~Día 143~

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"Minho" Escribió Hyunjin, al borde del pánico.

"Ayuda"

"Jisung no come desde ayer por la mañana y no puedo obligarle a comer porque sé que me mandará a la mierda"

"Se dejó el termómetro encendido en la cómoda y ponía 40,3 grados"

"AYUDA" Insistió cuando pasaron cinco minutos sin que el mayor leyera sus mensajes.

Aún después de tanto tiempo de convivencia, Hyunjin y Jisung no acababan de congeniar, pero pelear se había convertido más en una rutina que en algo que saliera directamente de dentro de ellos.

Así que, a su propia manera poco convencional, empezaban a convivir.

Y Hyunjin definitivamente no le deseaba a Jisung la muerte ni nada cerca de ello.

"Ok, ok, tranquilízate" Se dignó en responder el mayor.

"Solo intenta que coma. Si tiene tanta fiebre probablemente no piense bien y no intente matarte"

"¿¿Y cómo se supone que hago eso??"

"¿¿¿Le hago un avioncito???"

"No imbécil, eso no"

"Hm"

"Probablemente no está comiendo porque le da pereza cocinarse algo y se encuentra mal"

"Prepárale algo simple e intenta dárselo. Es un glotón, si lo huele debería comérselo"

"Pero si no se lo come llámame"

Y, tal y como le había dicho el mayor, a falta de cualquier idea mejor, pocos minutos después, Hyunjin ya estaba preparando un poco de arroz con cerdo especiado, algo a regañadientes.

Se quemó la lengua por quinta vez mientras probaba el arroz con inseguridad, y lo puso en un plato con el cerdo.

-¿Huele bien?- Le cuestionó con preocupación a Kkami.

Kkami ladró con fuerza y puso sus patas delanteras en la pierna de Hyunjin, suplicando por comida.

-No, no es para tí, es para Jisung.- Soltó una risita burlándose de sí mismo al escucharse.- ¿Quién me diría que yo, que casi ni cocino para mí mismo, acabaría cocinando para Han Jisung?

Kkami le ignoró y solo gimoteó para darle pena y conseguir comida.

-Tú ganas.- Le dio un trozo de cerdo y miró con adoración cómo se lo comía de un solo bocado.- Lindo.

Una vez en la puerta de la habitación que compartía con Jisung, Hyunjin suspiró profundamente, nervioso.

Iba a hacer el ridículo porque muy probablemente Jisung había comido algo mientras él no le miraba, Jisung protestaria, diría alguna estupidez, y él no podría contestarle porque estaba enfermo y no quería contradecirle.

Estaba seguro de eso.

Hasta que entró a la habitación.

Jisung estaba tirado de lado en la cama, completamente tapado con sus mantas, viendo un vídeo en su teléfono sin los auriculares puestos con la expresión más demacrada que jamás le había visto.

-Jisung.- Llamó tímidamente, sin saber exactamente qué esperar.

-Ah, sí sí, perdón.- Extendió su mano hacia sus auriculares con torpeza, creyendo que el volumen de su teléfono molestaba al mayor.

Hyunjin abrió los ojos como platos.

¿¿¿Han Jisung acababa de pedirle perdón???

-N-no es eso, no te los pongas, no hace falta, no es eso...- Antes de siquiera pensar en ello, Hyunjin le habló con un tono de voz calmado y amable, habiendo sido pillado por sorpresa.- Te traje esto. No te he visto comer nada desde ayer en el desayuno.- Dejó la comida encima de la cómoda que estaba entre sus camas, y ambos compartían.

Jisung se dio la vuelta y le miró a los ojos con infinita confusión en su mirada.

Hyunjin miró a su alrededor buscando una vía de escape, sabiendo que Jisung no iba a agradecerle y que su conversación acababa ahí.

-¡Voy a traerte más agua!- Anunció mientras agarraba el vaso del menor y volvía a paso rápido a la cocina.

Y, a pesar de que se había tomado su medicación hacía poco y le había bajado la fiebre, Jisung siguió mirando el plato fijamente durante unos segundos más, en completa confusión.

Tentado por el olor y el aspecto del plato, agarró sus palillos y probó un trozo de cerdo.

No pudo evitar mostrar una pequeña sonrisa.

-Incluso se esforzó...- Dijo en voz baja.

Querido diario: Odio a Han Jisung [HyunSung]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora