No todo lo que brilla es oro

¿Sigues aquí?

Pasamos una noche tranquila sin que nadie nos molestara. Las demás compañeras llegaron la noche anterior sin hacer ruido. Por la noche nos dejamos las cortinas abiertas y al notar que había demasiada luz para ser las 7 de la mañana caí en la cuenta de que no nos había sonado la alarma. Me incorporé de golpe y revisé la hora, efectivamente, llegábamos tarde.

— ¡Llegamos tarde! — grité y en respuesta ella se giró dándome la espalda y haciendo un puchero acompañado de un gruñido.

Le tiré de la manta haciendo que esta cayera al suelo, esperé a que se levantara y se alistara pero lo único que tuve como respuesta fue un gruñido por su parte.

— ¿Cargaste ayer el móvil? — no me contestó — Me lo imaginaba, ahora levántate y vístete.

— Ve yendo, ahora te alcanzo — más perezosa y no nacía, yo también estaba cansada y no tenía fuerza para pelear justo después de levantarme.

La ignoré y me fui al baño para alistarme — sorprendentemente ella me siguió. — No tardamos en salir, pero una vez enfrente de la puerta del aula, nos quedamos quietas sin saber quién sería la que tendría que dar las explicaciones.

— Llama tú.

— ¡¿Y yo por qué?! — murmuró ella.

— Porque yo te he despertado y hemos llegado tarde por tu culpa — soltó un gran suspiro sabiendo que no iba a salir ganando de esta conversación.

— Hola Señorita Brooke — le dijo Hope con voz temblorosa en cuanto abrió la puerta — Disculpe la tardanza pero–

— Os vais a quedar una hora extra en estudio como castigo, como es el primer día no os pongo el parte pero debería de hacerlo, no me hagáis arrepentirme.

— No volverá a ocurrir — dijo Hope con la cabeza agachada mientras se mordía el labio

— Sí, lo sentimos — terminé de decir yo.

Fuimos a nuestros sitios que por suerte no estaban muy separados y esperamos pacientemente a que se acabara esta tortura.

Hope

Acabamos las clases más rápido de lo que esperaba, Adara ya se había ido y yo estaba volviendo a la habitación.

De camino a mi cuarto me crucé con una persona alta y con ropa deportiva, pero no me fijé demasiado en él.

Cuando entré a la habitación, encontré a Adara en la cama con los ojos rojos, pero lo más probable era que fuese por cansancio y antes de que pudiera preguntar cualquier cosa, ella me miró y sonrió.

— Has vuelto pronto — dijo ella incorporándose.

— Me he adelantado para alcanzar a comer algo — hice una pequeña pausa — tú también has llegado antes — dejé todo en mi cama y empecé a cambiarme al igual que ella.

— Acuérdate de que hoy tenemos que quedarnos una hora más. — me comentó ella y yo suspiré de mal humor.

Asentí cansada y me tumbé en la cama. Adara se sentó al lado mío y por poco no nos volvemos a quedar dormidas de no ser por el constante ruido de los coches que se escuchaban por la ventana.

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Al llegar, la clase estaba vacía, así que sacamos los teléfonos y decidimos esperar unos minutos.

— Si no llega en un rato — dijo mirando el reloj, — nos vamos. — yo por supuesto asentí estando de acuerdo con ella.

Pasaba el tiempo y no llegaba nadie, estábamos empezando a cansarnos de esperar.

— Se habrán olvidado, recoge tus cosas — para cuando había terminado la frase, ya estaba en la puerta.

— ¿Vienes a dar una vuelta? — me indicó rápidamente.

— Claro — le dije asintiendo y pensando en que quizás nos deberíamos quedar un poco más. Cogimos las chaquetas y fuimos.

Adara

Salimos fuera una vez que nos liberamos de toda la carga de libros que teníamos encima y si llegaba a saber que iba a hacer este frío no hubiéramos salido, nos podríamos haber quedado en la cama viendo una película — que cómodas estaríamos — pero a pesar de eso, decidimos seguir con nuestro plan inicial.

Después de haber recorrido el exterior, nos dirigimos a las habitaciones de nuevo, pero antes de llegar ambas nos fijamos en que alguien estaba en la entrada de la residencia, nos fijamos con un poco más de detalle y casi me caí al suelo cuando le reconocí. — mierda, era él — nos miramos Hope y yo sin saber si ignorarlo o salir corriendo.

<< Espera, puede que me estuviera equivocando. No. Le reconocería en cualquier sitio, ¡qué pasaba con este hombre>>

— ¿¡Tú otra vez!? — dije casi gritando mirando hacia la persona que teníamos delante.

Él despegó los ojos de su teléfono y los llevó hacia los míos, puso la misma cara de sorpresa que yo, solo que la suya estaba acompañada con una sonrisa torcida.

— Tendríais que estar en detención conmigo ahora.

— Se nos quedó mirando sin ningún tipo de emoción y sentía como empezaba a palidecer poco a poco.

Puse lo más parecido a una cara de asco mientras le miraba y él parecía compartir el mismo sentimiento de repugnancia.

— Mira, a mí tampoco me apetece verte la cara todos los días pero es lo que hay.

<<¿Cómo que todos los días?, en dónde me había metido.>>

— Para el horror de todos — dijo en un murmullo, pero alcancé a escucharle y le miré desafiante.

Hope dió unos cuantos pasos hacia delante hasta hacer que él la mirara.

— Es que fuimos al estudio, pero no había nadie, así que pensamos que no teníamos que ir y como nuestra tutora no estaba, no sabíamos a quién preguntar — Hope contestó tímidamente como si nunca hubiera roto un plato y noté como él la fulminaba con la mirada.

— Entonces os veo después de prep en– — trató de decir él.

— Hasta luego y nos vemos luego — interrumpió Hope mientras me empujaba para salir de ahí lo antes posible.

(Prep: estudio obligatorio para todos los alumnos)