Capítulo 30

19 4 0
                                    

Pasamos la noche abrazados y escuchando música. Suenan las voces de cantantes como Selena Gómez, Ariana Grande, Taylor Swift o Lady Gaga. Me quedo dormida entre sus brazos. Las horas pasan muy rápido. Me remuevo entre las sábanas y me giro para el lado de la ventana. Me despierto poco a poco y sin hacer mucho ruido para no despertar a Odei.
Miro mi móvil y son las ocho y media de la mañana. Voy al baño y me lavo la cara. Además, me cambio y me pongo una sudadera amarilla y unas mallas negras.
Cuando vuelvo, me siento en la silla que hay junto a la cama y espero a Angelika.
Aparece media hora más tarde vestida con unos pantalones vaqueros y una camiseta de manga larga azul. ¡Está guapísima!
-¿Odei sigue durmiendo?- pregunta estupefacta.
-Plácidamente- contesto.
Ella me mira de forma cariñosa y me coge las manos.
-Melisa, gracias de corazón. Me alegro de que hayas aparecido en la vida de mi hermano. No olvides lo que te dije ayer por favor. Odei se va a enfocar en recuperarse para trabajar cuanto antes. No permitas que eso te perjudique. Si ves que te aparta, haz lo mismo, déjale espacio y luego volvéis a empezar. Prométemelo- dice angustiada.
No entiendo por qué insiste tanto...
-Te lo prometo- murmuro.
Me estrecha entre sus brazos y le digo:
-¿Sabes que Odei me está dejando ropa tuya cuando voy a su casa?
-¿En serio? No sabía que mi hermano era tan encantador... Coge todo lo que quieras. La ropa que tengo allí solo la uso cuando voy.
-Te la devolveré. ¿Puedes hacerme un favor?
-Claro.
-Dale esto a Odei cuando despierte- digo entregándole una cajita. Es el detalle que le compré en el centro comercial y que aún no le he dado.
-Lo haré.
-Debo irme si no llegaré tarde y no quiero perder el vuelo.
-Ya nos veremos en Alemania.
-¿Te vas con Odei?- pregunto.
-Pasaré unos días con él pero luego tengo que regresar a la universidad.
-Nos veremos pronto.
Me acerco a Odei y le doy un beso en la comisura de los labios. Él no se inmuta porque sigue durmiendo. Acaricio su pelo y aspiro su aroma. ¡Embriagador!
Me separo de él, agarro la maleta y me marcho.
Cuando salgo de la habitación siento que dejo una parte de mí con Odei. Pero me reconforta saber que volveré a verle en dos días.

Cuando aterrizo en Alemania me encuentro agotada. ¡Maldito jet lag! Decido no ir a clase y descansar. Me preparo una infusión mientras hablo con mi madre.
-Mamá, ¿cómo está Nat?
-Se encuentra mejor. Aún seguimos en el hospital pero pronto le darán el alta. Le han puesto un tratamiento para controlar la enfermedad.
-Pobrecita. Le prometí que iría a verla pronto con Hello Kitty.
-¿Y quién va a ser Hello Kitty?
Tengo una idea en mente pero prefiero que sea un secreto.
-Ya lo verás. Es sorpresa- digo ilusionada.
-Hija te noto diferente. ¿Te ha pasado algo?
No quiero engañar a mi madre y digo:
-He conocido a un chico.
-¡Me alegro cielo! ¿Cómo se llama?
-Odei
-¿Cuántos años tiene?
-Veinticuatro
-¿En qué trabaja?
-Es agente del FBI
-¡Anda ya!
-Sí.
-¿Has conocido a su familia?
-A su hermana Angelika.
-¿Y a sus padres? ¿Cómo os conocisteis?
Si ella supiera...
-Mamaaa, deja el interrogatorio. Me estás agobiando. Ya te iré contando, ¿vale?
-Perdón hija, es que estoy muy emocionada. Espero que seáis muy felices.
-Ahh por cierto, se me olvidaba. A tu hermana le ha encantado el vestido rosa que le has mandado. Le queda genial. Gracias por el detalle- dice y cuelga sin darme tiempo a contestar.
¿Vestido rosa? Yo no le he mandado nada a mi hermana. Inmediatamente me acuerdo de Odei. No puede haber sido otra persona. El día que estuvimos en el centro comercial le enseñé un vestido rosa con volantes y le dije que le quedaría genial a mi hermana. ¡Ay qué monada!
Decido escribirle un mensaje:
-¡Hola! Gracias por el regalo de mi hermana. ¡Qué calladito te lo tenías! 🤭 Eres un mentiroso me dijiste que ibas al baño y fuiste a comprar.
A los cinco minutos contesta:
-No es nada. Te vi muy triste aquel día y creí que era buena idea que le enviases un regalo. Seguro que ella también te echa de menos.
-Pues sí y más ahora que está en el hospital. 🥺
-¿Qué le pasa?
-Pasó la varicela y ahora tiene el síndrome de Reye. 😔
-Pobrecita. Mándale un beso de mi parte.
-Vaale. Yo te mando un beso a ti. 😘
-¿Por qué no me has despertado antes de irte?
-Estabas durmiendo plácidamente. No quería molestarte. 💤
-¿Tú te crees que es normal que en cada frase uses un muñecajo?
-🤷‍♀️
-Melisaa
-¿Qué?
-Sabes que no me gustan y tú no paras de usarlos.
-Perdón es que los pongo de forma involuntaria.
-Está bien. Intenta controlarte.
-¿Que intente controlarme? Pero, ¿tú te crees que soy un perro? Por cierto, ¿quién está cuidando de Sirio?
-Nadie. Espero que esté bien.
-¿Tiene comida?
-Sí, es un perro listo y sabe dónde está el pienso. Sabe cuidarse solo.
-Menos mal 🙌
-Ya has vuelto a caer.
-¿Cómo?
-Has vuelto a usar los muñecos.
-Ahh ¿Sabes que ya he adivinado el significado de 2308? 👏
-¿Cómo?
-El otro día fui a rellenar el papel para que seas persona autorizada y me dí cuenta.
-¿O sea que era verdad lo de dar permiso?
-Sí, no fue por tu uniforme. 👮‍♂️
-Bueno... ¿de qué te distes cuenta?
-Al rellenar mis datos personales, puse mi fecha de nacimiento: 23 de agosto 2️⃣3️⃣0️⃣8️⃣
Tarda varios minutos en contestar.
-Chica lista.
-¿Qué te pensabas?🤪
-Nunca he puesto en duda tu inteligencia. Tú puedes con todo.
-💪 GUERRERA
-Ahora sí que es verdad que me superas. Apenas puedo moverme.
-Te recuperarás grandullón.
-Lo haré por ti canija. Viene la enfermera. Un beso.
-Otro para ti amor. 😍

El caso más difícil de resolver eres Tú 🖤 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora