Amor, armadura y espíritu II

"Celestina clandestina"

Era una noche fría rodeada de neblina y tinieblas, Lu estaba de pie frente a la casa de Kakashi. En esta ocasión, las luces estaban apagadas pero la puerta de ésta estaba entreabierta, y por el umbral salía humo inoloro que se desvanecía una vez que tenía contacto con el exterior.

Lu decidió avanzar y al llegar, poniendo sus manos sobre la perilla, sintió un olor a rosas suave que hizo que su piel se erizara, enseguida se acordó de Kurama y de sus bellos ojos esmeralda, pero esta vez no tenían esa luz que los caracterizaba, era como si estuvieran vacíos. Ella pensó que quizá iba a aparecer por cualquier parte, así que se adentró a la casa y cerró la puerta.

De repente en la oscura sala, unas luces en forma de esferas se encendieron en el techo, no eran muchas pero la oscuridad había desaparecido. Extrañamente las luces solo indicaban un camino y ese era justamente hacia la habitación única que existía, así que con paso lento se dirigió a ella.

Al llegar a la puerta la cual también estaba semi abierta, pudo percatarse de que en ella sí había luz pero era similar a la de un estudio de revelado de fotografías. No tuvo miedo, simplemente pasó para darse cuenta que la habitación estaba vacía. En segundos sintió pasos que venían de atrás, allí sí se asustó e inmediatamente fue a cerrar la puerta.

Pronto escuchó unos sutiles gemidos que provenían del baño, más un grifo de agua abierto. Ella sin dudar se acercó y pudo observar la figura de dos personas dentro de una tina haciendo el amor con ternura y delicadeza. De repente todo se quedó en silencio, solo se escuchaba su respiración y los latidos de su corazón que estaban a la espera de un suceso el cual llegó de súbito, fue tomada por el cabello y lanzada hacía atrás cayendo en la puerta sentada en el piso; la puerta del baño fue golpeada con rabia y abierta de par en par, mientras que el aroma de rosas nuevamente impregnaba de forma abrupta el ambiente.

Lu creyó ver la sombra de Kurama reflejada en el piso del baño; ella intentó pararse y verificar si él estaba allí y, a pesar de tener un nudo en la garganta pudo entrar. Li único que había eran pétalos de rosas en la tina, acto seguido, Lu cayó nuevamente al suelo por la conmoción y a su mente llegaron una imágenes que parecían GIFs que se repetían una y otra vez: la imagen de Kurama, con los puños sumamente apretados golpeando la puerta, esta vez de la habitación de Lu en la residencia mientras ella estaba con su novio acabando de tener relaciones aquella noche del 30 de diciembre.

Después de haber tenido ese sueño, Lu Genkai no pudo dormir, se quedó despierta desde las 4am hasta las 6 momento en el cual pudo quedarse dormida, sin embargo, no fue suficiente porque solo durmió hasta las 9, se sentía agotada como si hubiese corrido una maratón por horas.

No pudo quedarse callada por mucho tiempo tampoco, sabía que tenía que hablar con alguien al respecto, estaba realmente convencida de una cosa. Fue donde Saori y le contó el sueño; estaban cuchicheando en una esquina de la sala.

Lu: estoy convencida Saori, Kurama está más cerca de mí de lo que todos creemos, no sé si fue él quien abrió de esa manera la puerta del baño ayer, pero sí estoy segura que él en el pasado llegó a escuchar cosas entre Aioria y yo, así que lo de ayer no descarto que sea posible.

Saori: ¿No crees que si él estuviera por aquí ya hubiese aparecido?

Lu: Saori, si él está merodeando por estos terrenos desde hace algún tiempo, ya debe saber que tengo una relación nueva y me odia, me odia con base y con razón; me hace sentir que está cerca para que yo me vuelva loca con mis pensamientos, solo está esperando el momento indicado para aparecer. Fíjate que ya he tenido algunas experiencias con un olor a rosa que aparece y desaparece y que solo yo puedo percibir, ¿De verdad sí me estaré volviendo loca?

Saori: Lu, ¿No has pensado en tomarte un tiempo? Quiero decir, que te quedes sola para así pensar bien las cosas. Hay muchos detalles que rodean esta situación: tu amor por Kurama, tus sentimientos hacia Kakashi también, no podrás estar con ambos y eso lo sabes, en algún momento debes decidir y uno de los dos sufrirá, la situación es precaria, se está complicando a medida que pasa el tiempo. Por eso creo que lo mejor es pensar en la distancia, ya se te ve más tranquila, más ligera, con la cabeza fría, ¿No crees?