Capítulo 68

16 3 1
                                    

Tres meses más tarde...
-Sí quiero. Sí quiero que me envíes emojis en cada mensaje. Sí quiero ver cómo tu armario crece cada vez más. Sí quiero acabar con tus miedos, con tus "yo nunca" y con tus "yo jamás"
Sí quiero abrazarte y que des esos saltitos de ilusión. Sí quiero quedarme embelasado mirando esos ojazos y flipar porque me estén mirando a mí. Sí quiero besar tu tatuaje aunque no esté hecho con mi letra. Sí quierp creer en las segundas oportunidades. Yo por ti. Sí quiero España. Sí quiero Alemania. Sí quiero Nueva York. Sí quiero pasar el resto de mi vida contigo, amor. Porque tú eres mi persona favorita, mi hogar, mi mundo, mi universo... Porque fuiste, eres y serás el caso más difícil de resolver- murmura Odei junto al altar vestido con un elegante traje de novio. ¡Ya somos marido y mujer!

Estoy super emocionada y más aún cuando mis damas de honor vestidas de rojo pronuncian su discurso. La primera en hablar es Angelika con la voz entrecortada:
-No creo en príncipes azules, no creo en hombres ideales ni en mujeres diez. Pero creo en el amor. En la confianza. En el respeto. Creo en vosotros. No puedo evitar que se me salten las lágrimas al oiros decir "Sí quiero"

Después, Agatha lee unas bonitas palabras con una gran sonrisa y ojos llorosos:
-No sería la persona que soy sin ti, Melisa. Amor eres tú y mi suerte de tenerte como amiga. Os deseo la mejor en esta nueva etapa que iniciáis de la mano.

Eda también nos da la enhorabuena pero a su estilo:
-He visto que os habéis puesto el anillo en el dedo anular de la mano izquierda y mi novio me ha explicado que va ahí porque es el único dedo donde hay una vena que conecta con el corazón. Yo pensaba que iba en el dedo anular porque anula el amor.
Todos los asistentes, incluido "el chinito" como nos referimos a su novio, se ríen al unísono. Eda es tan espontánea... ¡Está chiflada!

Víctor también pronuncia unas conmovedoras palabras para mi nov... marido.
-Odei lo estruja todo, lo rompe en mil pedazos y empieza de nuevo si no es lo que esperaba. Se entrega al trabajo hasta que consigue lo que se propone. Vive con intensidad. Por eso creo que este matrimonio durará lo que dure, como todos... pero estoy seguro de que será intenso. Pura vida. Os quiero.

Mi hermana Natalia, que ya es toda una mujercita, también me dedica unas preciosas palabras que me llegan al corazón:
-Mel, he gastado un paquete entero de folios y no he sido capaz de plasmar lo que siento. Decirte que te quiero es como un chiste así que he decidido recitar este lema: Si la quieres, déjala ser. Si la amas, déjala volar.
Cuando me dijiste que te casabas un sentimiento de pena invadió mi cuerpo. Te juro que pensé en secuestrarte... pero menos mal que cambié de idea.
Odei, no tengo palabras para agradecerte todo lo que has hecho por ella. Por respetarla, por cuidarla tan bien y por soportarla. Sé que a veces es insufrible. Te has ganado formar parte de la familia. Espero seguir disfrutando de muchos más momentos a vuestro lado. Os quiero infinitamente a los dos.

Cuando llega mi turno, improviso. No tengo nada preparado porque no he tenido tiempo. Tantos preparativos, el vestido, el menú, la tarta, los regalos... No podía más.
Agarro las manos de Odei y comienzo:
-Me hace mucha gracia la pregunta de si quiero casarme contigo. Porque como leí una vez, el amor no pregunta. El amor llega y te pregunta lo que nunca te habías atrevido a preguntar... Quiero que seamos capaces de hacer desaparecer el mundo cuando nuestros ojos se encuentren. Quiero que nos miremos como el primer día. Quiero que seas mi presente y mi futuro. Te quiero hoy, te quise ayer y te querré mañana, amor.
A tu lado quiero contemplar todos los amaneceres ámbar y ocasos violetas hasta que mi corazón deje de latir.

Las lágrimas resbalan por nuestras mejillas y nos acercamos para poder besarnos.
Aquí empieza una nueva vida repleta de ratos para disfrutar, de vivencias para recordar, de experiencias por vivir, de aventuras, de recuerdos, de palabras, de besos, de abrazos, de lágrimas, de sonrisas y... de muchos arcoíris que con sus siete colores iluminarán nuestro camino.

Pasamos una maravillosa tarde saludando a los invitados y disfrutando del banquete. El lugar que hemos escogido ha sido un bonito castillo de Salamanca donde se pueden celebrar eventos. Mis amigas se han encargado de decorar todo con rosas blancas y lucecitas tenues creando un ambiente muy cálido y acogedor.
Estoy bebiendo un sorbo de mi copa de champán cuando Emma se acerca a mí y me da un tierno abrazo.
-¡Ay, amiga! ¡Qué rápido ha pasado todo! Hace nada estábamos de fiesta en Ibiza celebrando tu despedida de soltera y mira... ya estás vestida de novia. Estás preciosa, Mel- dice tocando el velo.

Elegí el vestido con la ayuda de mi madre y mi hermana Natalia. Me decanté por un fabuloso vestido de corte en A con escotes en pico y efecto cut out con transparencias en los laterales. El diseño es de tul y tiene encaje y pedrería que acentúa mi silueta. Tiene mangas y la cola es enorme...
Me siento princesa por un día. El gran día con el que soñé desde pequeña.




El caso más difícil de resolver eres Tú 🖤 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora