Capitulo 5

10.5K 1.1K 104
                                    

Luego de terminar su comida, Harry se da cuenta de las miradas curiosas que los Cullen le daban a Hedwig y Kaa.
—Son mis mascotas, a kaa la he adoptado recientemente y hedwig está conmigo desde hace un año, son mis mejores amigos—.

Alice, Emmet y Rosalie entendieron y los aceptaron en silencio sin soltar ningún comentario.

Cuando Harry se sintió mejor trató de ponerse de pie sin éxito, se sentía con mucha debilidad en las piernas, así que volvió a sentarse en la cama con ayuda de Rosalie.
—Deberías descansar por el momento, no importa cuánto tiempo necesites para recuperarte, nosotros esperaremos hasta que te sientas mejor—.

Eran buenas personas, Harry podía sentirlo, así que, ¿en qué pensaban llevándolo a America?, ¿acaso trataban de secuestrarlo para vender sus organos?.

Ahora se daba cuenta de que tal vez había sido demasiado descuidado y había confiado demasiado a la ligera.

—¿Qué pasa, Harry? — Preguntó Rosalie al verlo demasiado pensativo.

Harry la miró sintiéndose en obligación de decirle la verdad.
—¿Por qué quieren llevarme con ustedes?, no soy especial, ni siquiera soy lindo —.

Rosalie sintió un vacío dentro de ella, en su opinió ningún niño debería sentirse menos, eran ángeles para ella, todos los niños del mundo eran ángeles que deberían ser bien cuidados.
—Harry, sé que la propuesta suena demasiado irreal y no sé cómo demostrarte nuestras buenas intenciones, pero uedes pedirnos lo que sea para convencerte y te prometo que lo haremos realidad—.

Harry la observó todavía sin creerse algo tan bonito como ser parte de una familia.
—Yo quisiera hablar primero con alguien, antes de tomar una desición—.

Rosalie asintió —¿Quieres que te acompañe a una cabina telefónica? —.

Harry negó y aprovechando que su baul estaba a su lado, sacó de él un pedazo de pergamin y su pluma, luego empezó a escribir.

Alice y Emmet sentían que debían darle su espacio, así que se dispusieron a salir del cuarto.
Emmet iba a jalar a Rosalie, pero ella se soltó y decidió quedarse y ver a Harry, él no estaba seguro de eso, pero la dejó.

Rosalie se sentó al lado de Harry y en vez de ver lo que estaba escribiendo se fijó en la linda caligrafía que tenía.

—Sabes, tu caligrafía es mejor que la mía, te envidio—.Dijo ella.

Harry sonrió y le mostró el pergamino.
—¿Quieres leer?—.

Ella lo miró.— ¿Para ti está bien que lo lea?—.

Harry asintió y Rosalie tomó el pergamino en sus manos y empezó a leer.

"Querido profesor Dumbledore.
Como habrá notado, no estoy en casa de mis tíos, este verano ha sido algo extraño, triste y emocionante.

He encontrado una mascota fiel a mi y que me cuida demasiado, es una serpiente a la que llamé kaa, Hedwig y ella se llevan muy bien.

Pero lo que en verdad quería confesarle es que no puedo seguir en casa de mis tíos, les agradezco a ellos todos estos años en los que me han dado techo, pero no puedo seguir con ellos.

Me ha encontrado una pareja y su hermana, Rosalie es una chica muy bonita, su cabello es rubio ondulado, sus ojos son grandes y redondos, su piel es blanca como la nieve al igual que la de su esposo y hermana, su esposo Emmet es gracioso, cuando empecé a tratar con él, trataba de hacerme reír siempre, es un buen hombre, y Alice es una chica muy bonita también, ella tiene el cabello como el mío, es indomable y tengo e presentimiento de que ellos me quieren en el poco tiempo que los conozco.

Tengo el presentimiento de que ellos me quieren a mi "Harry Potter" para pertenecer a su familia y quiero obedecer a lo que creo, quiero creer en ello.

La familia Cullen quieren acogerme con ellos, y yo quiero ir con ellos, sin embargo quiero seguir asistiendo a hogwarts.

Con cariño, Harry James Potter "

Si Rosalie hubiese podido llorar, lo habría hecho.
Es verdad, apenas llevaban demasiado poco tiempo conociendo a Harry, pero desde lo más profundo de lo que Rosalie era capaz de sentir, ella sentía que ese chico la necesitaba, ella quería hacerse cargo de él, no era algo que había hablado con Emmet, pero sabíaque él también estaba encariñandose con Harry.

—Son muy bonitas palabras, ¿Cómo vas a enviar la carta?— preguntó devolviendo la carta a Harry.

Él envolvió la carta en un listón y Hedwig se acercó a Harry y sostuvo la carta en su pico, luego ella salió volando atravesando la ventana.

Rosalie se quedó pasmada.
—No sabía que todavía se usaba ese medio para enviar cartas—.

Harry sonrió.— Hedwig es muy inteligente, seguro que la carta le llega al profesor Dumbledore—.

Ahora Rosalie tenía curiosidad por otra cosa.
—¿Quién es el profesor Dumbledore?—.

Harry la miró.—El profesor Dumbledore es el director de la escuela a la que voy, él conoció a mis padres cuando ellos estudiaban en su colegio, creo que por eso me tiene algo de cariño, desde que entré en su colegio ha sido bueno conmigo—.

Rosalie asintió pensando que tal vez ese tal Dumbledore no se había esforzado lo suficiente en proteger a Harry.

...
31 de Julio

Albus Dumbledore siempre se tomaba la hora del desayuno como la hora de revisar su correspondencia, faltaba solo un mes para la llegada de los nuevos estudiantes y debía tener todo preparado para la bienvenida de los nuevos.

Se encontraba desayunando con Severus y Mcgonagal cuando una conocida lechuza blanca voló por el gran comedor hasta el.
Hedwig dejó la carta sobre la mesa en frente de el y esperó a recibir su premio.

Albus le dio algo de comer y la lechuza voló alejandose satisfecha.
revisó la carta y casi de cae de espaldas cuando leyó el contenido.

¿Quienes?, ¿en dónde?, jamás había escuchado el apellido Cullen.
—¿Qué pasa Albus?— Preguntó Severus al ver el comportamiento extraño del director.

Albus le muestra la carta y los profesores que estaban a su alrededor también se acercaron a ver el contenido.

la peor reacción fue de Mcgonagall que fue sostenida por la profesora sprout, la mejor reacción fue de severus que en todo momento trató de parecer indiferente, pero por dentro hacía mil planes para recuperar a Potter de quien sea que se lo haya llevado.

Albus tomó la compostura. —No entremos en pánico y que quede claro que nadie se debe enterar de esto, no puedo imaginar lo que puede pasar si algún mortifago con Sed de venganza se entere de esto—.

Todos asintieron, pero Mcgonagall se acercó preocupada. —¿Entonces qué haremos?—.

Albus terminó su té y se levantó de su silla.
—Investigaré, no conozco el apellido Cullen, pero sé que podré encontrar algo de información por ahí—.
Y sin más, el director usó aparición para salir de Hogwarts.

Pero Severus no podía quedarse con la espina, así que también se fue de Hogwarts para investigar por su lado.

...

Rosalie se aseguró de que Harry se aseara bien, además de que había salido temprano para comprarle ropa nueva y con algo de estilo.
Lo que siempre se imaginó de tener un niño a su cuidado era la ropa y cómo lo vestiría.

Así que llenó a Harry de ropa nueva cuando volvió al hotel.
—Pero es demasiado— Dijo él.

Rosalie negó.—Nada es demasiado para ti, te verás increíble, ve a ducharte que pronto debemos irnos de Londres—.

En la noche anterior habían hablado con Jasper en busca de ayuda para el pasaporte de Harry.
Él había hecho de las suyas y consiguió un pasaporte e identificación falsas para Harry, eso lo resolvía todo.

Rosalie junto a Aice y Emmet esperaron en la sala a que Harry terminara de asearse y vestirse, y justo en ese momento la lechuza de Harry volvió a ellos como si nada.

Kaa se deslizó hasta quedar enrrollada alrededor de hedwig.

Luego de unos minutos Harry terminó de vestirse y fue a la sala para partir con Rosalie y los demás.

Ella quedó encantada con lo bien que le quedaba la ropa a Harry, en su opinión se veía guapo.
—Bien, debemos irnos, sino el avión nos va a dejar—.

Hedwig con Kaa en su cuerpo, se posó sobre el hombro de Alice, para ella fue algo extraño, pero en cuestión de segundos se acostumbró a ello.

Emmet cargó con las maletas y todos tomaron un taxi hacía el aereopuerto...

SiempreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora