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Narra Lydia

Violet usaba mi computadora mientras buscabamos en facebook el nombre de mi padre.

Hay tantos Noah Ferdinard, y la mayoría también eran rubios.

Pero buscabamos uno en específico.

- Bueno, todos usan anteojos en sus fotos de perfil. - se quejó violet deslizando el mouse.

- Es un caso perdido, seguramente la tonta de mi madre le pidió que me bloqueara. - suspiré llevando ambas manos a mi rostro.

- No es un caso perdido. Mira, este cumple con los rasgos de tu padre, sus ojos se parecen a los tuyos. - violet me señalo la pantalla de mi computador.
Me acerqué a ver.

Noah Rhoswen.

Imposible. Por que tendría otro apellido?

Era el, su pelo estaba ahora un poco mas platinado, sus ojos son idénticos a los míos, y en su foto de perfil salía con nerea, su perrita golden retriever. Ahora había crecido mas, es como si no hubiesen pasado dos años desde que mamá me hizo olvidarme de el.

No pude evitar sonreír al ver su foto y que no se veia del todo feliz. Como si algo le faltase.

- Mira tu rostro! Estas sonriendo! - festejo violet. - Debe ser el, lo agrego?

Estabamos en mi perfil, asi que sin problemas asentí varías veces. A los segundos la solicitud fue aceptada.

- No puedo creerlo. - dije emocionada.

- Deberías enviarle un mensaje. Hazlo, toma. - violet me entrego el computador y entre a los chats para escribirle a mi papá.

Sin problemas lo hice.

"Hola, papá, cielos, hace mucho no se nada de ti, me tomó mas de dos horas y dias conseguir tu cuenta en facebook. Supongo que tu no me haz buscado y estoy segura que fue por que mi madre te obligo a no hacerlo. ¿Cómo estás? Te extraño, han pasado tantas cosas malas en mi vida al igual que buenas. Lo único bueno es que me mude y conocí a dos increibles personas. Lo malo y de la pesadilla de mi vida, es que vivo con henry y camila, mi madre, hizo que un terapeuta viniera a revisarme y ahora creen que estoy loca."

- Creo que escribi mucho. - hable sincera a violet quien buscaba algún disco en mi mueble donde se encontraba mi grabadora.

- Si es lo justo, entonces de ello no hay problema. Enviale el mensaje. - sugirió violet. Y sin problemas lo envié.

Lo único que faltaba era esperar, cerre la computadora y la deje sobre mi cama.

Violet puso a radiohead "No surprises". Era fácil darse cuenta que entre violet y yo teníamos muchas cosas en común, como nuestra adicción a la música triste.

Sacó una cajetilla de cigarros y me ofreció uno al cual obviamente no pude decir que no. Encendió el cigarro y lo llevé a mi boca.

- Tiene años que no me sentaba a charlar con una amiga. - confesó violet, con una hermosa sonrisa dibujada.

- No tenías amigas? - pregunté curiosa.

- La mayoría de las chicas huyen de mi por que creen que soy un bichó raro, o algo por el estilo, pero me da igual. Y lo único que me reconforta es que eres la única con la que me entiendo.

Asentí entendiendo a lo que se refería.

- Si, asi me siento yo...cuando vivía en naperville, solo tenía una amiga, eramos muy unidas, pero mi vida siempre esta llena de desgracias. Un dia cuando me levanté para ir al instituto, estuve esperando que ella llegara para entrar juntas al colegio.
Pasaron diez minutos...veinte, media hora, una hora, y ella nunca apareció. Me preguntaba por que, ella siempre fue de llegar tan temprano como podía, falte a una clase, lo recuerdo bien. Y al final opte por entrar en la segunda, me senté hasta la parte de atrás, coloque mi mochila justo en la silla donde ella se sentaba esperando alguna señal de que ya llegaba. - baje la cabeza y observe mis manos, violet me escuchaba con atención. - El director entró, y nos aviso que las próximas clases se cancelarían por un suceso. Cuando me acerqué a la oficina del rector, escuche que encontraron el cuerpo de una chica colgado en su propia habitación. Lo sabía, sabía que era Darsy, pero me negué al hecho de que fuera asi. Compartíamos lo mismo, era como un pacto, que ninguna de las dos se iba a suicidar por que entre ambas nos apoyaríamos. Ella no lo resistió. Y cuando me dijeron que ella fue quien se suicido mis problemas empezaron, después el divorcio de mis padres, la orden de alejamiento y la nueva pareja de mi madre.

Violet se quedó sin articular ni una sola palabra, varías lágrimas comenzaron a caer de mi rostro.

- Lo siento mucho, no me imagino lo que debe ser estar en tu lugar. Eres muy fuerte lydia. - confesó violet.

- No diría que muy fuerte, me derrumbo cada que me siento menos o cada que mi madre me hace sentir menos.

Violet me miró con una sonrisa un tanto triste, y desvió su mirada a la parte de atrás de mi, su rostro cambió a uno de confusión y algo de molestia.

- Debo irme, olvide que tengo que hacer algunas tareas en casa. Pero vendré mañana. - violet se levantó desesperada.

- si, supongo que solo entrare a mi habitación y ahí estarás tu, o tate. - hable con ironía, violet largo una carcajada.

- Me avisas cualquier cosa, si me llamas sabes que estare aqui en segundos.

Salió de mi habitación, yo salí tras ella pero como por arte de magia ya no estaba nadie en el corredor. Confundida por su casi huida entre a mi habitación, para despues entrar al baño y darme una ducha en la bañera.

Toda la gente en esta casa esta loca, al igual que su servidora.

Evergreen - Tate Langdon (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora