Amor, armadura y espíritu II

"Cicatrices"

Allí estaba él, parado frente a la puerta de la residencia, estaba muy angustiado. Esperar era imposible, fue a parar en ese lugar a pesar de que se lo habían prohibido, casi suplicado. Quien lo recibió fue Aioria, que al verlo suspiró resignado por el exceso de terquedad de Kakashi; sin embargo, sabía exactamente cómo se estaba sintiendo.

Aioria: pasa.

Con paso desesperado y frotándose las manos entró.

Aioria: ¿Te sirvo té? Aquí ya estamos ebrios, si se pudiera, de té.

Kakashi ni siquiera contestó, de inmediato preguntó por quién había ido a la residencia.

Kakashi: ¿Lu no ha llegado? ¿No saben nada de ella?

Aioria: no sabemos nada, se fueron hace una hora, cada minuto ha sido inquietante.

Kakashi: sé que no les compete, pero hubiesen ido con ellos, o al menos quedarse cerca.

Mientras el caballero le servía el té, le decía...

Aioria: es un asunto entre ellos, además, de haber ido, Kurama hubiese podido notarlo y ponerse más a la defensiva, de por sí es una bomba a punto de reventar.

Kakashi: ¿Crees que le haga daño? Viste su enfrentamiento en el torneo, casi la mata. Su odio es grande, me siento culpable por eso.

Aioria, entregándole el té, le respondió con pesar.

Aioria: como te lo había dicho, te tocó la peor parte a pesar de que de cierta forma eras inocente, no sabías nada.

Kakashi: pero al enterarme persistí, sabiendo que ella lo amaba no quise echarme para atrás, dejé que mis sentimientos llegaran demasiado lejos, peor, darme cuenta de las consecuencias y no hacer nada.

Aioria: en todo esto hubo falta de fuerza de voluntad en ambos. Y oye, no creo que le haga daño físicamente.

Kakashi: no lo puedes asegurar.

Aioria: quizá, pero tengo el consuelo de que está con sus amigos, ellos no permitirán que le haga algún mal. Por cierto... Tuvo razón Lu Genkai al decir que eres terco.

Kakashi: sí, sé que le prometí que no vendría, pero no me contuve, me preocupa que ella esté sola con él... oye, ¿Puedo pedirte un favor?

Aioria volvió a suspirar.

Aioria: dime.

Kakashi: tengo una reunión con los jounin ahora, así que me iré. Por favor, cuando puedas déjame saber lo que haya sucedido en ese encuentro, no importa la hora que sea, y otra cosa, por nada del mundo le digas que vine, le dije que no vendría de inmediato y acá estoy.

Aioria: está bien. Gracias por preocuparte por ella a pesar de todo.

Kakashi: cuídala por mí.

Aioria: con mi vida.

Kakashi: gracias por el te.

Le devolvió la taza. El caballero lo acompañó hasta la puerta y el shinobi abandonó la residencia. Al estar de nuevo adentro, Aioria se dejó caer en el sofá. Resopló.

Aioria: ¡Cuánto le importa!... Y a ti Kurama, ¿Te seguirá importando Lu Genkai?... ¿Cómo estarás tú mi niña hermosa?

❤️❤️❤️

Lu se sentía como la peor de los criminales, estaba conciente que el rencor que él le guardaba era justificado. Estaba dispuesta a ofrecerle su mejilla con tal de aplacar su ira, aunque en el fondo sabría que eso no bastaba. Estar allí era algo inverosímil, mucho más por las circunstancias, lo tenía tan cerca, pero a la vez tan lejos, como la estrella más lejana de la galaxia, eso le dolía profundamente.