🎸 Capítulo 23 🎸

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ZYAN PRICE

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ZYAN PRICE

—Hoy un fan casi se percata de que soy yo. No me hubiera molestado sacarme una foto con él ni nada pero estoy en Nueva York de incógnito y es un milagro que nadie se haya dado cuenta aún —contaba Maverick—. Aunque no sé cuánto durará.

Yo le prestaba atención a medias. Escuchaba algunas partes de lo que decía pero en las partes que sobraban, pensaba en demasiadas cosas y todas eran relacionadas con… Valerie.

Suspiré, tal vez debía hablarlo con alguien.

¿El qué, exactamente? Pues, era complicado.

Me había descubierto a mí mismo actuando extraño cada vez que estaba con ella y luego recreando esos momentos en mi mente una y otra vez sin parar.

—Oye, quiero hablar de algo contigo —dije, bebiendo cerveza de mi lata como si eso fuera a aclarar mis ideas.

—Suéltalo —contestó Maverick, bebiendo también.

Estábamos en mi habitación, a semioscuras, oyendo música algo baja y tomando cerveza mientras hablábamos de la vida. Creía que era el mejor momento para hablar de algo que no dejaba de rondar por mi cabeza. Además, hoy en la noche, era el concierto de Metallica. Aquel al que iría con Valerie. Sería bueno hablar de ello antes de verla otra vez.

—Desde hace unos días que me siento algo… —me quedé callado por unos segundos, buscando la palabra perfecta para describir cómo me sentía—. Confundido.

Quizá esa funcionaba, de momento.

—¿Con respecto a qué?

Miré hacia otro lado.

—Valerie —dije en voz baja.

Supe que él estaba sonriendo, no tenía un motivo pero lo sabía a la perfección sin la necesidad de mirarlo.

—¿Disculpa? No te he oído bien.

—No me hagas decirlo de nuevo —me quejé, volviendo a posar mi vista sobre mi amigo.

Mav se encogió de hombros.

—No escuché bien, tendrás que ser un poco más claro.

—Valerie, he estado sintiéndome confundido con respecto a Valerie —dije. Ya sabía que él había escuchado perfectamente pero quizá el motivo por el cual lo repetía era para que yo mismo fuera capaz de entenderlo.

—¿Ha pasado algo? Soy todo oídos.

—No lo sé, es raro. No podría decirte el momento exacto en que comencé a sentirme de esa manera porque apenas me estoy percatando de ello —expliqué.

—¿Qué sientes?

Mi vista se nubló y solo pude centrarme en revivir aquellos momentos en mi mente. Me había teletransportado a la tienda de música, para empezar.

Nuestro concepto de amor ✔ | Destinos Escritos 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora