¿Estás Mintiendo?

Capítulo 25 - Lo que hizo Andrés

Espero sentado dentro de la estación policial, me tiembla una de mis piernas y creo que ya me he mordido todas las uñas de mis dedos, de pronto un policía se me acerca, me dice que por favor le acompañe y me hace entrar a un área de interrogación. No es como en las películas, esos lugares grises con un espejo gigante, una mesa y una taza de café.

El lugar donde estoy es un simple escritorio, donde un detective me espera, le rodean muchos escritorios más con algunos de sus compañeros de trabajo acompañándole en la sala.

—Buenos días Lucas.

—En realidad, es solo Luck —le estrecho la mano —Buenos días.

—Okay, solo Luck, mi nombre es Octavio, estoy en el caso del papá de tu novio, el señor...

—Oh... —digo más aliviado de lo normal, llamando su atención —Oh —vuelvo a repetir, con más tristeza —lo siento, estaba nervioso, nunca me habían llamado para algo así.

—¿Pensabas que era para algo malo?

—En este país y yo siendo negro, nunca se sabe —entrelazo mis manos, inhalo y exhalo disimuladamente para tranquilizarme.

—Okay, entonces —él abre una carpeta color verde —Según lo que hemos estado investigando, uno de los últimos lugares donde estuvo la víctima fue en tu casa, el GPS del vehículo tenía historial, ¿Podrías decirnos precisamente que estaba haciendo allí? ¿Cuándo rato estuvo? ¿De qué hablaron?

—Okay —asiento —Bueno... estuvo cerca de diez minutos, él me habló de que quería que Andrés y yo volviéramos a estar juntos.

—¿A él le gustaba la relación que ustedes tenían?

—Al contrario, él fue bastante racista conmigo muchas veces, hacía comentarios un poco feos, pero nunca me los decía en la cara, yo lo escuchaba murmurar.

—Entonces ¿Ustedes no se llevaban bien?

—Para mí el no existía, se me hizo raro que fuera a mi casa ese día.

—¿Y qué le dijiste?

—Pues que la relación era entre Andrés y yo, que él no debía interferir, y bueno, le pedí que se fuera de mi casa, que me dejara tranquilo, me sentía muy incómodo con él allí.

—¿Te sentiste agredido de alguna forma?

—No, no, solo... nunca antes habíamos hablado, hacerlo cuando la relación ya había terminado siento que no tenía ningún sentido —el poli asiente y cierra la carpeta, me sonríe y me pide algunos datos personales, luego se pone de pie para llevarme hasta la salida y se despide muy amable.

Ya a solas, miro el cielo y creo que va a volver a llover, me apresuro en llegar a mi camioneta, me he perdido la primera clase en la Universidad y no pienso seguir faltando.

Cuando llega la hora de almuerzo, uno de los profesores me hace señas en los pasillos y me pide que por favor me acerque, camino hacia su salón y él me pregunta que tal estoy.

—No puedo decir que estoy bien, la verdad estoy algo confundido con todo lo que pasa últimamente —levanto los hombros con resignación, él asiente y presiona sus labios.

—Sobre el trabajo que tenías con Allen, sé que quizás no alcanzaste a terminarlo, y debes estar bajo mucho estrés por lo que pasa con él y lo sucedido con el padre de Andrés, así que voy a suspender ese trabajo para ti y más adelante pensaremos en como recuperar la calificación.