CAPÍTULO. 29

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CAPÍTULO 29: Noche Gatsby.

—¿Cuándo viene papi Lou? —preguntó Lessy, mientras observaba atentamente como su tío Niall cortaba la carne de pollo en pequeños trozos.

—Bebé —contestó mirándolo a los ojos— ¿Recuerdas que papi Lou se fue de viaje hace poco? —el niño asintió—, esta vez solo tardará unos días, lo prometo.

Esa caricia en su mejilla fue tranquilizadora, era su tío el que cuidaba de él. Aunque se preguntara porque su papá no llamaba como solía hacerlo en ese viaje y en ocasiones lo cuestionaba en voz alta, su tío respondía que pronto llamaría.

Lessy era buen niño, un poco travieso sí, pero no tan problemático como para quejarse de cuidarlo por tiempos prolongados.

Aquella madrugada, Niall había sacado a su sobrino de sus cobijas, aún dormido se lo llevó y no mentiría al respecto, se sentía mal de llevar a Lessy con un hombre tan peligroso como Joseph. Pero estaba cerca de su objetivo y si todo saldría bien, podrían deshacerse de ese hombre para siempre.

Tampoco dejaría que Lessy se separa de él, esa fue la condición que Joseph extrañamente aceptó sin rodeos. Con Shawn tenía planeado como regresar a Lessy a casa, así que, confiaba en lo que hacía.

Por otro lado, estaba Damiano, esa noche memorable que internamente deseaba se repitiera al menos por toda la vida, pero el futuro era incierto así que se obligaba a no ilusionarse, a no seguir lo que podrían ser solo espejismos.

Tenían hora y media para vestirse, arreglarse e ir hasta el lugar donde se llevaría a cabo la fiesta.

Rothstein había dejado en claro que la invitación incluía hospedaje en su extensa mansión, solo debían confirmar su asistencia para que se les designara una habitación. Niall optó por aquella oferta, pero a partir de esa misma noche, con el pretexto creíble de no importunar el sueño de su sobrino ya que tenía establecido su hora para dormir. Aunque secretamente, al día siguiente de la fiesta pretendía husmear un poco alrededor, para intentar averiguar o escuchar alguna conversación.

Le pareció extraño el repentino viaje de Shawn -con la excusa de recibir una llamada de Joseph, para atender un asunto pendiente- algo que no pudo corroborar ya que había perdido comunicación con su tío, hace un día atrás. Pero lo dejó pasar, sabía que Shawn nunca le fallaba, no al darle su palabra y antes de partir le aseguró que se encontrarían en aquella mansión.

Al terminar de vestir a Lessy con ese adorable conjunto que iba acorde a la temática de la fiesta, Niall sonrió por lo guapo que se veía su sobrino.

Le acomodaba las solapas de ese pequeño saco, mirándolo con adoración cuando recordó algo importante. Se acercó hasta su maletín y de este sacó algo que su sobrino debía conocer, un objeto del cual, esperaba que, recordara su apariencia.

—Lessy... —llamó—, mira, es un Kevin pequeño. —extendió una figurilla de ese minion que tanto le gustaba a su sobrino.

El niño sonrió en grande, observando el objeto minuciosamente, no había visto a un Kevin tan diminuto hasta ese día.

—¿Para mí? —preguntó

—Es de papi Lou —respondió Niall, buscando la completa atención de su sobrino—. Escucha Lessy, quiero que pongas atención a lo que diré ¿entiendes?

Lessy asintió lentamente un poco inseguro.

—¿Recuerdas que siempre te digo que robar es malo?

—Tía Victoria dice que bien.

Niall resopló con una risita, Victoria y su particular enseñanza a un pequeño niño que apenas cumpliría tres años.

—Ella tiene razón —dijo Niall—, solo esta vez. Y no es robar si recuperas lo que le pertenece a alguien que conozcas.

《Pequeño Ladrón》M-Preg [L.S]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora