Capítulo 25

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POV Diluc


Llevo una hora buscándola y la multitud no ayuda en nada, no se encontraba en ninguno de los molinos que se encuentran en la ciudad. 


Esto es mi culpa, no me aseguré en dejarla en buenas manos, si tan solo me hubiera acompañado...


No puede ir muy lejos, aquí el problema es que ella vaya al exterior, aún no está preparada para los peligros de afuera.


——¡Maestro Diluc! Lo he visto dar vueltas por la plaza, ¿busca a alguien? —— pregunta la esposa de uno de sus clientes más frecuentes, Nimrod.


——Buen día Eury, ¿De casualidad ha visto por aquí a una chica con cabello castaño oscuro? Viste con un vestido blanco y es algo bajita —— hago un gesto colocando mi mano a la altura de mi cuello.


——Mmh... ha pasado mucha gente por aquí... ahora que lo dice —— se voltea rápidamente en dirección en los callejones del oeste de la ciudad —— creí verla junto a la pequeña Diona cuando compré mi collar... ahí ——señala.


——Le agradezco —— me alejo buscando por todas partes con la mirada.


Es difícil buscarla con tanto olor a flores, siento que me distrae de lo que hago ahora mismo. Ella huele a refrescantes cecilias y teniendo muchas de ellas alrededor me confunde. Si no fuera por un grito que escuché, no la hubiera encontrado. Al otro lado del callejón se encuentra la pequeña felinés y a la que he estado buscando todo este tiempo.


No quería ser un entrometido, pero su conversación disparaba en algo muy trivial, llamando sorpresivamente mi atención.


——No era necesario que me buscaran junto a ese tipo... gracias igualmente... —— responde cabizbaja.


——Diluc es muy gentil, no lo juzgues tan rápido Diona, puede que se lleven bien en algún sentido —— le acaricia suavemente su cabeza, ¿le desagrado?


——Gracias a su trabajo, mi padre pasa tomando todo el tiempo, ya no juega conmigo... —— oh no, problemas de alcohólicos.


——Eso es algo independiente al vino, ¿le has dado a entender esas cosas a tu padre?


——Lo intenté, pero estaba borracho, no se lo tomó en serio, pasa así todos los días después de cazar.


——Lamento escuchar eso... ¿Y si lo acompañas a cazar no crees que podrías intentarlo?


——Solo queda probar... —— posa pensativa.


Salí de la pared que me separaba de ellas para sorprenderlas con mi presencia, no esperaban verme.


 ——¡_________!, he estado buscándote, ¿qué te ocurrió? —— no puedo descifrar su mirada, se ve titubeante y más precavida.

Extraños - Diluc y lectoraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora