelva a él trataba de no pensar en eso para no desesperarse y sentir que los días pasan lentos.
Hablo un rato más con laila y se despidió luego de preguntar donde estaba el bebé y esta decirle que estaba con Abril.