One Shot Volkacio.

✾ Regaño 2 ✾

Eran casi las 5 de la mañana, Horacio se encontraba preocupado porque su pareja no volvía a casa. Su rango en el FIB le permitía tener control de todo 24/7 y como se encontraba tan preocupado buscó el rastreador de su novio.

Todavía estaba de servicio y parece que seguía patrullando ya que iba con unos cuantos agentes más. Frunció el ceño al ver aquello - ¿Cuatro agentes del FIB en un solo coche? - Se preguntaba a el mismo. Solo iban así cuando iban a alguna investigación, además veía que el rastreador se movía rápidamente.

La intriga fue más y cogió la radio que se encontraba en la mesita de noche - Muy buenas compañeros, ¿Alguien de servicio?

- Buenaaaaaassss Cariño, aquí el amor de tu vida de servicio - Medio gritaba Volkov por radio.

- ¿Que están haciendo? - casi le gana la risa al escuchar a su pareja decir eso.

- Trabajando jefe - Responde Nina.

- ¿Trabajado en estado etílico? - No podía creer que su novio haya permitido eso - Vengan a mí 10-20, ahora.

-10-4 amor, estamos en caminooo.

En partes le parecía gracioso el como hablaba Volkov pero por otra parte se encontraba enfadado por su irresponsabilidad.

Después de unos minutos un patrulla en mal estado se estacionó fuera de su mansión. Viktor bajó sonriente del patrulla y se acercó a Horacio - Amooooooooor - se lanzó a los brazos de Horacio - Miren compañeros, este guapote es mi novio, MIO - Decía gritando

Horacio lo abrazó y le miró a los ojos - Ve a casa, iré a dejar a los compañeros en sus casas- trataba de no reírse de los nervios que le causó su pareja al decir aquello.

- No, no quiero estar lejos de mi amor - Decía sonriendo abrazando otra vez a su novio.

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- Descansa amor - quería depositar un beso en su mejilla pero Viktor le frenó. - ¿Qué pasa? - pregunta bastante confundido al ver la reacción de su novio.

- No no, ¿Cómo que amor? - preguntaba arrastrando las palabras.

- Pero que dices - preguntó más confundido que antes.

- En ¿En donde está el amor de mi vida? ¿En donde está mi Horacio? - Soltaba las palabras.

- Pero que dices, estoy aquí- Decía sonriendo enternecido al escucharlo llamarlo así una vez más

Viktor lo miró confundido mientras se fregaba los ojos - Ay aquí estás, te extrañé mucho mi vida - dice abrazando nuevamente a su pareja - No me dejes nunca - Decía acostándose por completo en la cama.

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Un olor a café despertó todos sus sentidos, un dolor de cabeza fuerte se hizo presente una vez que se puso de pie, bajó las escaleras con cuidado ya que al no ver a su pareja a su lado decidió investigar.

En la cocina se encontraba Horacio, este llevaba un pantalón y su pecho estaba al descubierto.

Volkov se acercó a paso lento, no estaba seguro de si su pareja se encontraba molesta por los acontecimientos del día pasado, así que tanteo terreno, lentamente le abrazó por la espalda y depositó un tierno beso de "buenos días"

- Buenos días amor - Sonrió Viktor.

- Buenos días - Respondió sin más - Allí está una pastilla para tu dolor de cabeza.

Volkov lo miró curioso, quería analizar el rostro de su pareja para descifrar si se encontraba enfadada o no, pero su respuesta llegó rápidamente cuando vio a Horacio prácticamente matándolo con la mirada.

- L-lo siento amor - Dijo Viktor bajando la cabeza, parecía un niño regañado.

- Que irresponsable eres - Soltó el menor - Como se te ocurre beber de servicio - Le lanzó una mirada asesina - Y tu siempre me decías que no querías beber conmigo cuando estábamos de servicio.

- Perdón cariño - Se acercó a Horacio quien ahora se encontraba sentado en la isla de la cocina.

Caminó lentamente hasta Horacio y se posicionó en medio de sus piernas, para después rodarlo con los brazos.

-Me llegaron convencer, no fue algo planeado

- Igual, eres un irresponsable, te fuiste a patrullar ebrio.

- ¿Me perdonas? - Pedía Volkov viendo fijamente a su novio.

- No - Horacio se encontraba enfadado por la actitud de su pareja - ¿Y si te pasaba algo?

Volkov vió que los bicolores de su novio se cristalizaron al imaginar que podía perderlo - Perdón mi amor - repetía muchas veces el mayor mientras besaba en reiteradas ocasiones el rostro de su novio.

Horacio sonrió tras sentir cada cálido beso en su rostro.

- Está bien, pero no vuelvas a hacerlo o dormirás en el sofá un mes.

Volkov sonrió satisfecho al escuchar eso de su novio - No volverá a pasar amor, no quiero arriesgarme a dormir lejos del amor de mi vida- Reía mientras bajaba sus manos y las reposaba en la espalda baja de Horacio.

- De castigo no habrá nada de nada - hablaba fingiendo seriedad, mientras subía las manos de Viktor el cual al escuchar eso reprochó cuál niño pequeño.

Ambos rieron ante la actitud de Viktor y la falsa seriedad de Horacio.

Viktor se acercó lentamente a su pareja besando con tranquilidad, degustando aquel toque mientras bajaba lentamente sus manos para ponerlas en las nalgas de su novio.

Una risita por parte de Horacio se pudo escuchar -Bueno, tal vez podré hacer una excepción solo por hoy.

Fin (⁠ ⁠◜⁠‿⁠◝⁠ ⁠)⁠♡