-No sé, pero creo que deberíamos ir a revisar, ¿y si es alguien que conocemos? -.
Draco asintió y junto a Jake salieron de la casa por el jardín trasero para ir a revisar la entrada al bosque.
No encontraron a nadie ni nada que estuviera en el lugar.
-Harry, creo que tal vez es cansancio colectivo, volvamos a la casa a dormir.
Harry asintió, pero antes de que dieran vuelta, escucharon cómo unas pisadas rompían una rama y luego silencio.
-Solo los humanos son tan idiotas como para detenerse luego de hacer ruido -Dijo Jacob y los 3 fueron hacía donde se había producido el sonido, pero no vieron nada.
-¿Qué buscan?
Saltaron del susto al escuchar la voz detrás, al voltear vieron a Jasper.
Harry lo miró frunciendo el ceño -Maldición, ¿quieres matarnos?
El vampiro rió, pero luego una luz verde iluminó el cielo y su sonrisa se borró. los otros 3 imitaron la acción.
Draco reconoció la figura que se dibujó en el cielo, era Morsmordre, no la había visto antes, pero si escuchaba las historias de su padre de cómo Voldemort reunía a sus mortifagos.
-Harry, debemos entrar -Tomó el brazo de su amigo, aunque temblaba en el acto.
Harry lo miró con preocupación, pero asintió y los 4 entraron a la casa. Draco estaba casi hiperventilando, ¿Cómo?, ¿por qué?.
Jacob lo abrazó con fuerza para que se calmara al sentir su ritmo de respiración -Respira conmigo.
unos segundos luego Draco se calmó -Debemos llamar a mi padrino o avisar a la oficina de aurores de Seattle.
-¿Por qué? -Preguntó Harry
-¿Acaso no lo sabes?, esa cosa en el cielo, es su marca...alguien conjuró su marca aquí en Forks.
Harry sabía de quién hablaba Draco y asintió, subió a su habitación para enviar dos cartas, una a Severus y otra a la oficina de aurores, quienes llegaron 15 minutos luego de recibir la carta.
Los Cullen empezaron a rodear la casa por si había alguna amenaza cerca, preferían tomar las precausiones necesarias luego de escuchar por parte de Harry y Draco lo que vieron por la ventana.
Sirius y Remus llegaron al mismo tiempo que Severus y los 3 empezaron a peinar la zona junto a algunos aurores, pero no había nadie en la zona, incluso los aurores dudaron de Harry y Draco, pero Severus salió en defensa.
-¿Acaso está loco?, son solo niños.
-Entonces no encuentro otra explicación - Dijo un auror ya exasperado.
Harry lo enfrentó -Ya se lo dijimos, vimos un lumos y cuando fuimos a investigar ya no había nadie, simplemente no llegamos lo suficientemente rápido para atraparlo.
Una nueva voz se hizo presente -Deberían llamar a los expertos si de sanguijuelas se trata -
Los ojos de los aurores empezaron a brillar al ver a Alastor Moody -Señor, no sabíamos que vendría, pero usted ¿no estaba en su retiro ya?.
Moody bufó -Me retiraré el día que muera ahora ... -Giró hacía Harry y Draco -Cuéntenme sobre lo que vieron.
Sirius tembló, recordaba a Alastor moody, la leyenda cuando se trataba de cazar mortifagos. Permaneció al lado de Harry por si acaso, había escuchado por parte de algunos maestros que el hombre estaba loco.
Severus y Remus de igual forma estuvieron alertas.
Luego de escuchar la historia, Moody miró a los aurores con rabia -¡Idiotas, es obvio que escapó!, que neglogencia, fanfarrones, imbeciles.
Ningún auror pudo protestar y fueron echados de la casa Cullen. Alastor fue llevado al lugar donde el mago había sido visto por los jovenes y empezó a inspeccionar el área.
-Efectivamente hubo alguien aquí - Dijo mientras alzaba en su mano un pedazo de tela -Hubo una fuga de prisioneros de Azkaban hace unos días, el ministerio ha hecho la tapadera para que los periodicos no escribieran sobre esto.
