Evergreen - Tate Langdon (TERMINADA)

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Narra Lydia

No les iba a dar el gusto a camila y henry de verme asistir al colegio, mucho menos al idiota del doctor harmon quien no me conocía casi nada y ya me tachaba como una psicopata.

Pero sabía que si faltaba de nuevo, me quedaría con el colegio trunco y no podría conseguir un trabajo digno, donde lo único que me amarre a eso sea el dinero, y no el amor por el que le tenga.

Para mi buena suerte no había nadie en el piso de abajo, asi que supuse que habrían salido a trabajar.
Caminé hasta la puerta y sentí como si alguien jalara todo mi cuerpo y lo pegara a la pared, me asusté y me lleve una mano al pecho.

Era tate, retiró su mano de mi boca la cual antes había tapado para que no gritara.

- Dios! Me asustaste. - dije dando respiraciones alteradas. Tate comenzó a reirse.

- No creo que eso realmente te asustará - confesó tate.

- Nada me asusta. - mentí

- Mientes. Hay tantas cosas en este hogar que podrían asustarte...cambiando de tema. - dijo tate cambiando su rostro el cual estaba feliz a uno serio y frio que incluso me daba escalofríos. - A donde ibas?

- Al colegio. No esta tan peor como creí. - menti, lo odio, pero no quiero faltar tanto.

- Quedate, solo hoy...mañana podrás regresar

- Tate, si no voy, viviré debajo de un puente sin dinero, y con mi ropa toda sucia, incluyendome. - me crucé de brazos.

Tate agachó su cabeza haciendo que su nariz chocara con la mía, y dejara un beso sobre mis labios.

- Quédate, pasa este día conmigo, podemos jugar scrabble, si eso quieres...si no quieres estar conmigo lo entenderé y te dejaré ir. - tate se separó del beso.

Como podría decirle que no con su forma de pedirmelo?.

- solo necesitaba que lo volvieras a pedir. - dije riendo, tate imitó mi sonrisa y volvió a juntar sus labios con los míos.

Después de aquella sesión de besos, que por supuesto me hacían sentir nerviosas, ya qué nunca había procurado hacer esto con un chico, mucho menos cuando al parecer tate es la primera persona que lo hace.
Ambos estabamos en mi habitación, escuchando nirvana, por que a tate le encantaba escuchar la voz de kurt cobain, y para mi, no era un problema pasar el rato y escucharlo con el.

Tate leía algo en mi computador mientras que yo jugaba con plastilina roja que tenía guardada en mi cajón de utiles escolares.

- Tu crees en la muerte? - habló de repente tate, yo emití un sonido como si me diera igual.

- Creo que todos de alguna forma moriremos, en lo personal, espero ese dia con ansias. - dije bromeando, tate cerro mi computador y se sentó frente a mi.

- No, lydia, crees en la muerte? Como, en fantasmas que pasean en la oscuridad...? - preguntó tate de nuevo.

- Si...si lo creo. Por qué? - pregunté sonriéndole.

- Por nada. - dijo tate cambiando su rostro.

- Vaya...- dije confundida. - Tate confieso que a veces te comportas muy extraño, a veces pienso que estas loco o algo por el estilo.

Tate volvió a observarme y su rostro se puso serio, sus ojos se volvieron mas oscuros de lo normal y eso comenzó a asustarme.

- Piensas que estoy loco? Solo te pregunté si creías en los fantasmas, tu respuesta fue algo tonta. - confeso tate.

- Esperabas un...si tate, los veo a diario? - pregunté incrédula.

- Es que aún que no lo creas, los fantasmas son reales, y lidió con esa idea todo él tiempo. Nunca se van.

Ahora mismo no se si la loca soy yo, o el.

- Entiendo...- dije nerviosa.

- Deberia irme, creo que te hice sentir asustada o nerviosa, no lo se.

Tomé la mano de tate para que no se levantara.

- No...quedate, me gusta estar contigo, y no me asustas. - dije, el solo se quedó parado pensando bien las cosas y se volvió a sentar.

- lo siento...- respondió tate.

- No importa. - le sonreí y bese su mejilla.

- Te haz cortado? - preguntó

- No, ya no lo veo necesario. Ademas, encontre el perfil de mi padre en facebook, le mande un mensaje y espero que ya lo haya respondido.

- Facebook? - preguntó tate como si no conociera aquella aplicación. Yo reí levemente.

- Si, facebook, tienes uno? - pregunté sonriendole a este.

- Qué es facebook? - preguntó de nuevo.

Definitivamente estaba en otro mundo, en el que no le importan mucho las redes sociales.

- Olvidalo. - dije riendo y encendiendo mi computador.

- Dime, quiero ser parte de ese nuevo mundo. - respondió tate tomando mi mano, le sonreí y asenti.

- Es extraño que no conozcas eso, es como si vivieras debajo de una piedra o algo. Pero el saber que no lo conoces me reconforta, es una red social donde conoces personas de otro mundo...donde tus padres de obligan a no aceptar extraños o mantener una relación a distancia con ellos. - expliqué

- oh...- respondió

- Eres muy tierno - comence a burlarme, tate se quedó en silencio y comenzó a reir.