Valerie Sand, una chica que nunca tenía las agallas suficientes para convertirse en quien realmente quería ser.
Zyan Price, un apasionado guitarrista que siempre que comenzaba a escribir una canción, no era capaz de terminarla.
Y una pregunta, tan...
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VALERIE SAND
Me encontraba detrás de la barra junto a Daryl y Say mientras Midnight Moments daba su show. La increíble canción que habían elegido apenas terminaba cuando noté que había perdido por completo de vista a mis padres y a Ava y Cooper. Hacía tan solo unos instantes se encontraban junto a mí.
En fin, mientras Daryl trabajaba como el excelente barman que era, Say y yo nos sacábamos fotos para subir a su Instagram. Papá me había dado la noche libre, así que podía disfrutar de la locura en que se había convertido el bar sin problema alguno. Si no supiera dónde estaba, pensaría que esto era una pequeña discoteca. Había demasiadas personas esta noche. Tantas, que incluso era difícil pasar entre ellas sin chocar con alguien.
Era turno de Dark Storm pero nos sorprendimos todos los presentes cuando todas las luces se apagaron de repente. Escuché algunos abucheos.
¿Se había cortado la luz? ¿De verdad?
No era el momento más oportuno para que ocurriera.
—¿Qué está pasando? —preguntó Daryl cerca de mi oído, para que pudiera oírlo.
Estaba a punto de responder que no lo sabía, cuando uno de nuestros pequeños reflectores iluminó el escenario. La luz era de color azul. Cuatro personas se encontraban allí mismo. Quedé boquiabierta al ver de quienes se trataba.
—¡Buenas noches! —exclamó Wyatt con euforia pura—. Tal vez algunos no nos conozcan, pero yo me encargaré de presentarnos. Nuestro nombre solía ser Shadowy Poets, y esta noche volverá a serlo.
Abrí la boca de tal forma en que mi quijada llegaría al suelo en cualquier momento, completamente sorprendida ante lo que estaba viendo. Zyan apareció segundos después, colocándose a mi lado.
—¡No puedo creerlo! —exclamó cerca de mí.
—¡Yo menos! —le contesté, al mismo tiempo en que una guitarra comenzaba a oírse.
Wyatt empezó a tocar la melodía de una de mis canciones preferidas de Shadowy Poets, Crazy Summer Night. Contaba la historia de un chico bastante solitario que, una noche, de vacaciones en Italia, decidió meterse en una discoteca que no conocía en lo absoluto para ser una persona que no era a menudo. Por una noche, quería divertirse y ser ese chico extrovertido de su imaginación. Habla de la cantidad de sensaciones que lo invadían durante toda la noche y la libertad que lo envolvía. Me encantaba esta canción.
Ava tocaba la batería, mi madre era la vocalista, mi padre sostenía el bajo y Wyatt se encargaba de la guitarra eléctrica.
El rock llenó el bar en segundos. La música que estaban tocando transmitía una adrenalina increíble. Todos comenzaron a saltar y vitorear a la banda de mis padres sin importar que no los conocieran.
