PIDEME LO QUE QUIERAS (KOOKMIN💘💦🍑)

😊CAPÍTULO 11😵

A la mañana siguiente, tras una intensa noche con sus amigos en un lugar de ambiente. Jungkook se levantó motivado, y le envío un mensaje a Jimin.

🐰Recuerda; a la una pasó a buscarte.

Inmediatamente su teléfono sonó con una notificación, leyó el mensaje.

🐥 No pienso salir.

¡Pero que obstinado es! Pensó. A él nadie lo dejaba plantado

🐰Pequeño. No me hagas enfadar.

El solo imaginar la expresión de Jimin enojada al leerlo, lo irritó

🐰Por tu bien, te espero a la una.

Envío el mensaje, y dejo su teléfono sobre la mesa para ducharse, éste volvió a sonar con otra notificación.

🐥Por su bien, señor Jeon, no venga. No estoy de humor.

Ah, no..., eso sí que no lo iba a permitir.

🐰Joven Park Jimin, ¿quiere hacerme enojar?

Esta vez no soltó su teléfono. Ese rubio era  demasiado obstinado y conteston. Y no tardó en llegar la respuesta

🐥 ¡Olvídese de mí!

Como diría su madre ¡la madre que lo pario! Había captado por completo su atención, y enseguida respondió el mensaje.

🐰Tienes dos opciones. La primera, enseñarme Corea y disfrutar del día conmigo. Y la segunda, hacerme enojar, y soy tu JEFE. Tú decides.

Cuando envío el mensaje se dio cuenta que se había pasado un poco, Pero solo...un poco... abusando de su autoridad. Pero nunca le había tocado llegar a esos términos. siempre que se enredaba con alguien, simplemente lo buscaban nuevamente sin tener que hacer ningún esfuerzo. Pero Jimin no le siguia el juego y eso lo irritaba un poco.

Jimin tenía la magia de tenerlo pegado al teléfono, espero por largo rato que contestara su mensaje. Pero al ver que lo dejo en visto. Volvió a insistir.

🐰Responde.

🐰No me dejes en visto

🐰 Jimin...

Y finalmente recibió su respuesta.

🐥A la una estaré listo.

Una sonrisa apareció en su rostro, eso era lo que buscaba. Ahora que se habia salido con la suya, se metió tranquilo a  ducharse.

🐥🐰

Las horas pasaron lentas y Jungkook no dejaba de mirar su reloj. Opto por ponerse una camisa blanca, pantalón de mezclilla negro y botas. Sería un día informal. Se sentía ansioso, quería que las horas corrieran y llegara la una.

A la una menos cuarto estuvo frente al edificio de Jimin. A la una en punto se acercó y toco el citofono. Espero y espero pero el rubio no respondío, como la paciencia no era una de sus virtudes, comienzo a maldecir desconfiado

Si Jimin se le ocurría dejarlo plantado, se encargaría de hacerle la vida imposible en el trabajo. Volvió a llamar otra vez, Su impaciencia ya iba en aumento cuando oyó decir.