LUCK
La segunda pelea de la noche no va tan mal, pero siento que algo anda raro con Aiden, cuando termina el primer tiempo con él ganando por un par de puñetazos, veo que tiene fiebre, me asusto porque seguramente está enfermo y pelear es todo lo contrario de lo que debería estar haciendo.
—Deberíamos irnos a casa, continuar mañana —digo, Aiden niega con la mirada, se lanza una botella de agua en la cabeza y su cabello comienza a gotear, Dios, creo que eso es peor. Aiden se pone de pie, pero Leo le toma la mano, le dice que no es necesario que siga, entonces el menor se sube al ring de pelea y continúa lo de Aiden.
Jordan se lleva a Aiden al baño para limpiarlo y que se sienta mejor, me quedo a solas con Gabriel, quien mira detenidamente como le llegan algunos puñetazos a Leopoldo, pero los resiste con mucha valentía y gana la pelea.
—¿Te sucede algo con él? —pregunto curioso, Gabriel se espanta de inmediato, niega riendo y haciendo un gesto de disgusto —No tiene nada de malo si...
—No sé que estás insinuando —responde —Pero no, absolutamente no.
—Es guapo, tiene cara de loco y es muy pesado, pero...
—Pero no, Luck —ríe —No, definitivamente no.
—¿No qué? —pregunta Leo, mierda, ha ganado la pelea y está justo frente a nosotros.
—Límpiate la nariz, te sale sangre —Gabi le da un pañuelo, pero Leo lo deja con la mano estirada, camina directo al baño, justo cuando Aiden y Jordan vienen de regreso.
—¿Ya terminó tan pronto? —dice Jordan, yo asiento algo agotado —¿Cuantas peleas faltan?
—Esta era la última de la noche, mañana debemos regresar por penúltima vez —Aiden asiente, le ayudo a caminar hasta el vehículo de Gabi, nos quedamos esperando a que Leo salga de los baños, pero cuando aparece al final del pasillo, se despide con un gesto algo rancio y se marcha a pie, rodeo la mirada, Aiden carga su cabeza en mi, lo llevo a mi casa y dejo que caiga sobre mi cama, se duerme de inmediato, a este ritmo él va a terminar muerto, no puede más, y aún nos faltan cuatro peleas más, no puede ser.
***
Cuando Aiden despierta puedo reconocer de inmediato el resfrío, Charlie va por medicina a la farmacia mientras yo le preparo comida, tiene frío, mucho frío, le ayudo a abrigarse pero no demasiado, eso luego va a provocar que la fiebre suba otra vez, o eso supongo, no sé muy bien cuidar a las personas cuando se enferman, por suerte Charlie sí.
Llega el momento en que nos empezamos a ordenar para ir al callejón de las peleas, pero Aiden está dormido, y creo que es lo mejor, si estuviera despierto estoy seguro que se levantaría e iría a pelear.
Le aviso a Jordan y a Gabriel que esta noche no iremos, Jordan queda decirle a Leo, pero al rato me dice que Leo de todos modos irá a pelear esta noche, que quiere terminar pronto con este infierno que le ha provocado a Aiden.
Yo no sé qué decir, solo me preocupa por ahora cuidar a mi chico, nada más.
GABRIEL
Realmente no sé qué mierda hago, se supone que hoy la noche sería libre, pero cuando Jordan me dijo que nadie vendría a pelear, y luego me envió un mensaje diciendo que de todos modos estaría acá porque Leo iba a pelear, no sé qué pasó, le dije a Jordan que se quedara en casa, porque él también está muy adolorido, ha peleado bastante.
Así que, no sé qué hago, pero me bajo de mi auto y camino por el callejón, ya hay una pelea en el ring, pero Leo no está por ningún lugar, camino en dirección a la zona de apuestas, hasta que alguien me toma del brazo y me gira hacia él. Leo tiene ya los guantes negros puestos, el cabello mojado y no lleva sudadera, mierda.
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¿Estás Mintiendo?
Teen FictionCuando tenía 14 años, a Luck le comenzó a hablar un chico misterioso por mensajes de texto, se volvieron amigos muy rápido hasta que los mensajes se hicieron públicos en el Colegio y todo el mundo supo que él estaba enamorado de Aiden, su mejor amig...