En la semana que le quedo en Blackcrown no tuvo mucha acción, la dieron de alta en la mañana del sexto día, dejándole un día y medio para "poner en orden sus cosas", esa no fue una buena frase, pensaba. Había un pero en todo esto, Kimon la tenía que acompañar a todos lados y siendo sincera ya no lo aguantaba más, hablaba demasiado, pero al menos pudo ver cómo era, era un muchacho de unos veintitantos, demasiado flaco, pero atlético, era claramente más alto que ella, media al menos metro ochenta, tenía la piel de un gris liliáceo y el pelo rapado a los lados, con una especie de tupe encima, lo que más le llamo la atención fue que estaba lleno de aros, era raro en definitiva, pero claramente estaba muy por encima de su autoridad y poderes, podía notarlo.
- Sabes, una vez - estaban caminando hacia la torre de creaciones para buscar lo que sería su ropa de abrigo y, como de costumbre, Kimon no paraba de hablar - una vez, no recuerdo donde, vi un jabalí ENORME y se me ocurrió montarlo - no sería lo más raro que le había contado - y entonces un lagarto, enorme también, se lo comió, y me puse triste, y maté al lagarto, si... pero bueno, ahora tengo estas hermosas botas y otros treinta y siete pares - Derily lo miró extrañada - si... es que era muy grande enserio - dejó de escucharlo y se puso a mirar hacia adelante.
Su torre se erigía como una mole de color negro en contraste con el cielo azul, tenía un aspecto imponente, cuando ella había llegado a ese lugar le había dado miedo, todo lo que había entorno a ese edificio, después de tantos años se había acostumbrado, pero aun daba gracias de no tener que vivir más en él.
Ya habían dejado atrás el torreón oscuro y estaban terminado de cruzar el puente que lleva a la torre de creaciones, cuando una chica muy malhumorada la chocó y casi la tiró y ni siquiera se disculpó, eso la molesto mucho.
- Bueno - su acompañante se revolvió incomodo - ahí va una de tus futuras compañeras de castigo - ella miró hacia atrás y suspiró, ese sería un muy largo invierno.
Dentro de la torre de color rojizo el ambiente era diferente a todo lo que había visto en la suya, había tuberías de cobre que se extendían por las paredes y el suelo, Kimon le explicó que eran las mismas que calentaban el suelo de la ciudad y todas las construcciones con vapor. Había personas moviéndose permanentemente con gafas extrañas y cosas aún más raras en las manos, todos parecían llevar un martillo en la cintura. Era demasiada energía toda junta.
- Ven - le indicó - por aquí están los creadores de armaduras, son mis favoritos.
Todo iba bien hasta que se acercaron a una plataforma de elevación. Derily se echó para atrás enseguida.
- ¿Podemos usar las escaleras? - le pregunto a Kimon.
- Aquí no hay escaleras nigromante - contestó alguien antes de que su acompañante pudiese responder - las quitaron hace al menos unos cincuenta años - ella se giró para ver quien hablo, era una chica de unos veinte años, con la piel gris ceniza y el pelo rapado, llevaba una gafas gruesas en la cabeza - así que si quieres usarlas te recomiendo que viajes al pasado - pasó por su lado, dejó una gran caja en el suelo de la plataforma y suspiró mientras se secaba el sudor de la frente con el brazo - eso estaba pesado - se quedó mirándolos a ambos - bueno, ¿suben o no?
Haciendo uso de toda la fuerza de voluntad que tenía subió en la plataforma metálica, la creadora bajó una palanca, desde abajo de la plataforma salió vapor, esta chirrió y empezó a subir despacio, curiosamente iban al mismo piso, pero esa cosa se movía demasiado lento y ella estaba a punto de perder la compostura y abrazar a alguien.
- Tú eres la del metal en el brazo ¿no? - eso la tomó por sorpresa y supuso que por su cara confirmó su sospecha - lo sabía, eres una leyenda aquí, muchos de nosotros querría experimentar con magia también, pero no la tenemos - hablaba bastante, se llevaría bien con Kimon - ¿puedo ver? - si no hay otra opción, pensó y se levantó la manga de la camisa dejando a la vista su brazo derecho - curioso - lo observaba con mucha atención - ¿y eso que hace? - señalo la roca.
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Blackcrown - Sangre y Sombras
FantasiaSu curiosidad la ha llevado al limite, ahora debe partir hacia su castigo, se enfrentara a desafíos que pondrían de rodillas a cualquiera y terminara destapando algo peor de lo que se podría imaginar. ¿tienes la fuerza para conocerla? ¿tendrá ella l...