Señas (SonaxDraven)

Nuestros destinos, parte 1

Capítulo 40

El sonido de las hojas de zinc crujiendo ante el inclemente sol no haría más que enfadar y hacer berrear a los asistentes, eso es lo que pensaba Sona mientras miraba hacia arriba dentro de la estancia improvisada para el personal administrativo durante la construcción.

-una carpa normal, eso fue lo que pidió mi jefa ¿porque estamos debajo de un zinc en 40 grados? ¡Explícalo!- el muchacho se contorsionaba tratando de explicar a la secretaria algo que no tenía ningún tipo de coherencia más allá de la propia negligencia ocultaba su vista no tanto de la secretaria que le zarandeaba con ánimo de estampar la pesada carpeta de metal contra su rostro si no quien estaba tras ella, mirando la pobre estructura, La verdadera jefa en ese lugar.

-¡lo lamento mucho, lo lamento mucho! Intentábamos atenuar los gastos de sobre costo para producción fue sugerido por el equipo de planeación ya que será retirado antes del concierto...

-fue un comentario ocioso, no fue una sugerencia- la joven a cargo de la producción salto de inmediato a defender a su equipo, pero aunque se tirara el agua al uno o sujetarán de las piernas al otro, era culpa de quien tomó la decisión y la llevó a cabo, la mirada de la jefa aterrizó en el ayudante tembloroso.

-¿Eres consciente de que antes del concierto personas sumamente importantes van a tener que sentarse aquí mientras hacen pruebas de sonido? No sólo es caliente, es de mal gusto, ¿esperas que KDA se sienten aquí? ¿Quieres que dejen de firmar con nosotros por ti? Contesta, vas a tener que pagar los daños con tu sueldo- el rostro del trabajador se tornó azul y finalmente la mujer alta de brillante cabello azul fantasía dio un suspiro. Todo hicieron silencio, el sonido de la planta eléctrica instalada debajo del escenario al aire libre en medio del desierto era lo único que conectaba a todos con la realidad.

Era increíble tener a Sona Buvelle cerca, para cualquiera de ellos, una mujer que entró joven a la industria, arrasó con lo suyo y construyó palmo a palmo su firma discográfica, la planeación de los eventos de sus chicos era un extra para asegurar la calidad pero sabía cómo tomárselo enserió, allí estaba la prueba, tal vez nunca volvería a los escenarios pero era un nombre que todos allí afuera respetaban y representaba el talento.

Sus gestos eran ley en el campo de trabajo y el añadido es que su firma estaba impresa en el cheque de su pago.

"Es suficiente, esto ha sido mi error por no supervisar mejor esto, no debí pretender que todos lo harían bien si mi encima suyo" todos bajaron la mirada incluso los que no podían entender lenguaje de señas lo hicieron, su asistente seguía mirando con desprecio al trabajador que creyó que un pequeño error como este no desmantelaría su vida, de hecho, en una situación normal solo sería un regaño, se cambiaba el error y ya está, pero la persona que dirige toda esa empresa vino en persona a supervisar, cualquiera preferiría estar muerto.

"Arreglen este lugar y sáquenlo de aquí, esto es un ejemplo, si quieren aportar a la reducción de costos primero asegúrense de que la calidad no baje" los altos tacones volvieron a tomar su ritmo mientras su cabello kilométrico ondeaba de forma hermosa, todos admiraban lo elegante y preciosa que era, como los años no eran capaces de arrebatarle nada pero en su situación de poder la mayoría no podía más que sentir pavor y respeto a su figura.

La asistente se hizo cargo y empezaron a desmontar el techo improvisada, y por supuesto, firmar el final de la carrera en esa industria para el ayudante que creyó ser más listo.

Sona volvió a la camioneta con aire acondicionado, las excentricidades de su cliente les habían llevado a armar una tribuna completa en medio del desierto para un concierto. En un inicio se negó pero la sensación k-pop del momento KDA estaban entusiasmadas con la idea de presentarse en el escenario extravagante donde también Yasuo, DJ y productor, sobre todo creador y líder de True Damage haría un concierto en solitario de EDM después de todos esos años.